"Est¨¢n dejando completamente desatendida a una poblaci¨®n prioritaria"

Dosinda Vilame¨¢ no se esperaba que un a?o y medio despu¨¦s de solicitar una ayuda para su padre enfermo, de 94 a?os, Benestar no le haya asignado tan siquiera un Programa Individual de Atenci¨®n (PIA), el requisito m¨ªnimo para empezar a recibir la prestaci¨®n. El anciano tiene reconocida una dependencia de grado 3 y nivel 2, la m¨¢s alta de la escala, que en teor¨ªa le da prioridad en la resoluci¨®n de su tr¨¢mite. Pero a la hora de la verdad su precario estado de salud no le ha servido para agilizar la solicitud. El anciano vive en una aldea de Antas de Ulla (Lugo) con su esposa, con graves problemas de movilidad desde hace diez a?os. Su hija, que vive en A Coru?a, le paga a tres personas distintas para que hagan turnos tambi¨¦n por la noche. Los fines de semana los cuida ella misma. Tras muchas consultas, no entiende por qu¨¦ su solicitud se est¨¢ demorando tanto. Conoce familias que ya acumulan dos a?os se espera.

Vilame¨¢ se siente "ahogada", "Est¨¢n dejando completamente desatendida a una poblaci¨®n prioritaria", acusa. Los seis meses que, seg¨²n el decreto 15/2010 que regula el derecho a prestaciones por dependencia, deber¨ªa tardar en saber qu¨¦ tipo de asistencia recibir¨¢ su padre son ya 18. Vilame¨¢ entreg¨® la solicitud a finales de 2009 y en octubre de 2010 Benestar le comunic¨® el grado de dependencia que le reconoc¨ªa a su padre, el m¨¢s alto, el de un gran dependiente. La noticia llegaba con retraso, porque el plazo m¨¢ximo para asignar el grado de dependencia del enfermo lo fija la ley en tres meses. Otro tanto es lo que deb¨ªa tardar la ¨²ltima fase del tr¨¢mite, la comunicaci¨®n del PIA, el tipo de atenci¨®n que se le subvenciona al enfermo, sea para atenci¨®n en el entorno o a trav¨¦s de una empresa de servicios. Dosinda solicita para su padre la primera opci¨®n, que es la que lleva financiando desde hace a?os y la que mejor cubre las necesidades del anciano, que necesita cuidados las 24 horas.

"Todo mi sueldo se va para ¨¦l: pago cuidadores, objetos de limpieza, una dieta muy complicada...", enumera. Adem¨¢s de la tardanza, le preocupa que el ¨®rgano de valoraci¨®n que estudia cada expediente y otorga el PIA le asigne una atenci¨®n distinta de la que solicita, como seg¨²n su versi¨®n le han insinuado en una de sus consultas en la Administraci¨®n. No quiere que la desv¨ªen a un programa de ayuda en el hogar -que solo cubre 90 horas a la semana- ni que "sigan alargando el tr¨¢mite". La ayuda que pide gira en torno a los 500 euros mensuales.