Bono y Barreda ensalzan a Rubalcaba en pleno desconcierto sobre la sucesi¨®n

No est¨¢ claro si Emilio Bot¨ªn lograr¨¢ influir en Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, a quien el s¨¢bado dio consejos en p¨²blico sobre qu¨¦ hacer con su futuro pol¨ªtico. Pero sin duda el banquero no controla el PSOE. El debate interno sobre la sucesi¨®n est¨¢ desatado. Y el desconcierto tambi¨¦n. Hace una semana parec¨ªa que Zapatero anunciar¨ªa el 2 de abril que no se presentar¨¢. Ahora solo ¨¦l parece saberlo. Muchos incluso creen que no lo tiene decidido. Y nadie sabe cu¨¢nto influir¨¢ en esas supuestas dudas la petici¨®n expresa de aparcar la sucesi¨®n que le hicieron Bot¨ªn y otros grandes empresarios en una at¨ªpica reuni¨®n a puerta cerrada en La Moncloa en la que, para sorpresa de la mayor¨ªa, se discuti¨® no solo de econom¨ªa sino del futuro pol¨ªtico del pa¨ªs.

Rubalcaba: "Las cosas est¨¢n cambiando, por eso el PP pide el final del partido"

Mientras, el PSOE sigue su ritmo, ajeno a los consejos de Bot¨ªn. Y cada paso, cada gesto, cada mitin, se interpreta en clave sucesoria. Ayer tuvo lugar un acto especial. Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda presentaba su candidatura en un mitin multitudinario en Alc¨¢zar de San Juan (Ciudad Real). Fue una demostraci¨®n de poder¨ªo como respuesta a Dolores de Cospedal, que hab¨ªa arrasado en Albacete. Barreda puso toda la carne en el asador: hablaron Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, Jos¨¦ Bono, Marcelino Iglesias y Rosa Aguilar. Estaba previsto incluso Guillermo Fern¨¢ndez-Vara, que fall¨® a ¨²ltima hora.

Tanto Bono, a calz¨®n quitado, como Barreda, m¨¢s discreto, mostraron su apoyo a Rubalcaba, y el mensaje se entendi¨® muy claro. Casi tanto como el Sin ti no soy nada con el que recibieron los militantes de forma masiva a Rubalcaba. Es tan evidente que ser¨¢ su lema que el vicepresidente tiene hasta respuesta: "No es as¨ª, es sin vosotros no soy nada, no somos nada", dijo.

Zapatero ha dado ¨®rdenes de parar el debate sucesorio. Pero parece imparable. Una prueba. Bono: "Alfredo, siempre que lo hemos necesitado nos has apoyado. En esta tierra y en quien te habla vas a tener siempre el respaldo que necesites. Es de justicia". Rubalcaba apoy¨® a Bono en 2000, cuando ¨¦ste se enfrent¨® a Zapatero por el liderazgo del PSOE. Bono habl¨® del presidente con cari?o, pero como si fuera el pasado. Lo compar¨® con Adolfo Su¨¢rez, dijo que es injusto c¨®mo se le est¨¢ atacando -"un hombre no es culpable de lo que le ocurre a un pueblo"- e insinu¨® que tal vez logre, como el de Cebreros, ser colocado "entre los grandes hombres".

Otra prueba. Barreda: "Alfredo, cuando yo daba clase de historia en el colegio universitario de Ciudad Real les dec¨ªa a mis alumnos que el futuro nunca se hace a partir de la nada. T¨² has contribuido al presente, eres un hombre de Estado y con tu experiencia transmites confianza".

Lo cierto es que, al margen de los apoyos con los que pueda contar Rubalcaba, al que no solo el ambiente interno sino las encuestas dan como el mejor colocado, lo m¨¢s relevante ahora en el debate sucesorio es qu¨¦ va a hacer Zapatero. Si va a anunciar que no se presenta, si lo har¨¢ antes o despu¨¦s de las elecciones, y qu¨¦ dir¨¢ el 2 de abril. Ni siquiera los m¨¢s cercanos se atreven ya a especular, aunque creen que lo que dijo Bot¨ªn no influir¨¢. Que es una decisi¨®n personal que tomar¨¢ ¨¦l, sin dejarse presionar.

En el PSOE insisten en que el mensaje que les interesa de Bot¨ªn y los dem¨¢s empresarios es otro: el rechazo a las elecciones anticipadas que pide Mariano Rajoy. Tanto Iglesias como Rubalcaba insistieron en una idea: la recuperaci¨®n ha empezado -lo dijeron varias veces pese a los ¨²ltimos datos del paro- y el PP la teme. "Las cosas est¨¢n cambiando y lo ven venir. Han dejado pasar el tiempo y han pasado a pedir que el ¨¢rbitro pite el final", dijo Rubalcaba.

Mientras, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, en Onda Cero, rechaz¨® la idea de Bot¨ªn y otros empresarios y defendi¨® las elecciones anticipadas, como pide Rajoy. Ella cree que "los parados piensan de forma diferente" a Bot¨ªn y saben "que solo acceder¨¢n a un empleo cuando gobierne el PP". La estrategia del PP es clara: Zapatero y Rubalcaba est¨¢n con los grandes empresarios, Rajoy con los peque?os. Los populares creen que ese acercamiento a Bot¨ªn solo aleja a Zapatero del electorado de izquierda, as¨ª que no les preocupa.

Tanto Barreda como Rubalcaba, Bono, Iglesias o Aguilar incidieron en una idea: la defensa del Estado de bienestar y el miedo a que una victoria del PP lo desmonte. Los populares creen que esa estrategia, tras los recortes de Zapatero, no es cre¨ªble, pero al p¨²blico de ayer le entusiasmaba. Aplaudieron a rabiar cuando Rubalcaba record¨® que el PSOE puso en los a?os ochenta las bases para la sanidad, educaci¨®n y pensiones actuales, y cuando pidi¨® votar socialista para que "el Estado de bienestar no sea un p¨¢lido recuerdo de algo que pas¨® en el siglo XX".