Pau, Navarro y los dem¨¢s
Espa?a muestra dos caras y un rendimiento irregular ante un abrumado Portugal
Largo y tortuoso como se presenta el campeonato, Espa?a agradeci¨® la oportunidad de medirse a un oponente de medio pelo como Portugal. El equipo de Sergio Scariolo trat¨® de engrasar la maquinaria sin los agobios y los nervios con los que tanto se hab¨ªa complicado la vida en su estreno pese a que Polonia tampoco est¨¢ lejos del furg¨®n de cola del baloncesto europeo.
Portugal, que cuenta en su lista con media docena de jornaleros que han militado en equipos espa?oles, la mayor¨ªa de ellos de la LEB o Segunda Divisi¨®n e incluso alguno de una categor¨ªa inferior, no le dur¨® ni medio asalto a Pau Gasol y compa?¨ªa. Pero al final la diferencia no fue sideral: 14 puntos. Scariolo, una vez liquidado el asunto, una vez que su equipo alcanz¨® 25 de ventaja en el tercer cuarto, aceler¨® el carrusel de cambios y experimentos.
"Algunos deben tener m¨¢s concentraci¨®n y ganas", advierte Scariolo
El resultado de tanta alquimia fue desigual. Mientras algunos jugadores mejoran sus sensaciones, otros contin¨²an sin ofrecer el rendimiento deseado. Pau Gasol y Navarro, seguidos a cierta distancia por Marc Gasol, Felipe Reyes y un Rudy Fern¨¢ndez que, tras superar un problema de alergia, evidenci¨® trazos de su derroche f¨ªsico y su estilo desbordante con nueve puntos y seis asistencias, volvieron a ser los que marcaron las diferencias.
El equipo sum¨® 24 asistencias, pero solo mejor¨® ligeramente el horrible porcentaje de triples ante Polonia con seis aciertos en 20 intentos y unos decepcionantes cero de cuatro de Rudy y cero de tres de Llull. Son evidentes los problemas en el tiro exterior.
Espa?a demostr¨® lo que se le supone, un potencial para dar 100 vueltas a muchos de los que han completado por primera vez un Europeo con 24 selecciones, y no es casualidad que Portugal fuera el ¨²ltimo en engancharse al cartel. Con el viento a favor, sin agobios, acreditando la voluntad de reivindicarse tras el flojo estreno, sus jugadores actuaron por momentos en plan rodillo, superiores en el uno contra uno, en el juego colectivo, f¨ªsicamente, por recursos estrat¨¦gicos...
El seleccionador ba?¨® su quinteto en la cancha con un chorro de combinaciones, varias at¨ªpicas, probablemente experimentales; otras, con el objetivo de favorecer el aumento de las revoluciones de algunos jugadores. como Felipe Reyes, Ricky Rubio, Llull, Claver e incluso Ibaka. Adem¨¢s de las m¨²ltiples combinaciones de los p¨ªvots, Rudy jug¨® unos minutos de dos, combinando con San Emeterio de tres, posici¨®n que tambi¨¦n ocup¨® un rato Navarro. Casi todo el ¨²ltimo cuarto estuvo Calder¨®n de base, con Ricky de escolta y Llull de tres, adem¨¢s de Claver de cuatro, el ¨²nico que no hab¨ªa entrado en la pista cancha hasta entonces.
Fue la peor fase del equipo espa?ol. Se encall¨® ante la defensa en zona de los portugueses, solo anot¨® 10 puntos y volvi¨® a recibir demasiados: 21 en ese cuarto, 73 en total. Acus¨® en definitiva la escasa producci¨®n de Claver, que fall¨® sus cuatro tiros; San Emeterio, que sufri¨® un golpe; Llull o Ibaka.
Instalados en unas rentas que r¨¢pidamente sobrepasaron la veintena de puntos, los t¨¦cnicos del banquillo espa?ol pudieron dedicarse a tomar nota, a observar las ventajas e inconvenientes en las constantes combinaciones de las piezas sobre el tablero y tambi¨¦n algunos estados de forma preocupantes. "Algunos deben tener m¨¢s concentraci¨®n y ganas de ganarse el puesto en la rotaci¨®n", avis¨® Scariolo tras el partido.
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