"La mejor empresa es la que invierte en desarrollo personal"

?Qu¨¦ tienen en com¨²n un arquitecto y Microsoft? La respuesta es que para ambos es imprescindible "la idea, la creatividad, la innovaci¨®n". Quien contesta es un estudiante de arquitectura, Jos¨¦ Francisco Ram¨®n, que no tuvo dudas en elegir la compa?¨ªa de inform¨¢tica para su experiencia como CEO por un d¨ªa.

En el joven pesaron, adem¨¢s, otros dos motivos: el primero es que la empresa le parec¨ªa "la m¨¢s atractiva del mundo"; el segundo, que as¨ª podr¨ªa averiguar c¨®mo su presidenta, Mar¨ªa Gara?a, "ha llegado ah¨ª con lo joven que es". Bien. Si a estos encomios se a?ade que Jos¨¦ Francisco es tan madridista como Mar¨ªa, no es de extra?ar que el estudiante se ganara r¨¢pido a la directiva, que tambi¨¦n ten¨ªa buenas palabras para ¨¦l: "Me llama la atenci¨®n que fuera delegado de su clase en la universidad. Ahora que vivimos con tantas prisas, me sorprende la gente que es capaz de dar algo m¨¢s all¨¢ de lo que se supone que son sus responsabilidades".

El futuro arquitecto pas¨® el d¨ªa de reuni¨®n en reuni¨®n; ahora de estrategia, luego de innovaci¨®n, m¨¢s tarde de imagen. Entretanto, mientras caminaba por los pasillos, se preguntaba: ?d¨®nde estar¨¢n los empleados que faltan? Pero no faltaban. En Microsoft se practica un sistema de trabajo que no est¨¢ muy extendido en Espa?a y que a ellos -hay pocas dudas- les funciona. Se trata de la flexibilidad de jornada. Trabajan por objetivos, organizando sus horarios como mejor les conviene y, cuando lo prefieren, desde casa.

Antes de despedirse, Mar¨ªa le aconsej¨® a Jos¨¦ Francisco que no tuviera prisa y que buscara "una empresa que permita viajar, moverse, que invierta en el desarrollo de la gente". La cita concluy¨® con el emplazamiento a una ¨²ltima reuni¨®n, el lunes siguiente, entre 600 empleados de varios pa¨ªses por videoconferencia: lo que en Microsoft llaman un All hands meeting.