Ya nadie defiende al tripartito

Hay un m¨¦rito que nadie cuestiona a Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU). Sus furibundas y sistem¨¢ticas cr¨ªticas a la coalici¨®n de la izquierda que ha gobernado en Catalu?a los ¨²ltimos siete a?os, amplificadas por errores propios del Gobierno de Jos¨¦ Montilla, han calado de tal manera que la palabra tripartito ha pasado a ser sin¨®nimo de desaguisado e inestabilidad en el imaginario colectivo. Solo un 12,6 % de los catalanes, seg¨²n el CIS, lo ven como una f¨®rmula repetible. El rechazo al tripartito es tal que hasta los tres partidos que lo han integrado -socialistas, republicanos y ecosocialistas- han dejado de defenderlo esta campa?a. El Partit dels Socialistes (PSC) ni siquiera ha incluido referencias a ¨¦l en los cinco puntos b¨¢sicos que repite en cada mitin. Y eso que el l¨ªder socialista catal¨¢n, Jos¨¦ Montilla, inst¨® hace apenas un mes a sus bases a "no renegar" del tripartito.

Los socialistas han ideado una f¨®rmula para hacer compatible esta petici¨®n del presidente de la Generalitat y lo que les recomiendan sus asesores de campa?a. Defienden la obra de gobierno como nadie, pero con escas¨ªsimas referencias a la coalici¨®n que ha permitido sustentar a Montilla en la Generalitat. De esta forma, el presidente repite una y otra vez, como hizo ayer en el Palacio de Congresos de Tarragona, que su Ejecutivo ha contratado dos m¨¦dicos, tres mossos d'esquadra y cinco maestros cada d¨ªa. Con ello buscan el contraste con la raqu¨ªtica apuesta por los servicios sociales b¨¢sicos que hizo Jordi Pujol en sus ¨²ltimos a?os al frente de la Generalitat.

Generalmente, las ¨²nicas referencias de Montilla al tripartito son para decir que su tiempo "ha pasado" o que ya no se puede reeditar "en estas circunstancias". De esta manera, espera contentar a la parte de su electorado harta de hacer concesiones a Esquerra (ERC). Falta ver qu¨¦ ocurrir¨ªa si la noche electoral del 28-N el PSC, ERC e Iniciativa (ICV) tuvieran opci¨®n de volver a sumar, descabalgar de nuevo a CiU y acabar probablemente con la carrera pol¨ªtica de su m¨¢ximo rival, Artur Mas. Pero mientras tanto, el mensaje es un¨ªvoco: se acab¨® el tripartito.

En cualquier caso, el principal mensaje de Montilla en todos y cada uno de sus m¨ªtines es la involuci¨®n que supondr¨ªa para Catalu?a un Gobierno de CiU apuntalado por el Partido Popular (PP), que recurri¨® el Estatuto, o por ERC, que ahora exige que se convoque un refer¨¦ndum de independencia para aportar sus votos.

Si los socialistas se refieren al tripartito como algo lejano y pret¨¦rito, sus todav¨ªa socios de ERC ya parecen haber olvidado sus siete a?os en la Generalitat. Cuando hablan del tripartito lo hacen para defender la gesti¨®n de los departamentos que han capitaneado, especialmente los servicios sociales y el ¨¢rea de comercio, pero poco m¨¢s. En todo lo dem¨¢s, aseguran, se ha agotado el recorrido. Y ahora ya solo cabe la independencia.

ICV es la que menos critica el tripartito. Los de Joan Herrera saben que la ¨²nica forma de permanecer en el Gobierno es con otro pacto igual. Sin embargo, son frecuentes las pullas que lanzan a las concesiones excesivas que, en su opini¨®n, se han hecho a la derecha, especialmente con el mantenimiento de las subvenciones a escuelas de ¨¦lite que separan a los alumnos por sexos. Sin embargo, Herrera reiter¨® ayer que "todo est¨¢ abierto". El empate que por ahora hacen prever las encuestas entre CiU y el bloque del tripartito puede darle la raz¨®n.