De t¨² a t¨² con los m¨¢s grandes

Al Giro lo anestesi¨®, lo conmovi¨® emocionalmente, la ca¨ªda y muerte de Wouter Weylandt, ciclista belga que hab¨ªa partido con el dorsal 108 y no pudo terminar la tercera etapa, el lunes 9 de mayo. No lleg¨® a Rapallo, se qued¨® en una curva del paso del Bocco.

Recuperado del shock, al Giro, a la posibilidad de una pelea abierta por la victoria, lo anestesi¨® Contador en dos d¨ªas.

Felice Gimondi dice que Contador ha sido tan superior a todos que ha hecho lo que ha querido, y habr¨¢ que disculparle al h¨¦roe bergamasco su pobreza expresiva. Gimondi, en el fondo, no es m¨¢s que uno de los ciclistas m¨¢s queridos en Italia, no un hombre que viva de buscar frases ¨²nicas. Vincenzo Nibali, el que deber¨ªa haber sido el rival, tampoco ha sido muy original cuando le ha llamado marciano al chico de Pinto, cuando ha asegurado que Contador corr¨ªa con una marcha de m¨¢s. Lo suyo es pedalear, claro, pero en el fondo repite lo que lee en los peri¨®dicos, lo mismo que se le¨ªa ayer en la prensa italiana, por ejemplo, pero no para describir la forma en la que Contador, uno que ya puede hablar de t¨² a t¨² con los m¨¢s grandes de la historia, con Merckx, con Hinault, con Coppi, con Anquetil, se ha adue?ado de la carrera, sino para referirse a lo que significan el Bar?a tras su cuarta Champions, por la forma en que la conquist¨®, claro, y Messi en el concierto futbol¨ªstico universal. De esos niveles se habla despu¨¦s de ganar su sexta gran carrera: tres Tours, dos Giros y una Vuelta a Espa?a.

Encar¨® la prueba con la frialdad de un cirujano, con la voluntad de un condenado

Le espera el Tour, al que llegar¨¢ dispuesto a disipar las dudas de 2010

Despu¨¦s del invierno m¨¢s duro de su carrera, psicol¨®gicamente agotador, y en medio de interrogantes que pon¨ªan en duda su credibilidad, en un ambiente a veces irrespirable, Contador se enfrent¨® a un Giro muy complicado -y trazado a su medida, como se observ¨® despu¨¦s- con la frialdad de un cirujano, con la voluntad de un condenado. "El Giro lo he preparado muy bien, a conciencia. He estado muy, muy bien, es el fruto de ese trabajo, pero no s¨¦ si mejor que nunca. Es de los mejores momentos de mi carrera. Otras veces tambi¨¦n he estado a este nivel, pero s¨ª que estoy m¨¢s bajo de grasa que nunca", dice. Lo analiz¨® sobre el papel, reconoci¨® algunas etapas, evalu¨® pros y contras, y con dos golpes certeros -dos tajos de bistur¨ª inesperados, geniales, un ataque en Tropea, un repechito de un kil¨®metro, que dej¨® con la boca abierta a sus rivales; y un ataque en el Etna, que los dej¨® asfixiados-, lo sentenci¨®. Fiel a sus costumbres -Contador, cuando coge un liderato nunca lo suelta, sea por una semana, como casi siempre, sea por 13 d¨ªas, como en este Giro- lleg¨® de rosa a Mil¨¢n. "Me encanta ser l¨ªder. Ir por delante siempre es bueno", dice. Consigui¨® un triunfo que cree que abogar¨¢ por su credibilidad, que alimentar¨¢ la fe de tantos en su virtud. "Pero no corro contra el pasado, solo para mi gente y para divertirme".

"He corrido con la cabeza fr¨ªa, he aprovechado las dudas de mis rivales", dice Contador, que de l¨ªder manej¨® con sabidur¨ªa las etapas: a su alrededor, todos los equipos que quer¨ªan conseguir algo prefer¨ªan aliarse a sus intereses antes que desafiarle. En la f¨®rmula afortunada de Igor Anton, que logr¨® su objetivo de una victoria de etapa m¨ªtica: "Nadie regala nada, pero Contador es inteligente". "Me he guiado todo el Giro por el instinto, por lo que me dictaba el cuerpo", explica el ciclista de Pinto.

Para muchos, para Giuseppe Martinelli, su director en 2010, entre otros, en ning¨²n momento Contador ha llegado a producir al 100% de su capacidad. "No lo ha necesitado", dice el t¨¦cnico italiano. "Jugaba tan a su favor el recorrido que ha hecho una carrera de control, muy medida". Contador protesta, claro: "No ha sido tan f¨¢cil. Me han dolido las piernas todos los d¨ªas".

Aunque ¨¦l quiera fomentar la intriga -"a¨²n no he decidido si ir¨¦ al Tour, tengo que ver c¨®mo me recupero y hablar con el equipo", dice- a Contador le espera el Tour, al que llegar¨¢ como m¨¢ximo favorito, dispuesto a disipar las dudas de 2010, la dificultad que tuvo para batir a Andy Schleck. Los expertos avisan: "Cuidado, que pese a lo que ha podido parecer, el mejor Contador sigue siendo el del Tour de 2009, el de la ascensi¨®n a Verbier, el de la contrarreloj de Annecy". ?Marciano?