El cr¨¦dito del BCE a los bancos espa?oles vuelve a los niveles previos a la quiebra de Lehman

Los bancos espa?oles han reducido con fuerza en enero el dinero que han pedido prestado al Banco Central Europeo hasta los 53.120 millones de euros, un 20% menos que en diciembre y la cifra m¨¢s baja desde octubre de 2008, cuando el colapso de Lehman Brothers sec¨® los mercados tradicionales de financiaci¨®n a los que acuden las entidades para mantenerse en marcha. Seg¨²n ha informado hoy el Banco de Espa?a, esta cifra supone un 15% del total de 349.322 millones de euros que el instituto emisor ha prestado en el primer mes de 2011, ligeramente por debajo del dato de diciembre, que fue del 16%, pero aun sigue por encima del peso del sistema financiero espa?ol sobre el conjunto de la eurozona, que es del 10%.

Si hace m¨¢s de dos a?os la quiebra del gigante de Wall Street dren¨® los cauces por donde circulaba el capital entre las entidades por que ninguna se fiaba del resto, la situaci¨®n no ha llegado a mejorar hasta los ¨²ltimos meses. Pese a ello, el mercado interbancario a¨²n est¨¢ lejos de recuperar la normalidad, aunque al menos est¨¢ en el camino. Para hacer frente a las necesidades de financiaci¨®n de los bancos, el BCE puso en marcha en 2009 una ventanilla especial de liquidez donde los bancos pod¨ªan pedir prestado el dinero que se les negaba en los mercados tradicionales dejando en garant¨ªa sus activos de calidad.

Tras las turbulencias financieras, la crisis fiscal de los pa¨ªses perif¨¦ricos del euro, bajo sospecha por sus altos niveles de deuda y d¨¦ficit (Grecia, Irlanda, Portugal y Espa?a), volvi¨® a extender la sombra de la duda sobre sus respectivos sistemas financieros, lo que dificult¨® su acceso a la financiaci¨®n. Por este motivo, los bancos espa?oles, al igual que los irlandeses, se volvieron muy dependientes a las facilidades de liquidez del BCE, lo que llev¨® al presidente del organismo internacional, Jean-Claude Trichet, a advertir a estas entidades de que esta ventanilla excepcional de financiaci¨®n no era permanente. Para los inversores, esta dependencia tambi¨¦n era un s¨ªntoma de debilidad para seguir ejerciendo presi¨®n sobre los Estados con problemas en los mercados de deuda.

La dependencia que criticaba Trichet se tradujo en que las entidades de Espa?a solicitaron al instituto emisor el pasado junio la friolera de 130.000 millones de euros, lo que supuso el 30% del total del dinero prestado por el BCE y un r¨¦cord desconocido hasta la fecha. Desde aquel m¨¢ximo y gracias al b¨¢lsamo contra la desconfianza que supuso la publicaci¨®n de los resultados de las pruebas de solvencia a la banca europea, la relativa -y temporal- vuelta a la normalidad en los mercados ha permitido el paulatino regreso de los bancos espa?oles a los cauces tradicionales de financiaci¨®n.

En cualquier caso, la mejora es extensible al conjunto del sistema financiero europeo, ya que las entidades del euro tambi¨¦n redujeron el volumen total del cr¨¦dito solicitado al BCE en un 13,5% frente al dato de diciembre con 349.322 millones.