?Qui¨¦n pide disculpas?
Florence Noiville critica a los centros que formaron a los directivos de la crisis
En la ?cole des Hautes ?tudes Commerciales (HEC) la han declarado "persona non grata", dice Florence Noiville, antigua alumna de esta, la m¨¢s afamada escuela de negocios de Francia, y autora de J'ai fait HEC et je m'en excuse, que, despu¨¦s de haber vendido 15.000 ejemplares en el pa¨ªs vecino y 5.000 en Italia, ha llegado a Espa?a bajo el t¨ªtulo Soy economista y os pido disculpas (Ediciones Deusto) y, seg¨²n la editorial, ya ha "colocado" los 6.000 ejemplares de la primera edici¨®n.
A Noiville le han cerrado las puertas del centro de estudios donde curs¨® su carrera por denunciar las pr¨¢cticas de esta y otras escuelas de negocios que prepararon a las j¨®venes generaciones de entonces para "ser los predadores de la estepa empresarial de 2010". Son quienes han tomado las decisiones durante la crisis. Unas ¨¦lites, como explica Noiville, solo dispuestas a maximizar los beneficios sin cuestionarse si sus acciones eran ¨¦ticas o no. "En la certeza de que somos los mejores, tenemos raz¨®n y este es el mejor de los sistemas econ¨®micos posibles". La economista y actual periodista de Le Monde pone en tela de juicio la educaci¨®n recibida en estos centros, a quienes acusa de generar profesionales sin escr¨²pulos. ?Es adecuada la forma en que han aplicado lo aprendido?, se pregunta.
La autora, que no mantuvo un debate con los responsables de las instituciones de formaci¨®n de ejecutivos a las que se refiere en el libro, s¨ª lo ha hecho con las primeras escuelas de negocios espa?olas. IE Business School, IESE y ESADE han recogido el guante. Y admiten cierta culpabilidad, pero poca y mucho despu¨¦s de la de los Gobiernos, los bancos centrales, las agencias de calificaci¨®n... "?Qu¨¦ es la educaci¨®n sino desarrollo de pensamiento cr¨ªtico?", se plantea Santiago ?lvarez de Mon, profesor de IESE, en la creencia de que es lo que intenta fomentar en cada una de sus clases. "Claro que hay directivos que arruinan las empresas y que las escuelas de negocios est¨¢n obsesionadas por sus posiciones en los rankings internacionales, pero no hay que demonizar a todos", sostiene.
?Qu¨¦ es lo que ha cambiado en las escuelas de negocios espa?olas como consecuencia de la crisis?, pregunta Noiville, en la creencia de que poco ha ocurrido desde entonces en los centros franceses. "No podemos hacer como si la crisis no hubiera sucedido", afirma la periodista. "Los profesores de econom¨ªa han revisado su programa; damos clases de geopol¨ªtica y trabajamos sobre la visi¨®n a largo plazo", explica Marcel Planellas, secretario general de ESADE. "Hemos introducido el estudio del an¨¢lisis del riesgo, el comportamiento en las finanzas y las finanzas sostenibles", afirma Francisco Navarro, vicedecano de IE Business School. Y a?aden que ESADE ha creado el Instituto de Innovaci¨®n Social, e IE Business School, Financieros Sin Fronteras.
?lvarez de Mon es m¨¢s cr¨ªtico y aunque, como los representantes de las otras dos escuelas espa?olas, explica que los valores y la ¨¦tica siempre han estado inmersos en sus programas educativos, cree que las escuelas de negocios "no hemos aprendido de la crisis. Nos falta humildad y apertura mental. La crisis la estudiar¨¢n nuestros nietos", declara. "Debemos hacer autocr¨ªtica. Hemos tratado a los alumnos como si fueran clientes y estamos heridos de modas", mantiene.
Para Noiville, las escuelas han de jugar un papel importante de cara a decidir cu¨¢l es el tipo de l¨ªder que el mundo necesita para el futuro. Por el momento, los centros de formaci¨®n de ejecutivos est¨¢n educando a profesionales globales. Es su gran reto. Lejos de pol¨¦micas. -
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