Ginseng entre neones

Gran curiosidad ha despertado ¨²ltimamente entre los viajeros occidentales el Asia oriental y supercapitalista. Pero no son muchos los que consideran la visita a la d¨¦cima ciudad m¨¢s grande del mundo. ?No admitir¨ªa la mayor¨ªa el desconocimiento de este pueblo, la inquietud ante su gastronom¨ªa, cierto temblor ante la proximidad del avieso hermano norcoreano? Razones de m¨¢s para internarse en esta metr¨®polis de 10 millones de habitantes, 24,5 si se considera el ¨¢rea metropolitana, segunda mayor del mundo por detr¨¢s de Tokio.

7.00 Budismo ma?anero

Gran paradoja asi¨¢tica: la ajetreada y veloz capital coreana empieza el d¨ªa contemplativamente frente a la pl¨¢cida y dorada imagen del boddishatva. El budismo seon -que en Jap¨®n deriv¨® en zen- forma parte de la espiritualidad cotidiana de millones de personas. M¨¢s all¨¢ del eventual ratito de meditaci¨®n matinal, extranjeros y nativos de todas las edades se acogen al muy popular programa de temple stay (estancia en los templos) que -en santuarios como los de Bongeunsa - A, Bongwonsa - B, Hwagyesa - C o Jogyesa - D- permite conocer la disciplinada rutina de los monjes. De ellos se dice que practican una de las formas de budismo m¨¢s puras de Asia.

11.00 Una ra¨ªz con misterio

Si Asia encierra milenarios secretos sobre medicina natural, Corea atesora algunos de los m¨¢s preciados. De entre todas las plantas de poder, ninguna como la m¨¢s famosa del mundo: el ginseng. La ra¨ªz, que a menudo crece con forma humana, se vende a granel en el mercado popular de Namdaemun (5). Pero conviene estar atento a las notables diferencias de calidad. El bueno vale muy caro, habr¨¢ estado seis a?os bajo tierra y tendr¨¢ un color rojo vino. De m¨¢s a menos, las variedades a tener en cuenta se llaman cielo (unos 346 euros los 150 gramos), tierra (unos 270) y bueno (146). Adem¨¢s, siempre puede optarse por los muy econ¨®micos t¨¦s y dulces de ginseng.

13.00 Delicias picantes y fermentadas

La comida coreana es una de las m¨¢s extra?as, complejas y fascinantes del mundo. Exige, todo hay que decirlo, cierto valor al principiante, que puede sentirse intimidado por los sabores fuertes, la omnipresencia del picante y la importancia de los ingredientes fermentados. Celeb¨¦rrimo es el kimchi, aperitivo a base de col picante que aparece en las tres comidas. Y favoritos son el bibimbap -plato de arroz con vegetales y carne- y el bulgogi -buf¨¦ de carne que el comensal cocina en una plancha habilitada en su propia mesa-. Tambi¨¦n sobre un plato caliente se presenta el pajeon o pizza coreana, convertida en haemul cuando lleva marisco. ?M¨¢s? El poderoso galbijjim, especie de rag¨² de costillas de res. Y el pollo al ginseng. Todo se puede comer en cualquier restaurante nacional: recomendables los de estilo tradicional, como Sun Mi Nam (6) (38 Gwanhun-dong Jongno) o Pulhyanggi (7) (152-60 Samseong-dong Gangnam). O, convertido en experiencia posmoderna, en Congdu (8) (en el Seoul Museum of History; 50 Saemunan-gil), restaurante de cocina neocoreana regentado por el chef Luke Jang, el disc¨ªpulo seul¨¦s de Ferran Adri¨¤.

16.00 T¨¦ y arte en Insadong

Toda Asia siente predilecci¨®n por el t¨¦, y Corea no es la excepci¨®n. Para comprar un rico t¨¦ verde aromatizado puede visitarse cualquier tienda de la cadena O'Sulloc (www.osulloc.com), que cultiva su g¨¦nero en su propia granja org¨¢nica en la isla sure?a de Jeju. Mejor ir a la bell¨ªsima tienda del barrio de Insadong (frente a la galer¨ªa Ssamziegil - (9)), encantador barrio que hay que visitar por su profusi¨®n de galer¨ªas de arte y restaurantes. Adem¨¢s, no hay mejor sitio para comprar cer¨¢mica, pinceles de caligraf¨ªa, textiles...

18.00 Atardecer en el barrio universitario

Seg¨²n un reciente n¨²mero de Newsweek, Corea del Sur es un punto clave mundial a la hora de cursar una carrera: hay cerca de 200 universidades en todo el pa¨ªs, y casi 40 est¨¢n en Se¨²l. Una de las principales es la de Hongik (10), centro neur¨¢lgico de moda, dise?o y cultura. El atardecer es un momento especial porque se llenan los caf¨¦s y centros culturales. Acaso el m¨¢s interesante de estos es el centro de arte Sangsang Madang (11) (367-5 Seogyo-dong), multicomplejo de 11 niveles que contiene varios espacios expositivos, talleres de pintura, estudio fotogr¨¢fico, sala de conciertos, cine, caf¨¦ y una academia donde se imparte cultura audiovisual, c¨®mic o filosof¨ªa. El Sangsang puede vanagloriarse de dar continuidad al impulso creativo de artistas de prestigio internacional como Park Seo Bo, Lee U Fan o el ilustre pionero del videoarte Nam June Paik.

20.00 El gran salto teatral

Tres son los distritos culturales de Se¨²l: Insadong (12), Heyry (13) y Tajanglo - N. En este ¨²ltimo hay 130 teatros, ?m¨¢s que en Broadway! La escena vive un gran boom en Corea -naci¨®n que dedica el 1% de su PIB al teatro-; de hecho, 12.500 obras se registraron en todo el pa¨ªs, 1.000 de ellas en este distrito. Y ya empieza a recoger frutos a nivel internacional. La obra Jump! fue ponderada por The New York Times como la alternativa asi¨¢tica a Stomp. A?adiremos que esta funci¨®n que une humor, teatro gestual y artes marciales es m¨¢s original que la propuesta percusiva de la compa?¨ªa brit¨¢nica. Entre Tigre y drag¨®n y Marcel Marceau, si ustedes quieren.

22.00 Electricidad est¨¢tica

De noche, el centro de la ciudad se convierte en una selva de electricidad est¨¢tica, una fant¨¢stica guirnalda de ne¨®n esparcida por barrios c¨¦ntricos como el muy moderno y popular Myeongdong (15). Los edificios albergan variadas ofertas. Sobresalen dos t¨¦rminos: los hofs -germanismo que designa bares y cervecer¨ªas en las que comer algo o tomarse un fragante capsule coffee- y los bangs (literalmente, habitaciones). Si son m¨²ltiples los establecimientos donde comer o beber (probar en el Bling Bling (16), en el barrio de Yeoksam-dong), son directamente incontables los PC bangs, suerte de cibercaf¨¦s donde gente de todas las generaciones acude a jugar, navegar o socializar a trav¨¦s de Cyworld, la red social coreana que Facebook no consigue desbancar. Fuera brillan los luminosos de Samsung, LG, Hyundai, Kia...

24.00 La noche multicultural

Cuando decimos que Se¨²l es una ciudad multicultural nos referimos inequ¨ªvocamente a Itaewon (17). El barrio m¨¢s internacional de la ciudad debe su fama en buena (o mala) parte a la omnipresencia de soldados norteamericanos (recu¨¦rdese que cerca de 25.000 unidades forman parte del ej¨¦rcito com¨²n frente al impredecible hermano norcoreano). Marines aparte, Itaewon cobra todo su sentido de noche, cuando cierra el museo Leeum Samsung Museum (18) (proyectado por Rem Koolhaas), abren los restaurantes m¨¢s distinguidos (Santorini (19), en 119-10 Itaewon-dong), los hoteles boutique abren sus cocteler¨ªas (como el IP, al pie de la estaci¨®n de Itaewon (20)) y las discotecas calientan motores (caso del Volume Club (21), en 34-69 Itaewon-dong). El d¨ªa termina ah¨ª. O empieza, seg¨²n los h¨¢bitos.