France Telecom pagaba a los ejecutivos seg¨²n los trabajadores que dejaban la empresa
'Vanity Fair' revela la pol¨ªtica de presi¨®n sobre la plantilla tras el suicidio de 25 empleados
La resaca de la ola de suicidios que ha sacudido a la plantilla de France T¨¦l¨¦com y que ha llevado al propio presidente de la Rep¨²blica, Nicolas Sarkozy, a abrir una investigaci¨®n sobre el asunto, est¨¢ arrojando algo de luz sobre las presiones a las que estaban sometidos los trabajadores. De hecho, seg¨²n revela la edici¨®n espa?ola de la revista Vanity Fair, la direcci¨®n de la compa?¨ªa de telecomunicaciones renumeraba a los ejecutivos en funci¨®n de la cantidad de empleados que abandonaban la empresa. En concreto, entre un 15 y un 40% del sueldo de los directivos depend¨ªa de que consiguieran un objetivo: incitar a un m¨ªnimo de 22.000 trabajadores a abandonar la compa?¨ªa.
El art¨ªculo, en el que se recogen numerosos testimonios de los propios trabajadores en los que se llega a recordar c¨®mo se quitaron la vida 25 compa?eros en un a?o y titulado Suic¨ªdise, s'il vous pla?t, se?ala que la forma de instar a los empleados a abandonar la empresa pasaban por estresantes m¨¦todos de trabajo y organizaci¨®n, en los que no se exclu¨ªa los ataques personales y dejar en rid¨ªculo a los que menos ventas lograban, as¨ª como constantes cambios de ubicaci¨®n y departamento. Y apunta a un responsable ¨²ltimo: Olivier Barberot, director del departamento de recursos humanos de France T¨¦l¨¦com, que a partir de 2002 puso en marcha un proyecto en el que llamaba a los trabajadores "a tomar las riendas de su futuro profesional mediante la creaci¨®n de una empresa en el exterior".
Durante la vigencia del programa, suspendido a finales de 2008 y que un directivo de la empresa ha llegado a calificar a la revista como "la caza del hombre", se han suprimido 30.000 puestos de trabajo "invintando a que los trabajadores se vayan" sin ninguna negociaci¨®n con los sindicatos ni acuerdo con los trabajadores, explica esta fuente an¨®nima. Aunque el art¨ªculo tambi¨¦n a?ade algunos nombres del grupo directivo como S¨¦bastien Croizier: "Todos los jefes tienen entre sus objetivos la reducci¨®n de personal. Si no lo consiguen, no obtienen la parte variable de su sueldo. No es una prima, forma parte de su trabajo".
Suicidio en un organismo de los sindicatos
Los problemas de suicidios laborales en Francia no son exclusivos de la empresa France T¨¦lecom. La prensa gala ha aireado esta semana el suicidio de un trabajador de la Caja Central de Actividades Sociales (CCAS) un organismo administrado en exclusiva por los sindicatos y encargado de organizar actividades de ocio para los trabajadores. El asalariado se colg¨® en el jard¨ªn de su casa tras sufrir el acoso moral de un superior jer¨¢rquico. "No puedo m¨¢s, estoy harto, por eso prefiero borrarme del mapa", dej¨® escrito, seg¨²n el diario Lib¨¦ration. La CGT, sindicato mayoritario en el consejo de administraci¨®n, no ha querido comentar el suceso. Una fuente sindical ha explicado que el CCAS est¨¢ llevando a cabo un proceso de "creaci¨®n de una ¨²nica l¨ªnea jer¨¢rquica" que conlleva la "modificaci¨®n de los puestos de trabajo" y el traslado de los trabajadores a otras funciones.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.