Espa?a salda su deuda ol¨ªmpica

Dec¨ªa Mata que, cuando juegas bien, disfrutas m¨¢s. El placer de jugar bien solo es seguramente igualado por la superaci¨®n del sufrimiento. Lo que duele fortalece porque, cuando se cura, es una bendici¨®n. Y Espa?a consigui¨® saldar la deuda ol¨ªmpica de ocho a?os en un ejercicio de sufrimiento an¨ªmico y f¨ªsico, casi ag¨®nico, ante una Bielorrusia tan honrada en su actitud como miserable en su propuesta.

Espa?a estuvo en la lista de espera para Londres 2012 y solo pudo sacar su billete en el ¨²ltimo minuto, con los altavoces del aeropuerto llam¨¢ndole urgentemente, cuando apareci¨® Adri¨¢n, desafortunad¨ªsimo hasta entonces, y ense?¨® el pasaporte de los Juegos Ol¨ªmpicos, cita a la que el equipo nacional no acud¨ªa desde su plata en los de Sidney 2000. Su puntera, a centro de Jeffren, era realmente solo un empate en el marcador, pero en ese momento Espa?a entendi¨® que el asiento del avi¨®n ya era suyo y Bielorrusia asimil¨® que nadie le hab¨ªa invitado a semejante fiesta.

Adri¨¢n forz¨® con su gol de puntera en el pen¨²ltimo minuto una pr¨®rroga brillante

El gol de la firma ol¨ªmpica le correspondi¨® tambi¨¦n a Adri¨¢n, ya en la pr¨®rroga, y el de la r¨²brica, el tercero, a Jeffren, para el viaje en primera clase.

Cosas del f¨²tbol. Espa?a part¨ªa desde el minuto 38 sin reserva ol¨ªmpica y acab¨® en el 120 con todo lujo de detalles.

Apenas faltan nueve a?os para que se cumpla un siglo de la gesta de Amberes 1920, cuando Espa?a cre¨® su selecci¨®n y obtuvo la plata al ganar (3-1) a Holanda tras retirarse Checoslovaquia (descalificada) en la final ante B¨¦gica (campeona). Fue su primera participaci¨®n en unos Juegos Ol¨ªmpicos, que le han dejado desde entonces un oro (Barcelona 1992) y dos platas (Amberes 1920 y Sidney 2000).

En el hist¨®rico torneo belga se produjo la c¨¦lebre frase de Belauste: "A m¨ª, Sabino, el pelot¨®n, que los arrollo". Noventa y dos a?os despu¨¦s, Espa?a arrolla de otra manera. Pero de la frase sigue valiendo la figura del bal¨®n porque todos lo quieren, como Belauste, pero ahora lo miman y eluden a los contrarios m¨¢s que los desvanecen con el pecho.

Seguramente el s¨¢bado, en Aarhus, cuando juegue la final, la explosi¨®n de j¨²bilo del banquillo no ser¨¢ equiparable a la de ayer en Viborg festejando la clasificaci¨®n para Londres. Fue la celebraci¨®n del ¨¦xito. Aunque se tratara tan solo de una semifinal, era el objetivo. Y Espa?a lo alcanz¨® sufriendo tras el extra?o gol de Voronkov. Lo hab¨ªa dicho Milla: "Si fallas, Bielorrusia te caza". Y caz¨® cuando Dom¨ªnguez concedi¨® un absurdo fuera de banda, en principio una jugada sin peligro. Pero ya Benito Floro dio una conferencia en no s¨¦ qu¨¦ universidad sobre la importancia del fuera de banda en el f¨²tbol. Debi¨® de asistir mucho p¨²blico bielorruso porque ah¨ª cazaron su gol y coinvirtieron su ¨¢rea en una c¨¢rcel amurallada. Aquel error exigi¨® de Espa?a ya no solo talento, sino fe, esperanza y autoestima. Para enfrentarse a una situaci¨®n ins¨®lita que pod¨ªa dejarle en la estacada ol¨ªmpica.

No es f¨¢cil jugar cuando tienes el bal¨®n el 70% del tiempo, cuando encierras al adversario, cuando creas un sinf¨ªn de oportunidades erradas en el ¨²ltimo pase y vas perdiendo ante una tropa que lo mismo podr¨ªa jugar al f¨²tbol que al balonmano por su apariencia f¨ªsica, su ¨²nica apariencia.

La figura de Javi Mart¨ªnez fue providencial. Tuvo pausa cuando hab¨ªa que tenerla, tuvo profundidad cuando la urgencia ahogaba, jug¨® de delantero centro cuando se trataba de matar o morir y acab¨® de central para cubrir las ausencias en la defensa en la pr¨®rroga tras los cambios de Milla. Fue el fiel de la balanza en la que se apoy¨® un equipo que siempre crey¨® en la posibilidad de ganar de una manera u otra.

La obsesi¨®n ol¨ªmpica (la otra oportunidad estaba en el duelo por el tercer puesto) le dio m¨¢s fe que miedo y cada gol ven¨ªa a saldar las ausencias de ocho a?os (Atenas 2004 y Pek¨ªn 2008). Doce a?os eran muchos a?os sin f¨²tbol en los Juegos. M¨¢s a¨²n, cuando se celebran en el pa¨ªs donde naci¨® el f¨²tbol. Una cita a la que el espa?ol llegar¨¢ como campe¨®n mundial absoluto y qui¨¦n sabe si como campe¨®n europeo sub 21.