El Gobierno abre la puerta a la nacionalizaci¨®n de las cajas con m¨¢s problemas

V¨ªa real decreto y en ¨²ltimo extremo con nacionalizaciones: el Estado al rescate de la banca. M¨¢s de mil d¨ªas despu¨¦s del inicio de la crisis, el Gobierno se vio obligado ayer a dar una nueva vuelta de tuerca a la reforma financiera a causa de la combinaci¨®n de dudas y desconfianza en la que vive sumido el sistema bancario, y en particular las cajas de ahorros, muy castigadas por el revent¨®n de una de las mayores burbujas inmobiliarias del mundo. El sector p¨²blico pilotar¨¢ una reforma que eleva de forma inmediata el capital m¨ªnimo exigido a bancos y cajas para reforzar su solvencia, y en ¨²ltima instancia se convertir¨¢ en accionista de las entidades m¨¢s castigadas.

La recapitalizaci¨®n necesaria no superar¨¢ los 20.000 millones de euros, seg¨²n el Gobierno. El Ejecutivo quiere que el sector busque ese dinero por sus propios medios: si no lo consigue -y eso es poco probable en algunos casos-, inyectar¨¢ dinero p¨²blico a trav¨¦s del fondo de rescate (el FROB) de forma temporal, con un plazo m¨¢ximo de cinco a?os, y siempre que las entidades con problemas sean o se hayan transformado en bancos.

Las entidades tienen hasta septiembre para intentar captar inversores privados

El capital m¨ªnimo exigido por decreto ser¨¢ del 8%, y a¨²n mayor para las cajas

Las nuevas ayudas se condicionar¨¢n a la conversi¨®n de las cajas en bancos

Eso, en rom¨¢n paladino, es abrir la puerta a una posible nacionalizaci¨®n (aunque sea parcial y temporal), un camino que EE UU, Reino Unido y otros pa¨ªses emprendieron al inicio de la crisis y que Espa?a se ve obligada a recorrer ahora, ante la constataci¨®n de que la confianza en la econom¨ªa espa?ola depende estrechamente de la confianza en el sistema financiero, y de que ambas est¨¢n en horas bajas. Las nacionalizaciones, en todo caso, afectar¨ªan a un n¨²mero "muy limitado" de entidades, dijo el presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero en una entrevista a Veo 7.

De nuevo, los mercados y sus exigencias est¨¢n tras esa decisi¨®n. En mayo, el ataque a la deuda p¨²blica de la eurozona oblig¨® al Gobierno a presentar un plan de austeridad digno de una posguerra. Los ataques no cesaron y explican el posterior aceler¨®n en las reformas del Gobierno: primero fue la laboral (que provoc¨® una huelga general), y ahora la de las pensiones y la financiera, esta ¨²ltima a trav¨¦s de un real decreto que estar¨¢ listo en febrero.

La versi¨®n espa?ola de la crisis ha generado sus particulares activos t¨®xicos: los mercados desconf¨ªan de la exposici¨®n de la banca al sector inmobiliario. "Para restaurar la confianza de los mercados -dijo la vicepresidenta Elena Salgado en una multitudinaria comparecencia ante la prensa, convocada con apenas unas horas de antelaci¨®n-, Espa?a refuerza los requerimientos de capital, adelant¨¢ndose a los requisitos internacionales para 2013".

El Ejecutivo quiere vencer las reticencias de los inversores sobre la salud del sistema financiero dejando que la burbuja inmobiliaria siga deshinch¨¢ndose por s¨ª sola, pero a cambio exigiendo m¨¢s capital a las entidades que en su d¨ªa se empacharon de cr¨¦dito. Se establece de forma inmediata un capital m¨ªnimo del 8% de los activos, que ser¨¢ superior "para las que no cotizan ni tienen presencia de inversores privados y con mayor dependencia [un peso del 20% de la financiaci¨®n] de los mercados mayoristas", afirm¨® Salgado. A pesar de las palabras de la ministra, ese 8% est¨¢ por encima de las exigencias futuras de la normativa internacional (Basilea III), pero en l¨ªnea con lo que demandan los mercados.

Los plazos son fundamentales. El decreto ley ver¨¢ la luz a lo largo de febrero. Y las cajas pueden presentar sus cuentas de resultados a finales de ese mes: ser¨¢ entonces cuando el Banco de Espa?a d¨¦ a conocer las que incumplen los requerimientos m¨ªnimos de capital. Las entidades que no alcancen ese nivel de exigencia -sobre las cifras de activos de cierre de 2010, para evitar que restrinjan el cr¨¦dito- dispondr¨¢n de plazo hasta oto?o para captar en el mercado los recursos necesarios. El grupo liderado por Caja Madrid, las fusiones regionales de Galicia, Catalu?a y Castilla y Le¨®n, adem¨¢s de Bankinter, son en estos momentos los incumplidores, seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles.

El problema es que en estos momentos los mercados est¨¢n cerrados bajo siete llaves para las entidades espa?olas. Si el sector no encuentra capital, ser¨¢ el FROB quien invierta con un horizonte de temporal de cinco a?os. Eso s¨ª: las cajas que tengan problemas deber¨¢n iniciar su conversi¨®n en bancos para acceder al dinero p¨²blico, lo que para los expertos consultados supone dise?ar un final ordenado para el modelo de cajas actual.

Salgado reconoci¨® ayer que su equipo, con el asesoramiento del Banco de Espa?a, ha trabajado a contrarreloj durante el fin de semana para presentar la reforma. Y confi¨® en que el plan sea del agrado de la patronal de las cajas, muy cr¨ªtica en los ¨²ltimos d¨ªas con los detalles que se iban filtrando, en un debate de una intensidad creciente. Finalmente, el Ejecutivo no ha ido tan lejos como quer¨ªa el Banco de Espa?a -con la conversi¨®n obligatoria de cajas en bancos- y permitir¨¢ que la reforma pactada con el sector siga su curso para las entidades que cumplan con las nuevas condiciones, de manera que la transformaci¨®n de cajas en bancos es s¨®lo opcional. La vicepresidenta acert¨®: fuentes de la patronal explicaron que el plan "es positivo". "Pese a que fija exigencias muy elevadas de capital, dan un margen de tiempo para que las entidades que lo necesiten busquen una salida", seg¨²n fuentes de las cajas.

El dato clave del d¨ªa son esos 20.000 millones de euros adicionales. El Gobierno considera que esa ser¨¢ la cifra m¨¢xima que necesitar¨¢n las cajas para crear mullidos colchones de capital por si su cartera inmobiliaria sigue perdiendo valor. Y conf¨ªa en que sea suficiente para poner en marcha una suerte de c¨ªrculo virtuoso: las dificultades del sector financiero ceder¨¢n si mejora la percepci¨®n del riesgo con ese mayor capital, y eso dar¨¢ fuelle a la econom¨ªa. "A la postre se trata de que los mercados se queden satisfechos con esa cifra: ya veremos. Eso es suponer que bastar¨¢n esos 20.000 millones para absorber las p¨¦rdidas que los activos inmobiliarios t¨®xicos puedan generar en adelante", explic¨® Alfonso Garc¨ªa Mora, socio director de AFI.

El anuncio de la ministra supone reformar la ley de recursos propios de entidades de cr¨¦dito y el FROB. Y dar¨¢ mucho trabajo al Banco de Espa?a: el supervisor debe realizar pruebas de esfuerzo al sector en los pr¨®ximos meses, y si alguna entidad necesita capital adicional en los escenarios que se definan "¨¦ste deber¨¢ obtenerse tambi¨¦n", dijo Salgado. Las entidades que necesiten elevar sus colchones de capital deber¨¢n plantear al Banco de Espa?a su estrategia hasta oto?o. Y en ese momento -a finales de septiembre-, la instituci¨®n que dirige Miguel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez evaluar¨¢ a las entidades y se?alar¨¢ a las que incumplan los requisitos anunciados ayer.

Para estas entidades, el Ejecutivo autorizar¨¢ al FROB a inyectar capital en condiciones de mercado y de acuerdo con el r¨¦gimen de ayudas p¨²blicas. De esa manera el Ejecutivo evita que las inyecciones de dinero p¨²blico computen como d¨¦ficit, una de las obsesiones de Salgado -y los mercados- con la end¨¦mica crisis de la deuda a¨²n coleando. Esos 20.000 millones no generar¨ªan d¨¦ficit, pero s¨ª deuda p¨²blica, en torno a dos puntos m¨¢s de PIB.

Espa?a se sit¨²a as¨ª a la vanguardia internacional en exigencias de capital, aunque en gran parte por obligaci¨®n. Y el culebr¨®n dista mucho de haber acabado: las cajas seguir¨¢n en el disparadero hasta oto?o y encontrar ahora esos 20.000 millones no ser¨¢ f¨¢cil. El Gobierno no impone la conversi¨®n de las cajas en bancos, pero las que no levanten capital no tendr¨¢n m¨¢s remedio. Solo seguir¨¢n siendo cajas las que no tengan ninguna necesidad de capital.