El Gobierno camufla el anuncio de la desaparici¨®n de los 426 euros para parados

La ayuda de 426 euros para parados sin rentas constituye el mejor ejemplo de las contradicciones del PSOE sobre c¨®mo responder a la crisis. Los socialistas la defendieron con entusiasmo en el momento de su creaci¨®n, hace m¨¢s de un a?o; poco despu¨¦s fueron deslizando pistas sobre una pronta desaparici¨®n. Y a pesar de alguna se?al en sentido contrario -el presidente de Castilla-La Mancha, Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda, asegur¨® el mes pasado que se iba a mantener-, este subsidio ya tiene fecha de defunci¨®n: a mediados de febrero. A partir de ese momento no entrar¨¢n nuevos beneficiarios, aunque quienes ya la est¨¦n percibiendo y agoten el cobro m¨¢s tarde la mantendr¨¢n hasta el final.

Lo curioso fue c¨®mo La Moncloa present¨® la finalizaci¨®n de esa ayuda extraordinaria. El resumen de medidas facilitado ayer a la prensa la inclu¨ªa dentro de otra mucho m¨¢s positiva: la incorporaci¨®n de 1.500 orientadores de empleo que fomentar¨¢n la inserci¨®n laboral de los parados y que se sumar¨¢n a otros 1.500 ya contratados en 2008. "Como consecuencia de ello", a?ade la nota, la ayuda de 426 euros "concluir¨¢ en febrero, como estaba previsto". En realidad, el Ejecutivo tiene potestad para prorrogar cuando quiera esta ayuda, que hasta ahora se ha renovado dos veces y que los desempleados perciben por un periodo m¨¢ximo de seis meses. Y mejorar la plantilla de los servicios p¨²blicos de empleo no implica necesariamente hacer desaparecer la ayuda.

Se da la paradoja, adem¨¢s, de que solo un d¨ªa antes de este anuncio el ministro de Trabajo, Valeriano G¨®mez, hab¨ªa explicado en el Congreso de los Diputados que su departamento trabajaba en una redefinici¨®n de esta renta para condicionarla a la participaci¨®n en formaci¨®n. Esa perspectiva queda ahora descartada, aunque es probable que se dise?e una alternativa.

Desde que entr¨® en vigor, en agosto de 2009, unos 700.000 parados que hab¨ªan agotado la prestaci¨®n y el subsidio ordinario se han beneficiado de la renta de 426 euros, con un coste para las arcas p¨²blicas cercano a 1.400 millones de euros. La desaparici¨®n de esa ayuda supondr¨¢ un notable ahorro en un momento en que cada euro cuenta.