La ONU y los pa¨ªses del Golfo fracasan en su intento de forzar la dimisi¨®n de Saleh

Yemen sigue dividido y dividiendo. La pugna entre el presidente Ali Abdal¨¢ Saleh y los opositores se enquista d¨ªa a d¨ªa, ante la impotencia de sus aliados occidentales y de sus vecinos, que ven c¨®mo sus esfuerzos de mediaci¨®n no logran desbloquear la crisis. Ni siquiera la Organizaci¨®n de Naciones Unidas (ONU) ha sido capaz de consensuar una declaraci¨®n com¨²n sobre la revuelta yemen¨ª, que ayer dej¨® otros dos nuevos muertos y vio c¨®mo se elevaban a seis los del d¨ªa anterior.

De madrugada, un motorista abri¨® fuego contra el campamento de los manifestantes en Hodeida, en la costa del mar Rojo, matando a uno de los activistas e hiriendo a otros ocho, de acuerdo con testimonios recogidos por France Presse.

La oposici¨®n yemen¨ª no acepta que el presidente salga con inmunidad

En Ad¨¦n, al sur del pa¨ªs, un polic¨ªa result¨® muerto y tres civiles heridos por disparos de opositores que intentaban impedir que las fuerzas de seguridad les rodearan. Adem¨¢s, seg¨²n fuentes m¨¦dicas, durante la noche murieron otros tres heridos en los enfrentamientos del d¨ªa anterior en San¨¢. Ese d¨ªa, el lunes, tambi¨¦n hubo disturbios en Taiz, la segunda ciudad m¨¢s grande del pa¨ªs, cuando miles de personas se manifestaron para pedir la dimisi¨®n de Saleh. Al menos 130 personas han perdido la vida en dos meses de protestas.

"El di¨¢logo ha reflejado la voluntad de las dos partes de llegar a una soluci¨®n que responda a las aspiraciones del pueblo yemen¨ª", asegura el comunicado del Consejo de Cooperaci¨®n del Golfo (CCG), cuyos ministros de Exteriores se reunieron anteanoche en Abu Dabi con una delegaci¨®n del Gobierno de San¨¢. El lenguaje diplom¨¢tico apenas esconde la frustraci¨®n de los seis vecinos de Yemen por la falta de resultados tangibles de la reuni¨®n.

El CCG (integrado por Arabia Saud¨ª, Emiratos ?rabes Unidos, Kuwait, Catar, Bahr¨¦in y Om¨¢n) decidi¨® ofrecer su ayuda despu¨¦s de que los intentos de mediaci¨®n de Estados Unidos, con el respaldo europeo, acabaran en un callej¨®n sin salida. El eje de su propuesta es similar: que Saleh entregue el poder -en el que lleva m¨¢s de treinta a?os- a su vicepresidente, aunque en un plazo por negociar y a cambio de inmunidad, algo que la oposici¨®n yemen¨ª ya rechaz¨® el pasado domingo en Riad. El presidente acept¨® inicialmente la mediaci¨®n, pero insiste en dejar el poder en sus propios t¨¦rminos. "Es muy frustrante; ha rechazado todas las posibilidades que le hemos ido proponiendo", conf¨ªa un diplom¨¢tico europeo que sigue de cerca las conversaciones.

El deterioro de la situaci¨®n en el pa¨ªs m¨¢s pobre de la pen¨ªnsula Ar¨¢biga tiene tambi¨¦n importantes consecuencias para la seguridad internacional. A medida que el Estado central va perdiendo su ya fr¨¢gil control de algunas regiones, se teme que los terroristas de Al Qaeda ganen terreno. De ah¨ª la reacci¨®n cautelosa de algunos Gobiernos que prefieren alcanzar un acuerdo con Saleh que arriesgarse a un eventual vac¨ªo de poder, como qued¨® claro durante la primera reuni¨®n del Consejo de Seguridad sobre Yemen durante la madrugada de ayer.