"Nosotros no censuramos a nadie"

Nada m¨¢s desembarcar en la Real Academia de la Historia, Gonzalo Anes se empe?¨® en sacar adelante algo que llevaba atascado siglos: el Diccionario Biogr¨¢fico Espa?ol. El jueves present¨® los 25 tomos iniciales, la mitad de la colecci¨®n, arropado por los hispanistas John Elliott y Joseph P¨¦rez, antes de entregarle los ejemplares a los Reyes. Estaba exultante. Pero las sesgadas definiciones de algunos personajes del siglo XX empa?an el logro. Ayer, mientras recorr¨ªa Guadalajara con el brit¨¢nico John Elliott, atendi¨® por tel¨¦fono a EL PA?S. Entre otras cosas, dice que las comisiones de trabajo del Diccionario se limitaron a corregir errores "cronol¨®gicos" y no de contenido.

Pregunta. ?Por qu¨¦ Luis Su¨¢rez hace la biograf¨ªa de Franco?

Respuesta. Se ofreci¨® a hacerla. Luis Su¨¢rez es acad¨¦mico de n¨²mero y conoce los archivos de Franco porque forma parte de la fundaci¨®n, eran archivos a los que nadie hab¨ªa podido acceder. Es un hombre liberal, que en la ¨¦poca de Franco consigui¨® que hiciesen catedr¨¢tico de Historia Medieval a Julio Valde¨®n, que estaba afiliado al Partido Comunista. Es independiente y un magn¨ªfico investigador.

P. ?Est¨¢ de acuerdo con la definici¨®n de Franco?

R. No la he le¨ªdo, pero conf¨ªo en que sea una biograf¨ªa objetiva porque conf¨ªo en Luis Su¨¢rez.

P. Usted pidi¨® criterios objetivos a los bi¨®grafos. ?Le parece objetivo tildar al Gobierno de Negr¨ªn de "pr¨¢cticamente dictatorial" y al de Franco de "autoritario, pero no totalitario"?

R. Preg¨²nteselo a los autores de las respectivas biograf¨ªas.

P. ?No es objetivo definir a Franco como dictador?

R. Franco fue un dictador, no creo que haya nadie que no lo reconozca hoy en d¨ªa. En la Academia se dio una recomendaci¨®n general para que los bi¨®grafos no usaran adjetivos a ser posible. Yo soy director de la Academia, pero no soy el responsable de cada biograf¨ªa. Y en la Academia no hemos censurado a nadie.

Sobre la ausencia de significativos historiadores como Santos Juli¨¢, Paul Preston, ?ngel Vi?as o Juli¨¢n Casanova, el director de la RAH sostiene que "no se le cerr¨® la puerta a nadie". "Tengo entendido que se les invit¨® y que declinaron participar. Hay historiadores notabil¨ªsimos que jam¨¢s han pisado la Academia o participado en alguno de sus actos. Habr¨ªa que preguntar a cada comisi¨®n por qu¨¦ seleccionan a un historiador y no a otro", agreg¨®.

Gonzalo Anes se?ala que la instituci¨®n no polemizar¨¢ con nadie y se aferra al hecho que a ¨¦l le importa: "Espa?a pas¨® de no tener un Diccionario Biogr¨¢fico a tener otro que solo puede ser equiparado al de Oxford. En vez de celebrarlo entre todos, como siempre ocurre en Espa?a, hay quien saca cr¨ªticas, que al fin y al cabo son la espuma".

P. Con las heridas que hay alrededor de la Guerra Civil y la dictadura, ?no deber¨ªan haber sido m¨¢s escrupulosos con los textos?

R. La escrupulosidad de la Academia es la que ha tenido al emprender una obra enorme con unos recursos muy limitados. Ninguna otra instituci¨®n habr¨ªa sido capaz de hacer una obra semejante con los recursos que tuvo y en el tiempo que tuvimos.

P. Pero, insisto, ?no deber¨ªan haber sido m¨¢s escrupulosos?

R. Hay que verlo de manera distinta. Los defectos que pueda tener la edici¨®n del papel se corregir¨¢n en la versi¨®n en la Red. Si alg¨²n bi¨®grafo puede mejorar alguna biograf¨ªa, que lo diga y se colocar¨¢, porque es la Academia la due?a del Diccionario.

P. ?Modificar¨¢n entonces algunas biograf¨ªas si es necesario?

R. Estamos deseando hacerlo.