Las cajas mantiene la opacidad en las retribuciones a sus consejeros
Las entidades, a diferencia de los bancos, no ofrecen datos detallados de lo que cobran sus altos cargos.- La Ley de Econom¨ªa Sostenible obliga a aumentar la transparencia
La controversia generada por los millonarios bonus de Caja Madrid al antiguo equipo directivo, una prima que al final ha sido anulada por la actual direcci¨®n de la caja, ha tra¨ªdo de nuevo al primer plano la especial pol¨ªtica de remuneraci¨®n de estas entidades. A diferencia de la banca, que ofrece datos desglosados de lo que cobra cada consejero y de las respectivas aportaciones que realizan a los planes de pensiones, las cajas mantienen su opacidad y no dan cifras detalladas de lo que anualmente se llevan cada uno de sus ejecutivos. Algunos gestores financieros consideran que las retribuciones son una herramienta clave de la gesti¨®n y que el conocimiento p¨²blico de estos datos les hace vulnerables.
Esta pr¨¢ctica, sin embargo, tiene los d¨ªas contados ya que la nueva Ley de Econom¨ªa Sostenible, que hoy se aprueba definitivamente, incluye medidas para aumentar la transparencia en las retribuciones a sus consejeros de todas las entidades independientemente de sean bancos o cajas. Seg¨²n reza en su art¨ªculo 25: "Las entidades de cr¨¦dito y las empresas de servicios de inversi¨®n aumentar¨¢n la transparencia en sus pol¨ªticas de remuneraci¨®n, y la coherencia de las mismas con la promoci¨®n de una gesti¨®n del riesgo s¨®lida y efectiva".
De esta forma, sit¨²a a estas entidades al mismo nivel que las empresas cotizadas, a las que tambi¨¦n se les exige un plus de transparencia en sueldos con la nueva Ley de Econom¨ªa Sostenible. Incluso el Gobierno ha ido m¨¢s lejos. En el texto dice: "En el caso de las cajas de ahorros, estas obligaciones deber¨¢n cumplirse tambi¨¦n en relaci¨®n con los miembros de la Comisi¨®n de Control".
Sin embargo, la imposici¨®n por ley de estas pr¨¢cticas no ha sido necesaria para convencer a todos los bancos de publicar con detalle los sueldos de sus altos cargos, que ya los publican a instancias del Banco de Espa?a desde principios de 2010. Adem¨¢s, los salarios deben ser aprobados por la junta de accionistas.
Con la excepci¨®n de La Caixa, en el caso de las cajas, sin embargo, no hay tal transparencia y, al no tener accionistas -de momento- no hay opci¨®n de someter estos sueldos a la aprobaci¨®n de ninguna junta. As¨ª, simplemente se aprueban en asamblea los informes de Gobierno Corporativo. En este tipo de documentos, la actual normativa solo obliga a las cajas a publicar grosso modo lo que reciben sus consejeros, entre los que se encuentran pol¨ªticos y personas de confianza de los respectivos Gobiernos auton¨®micos, sin concretar lo que cobra cada uno de los integrantes de sus ¨®rganos de direcci¨®n.
A modo de ejemplo, ayer public¨® su informe corporativo Bancaja, que ha decidido integrarse con Caja Madrid y otras cinco cajas de ahorros a trav¨¦s de un sistema institucional de protecci¨®n (SIP) en el que el veh¨ªculo ser¨¢ el Banco Financiero y de Ahorros. En el texto, la entidad informa de que los responsables de alta direcci¨®n de la entidad cobraron 3,6 millones de euros en 2010 y recibieron otros 1,3 millones en concepto de aportaciones a planes de pensiones o seguros de vida. Por su parte, los 20 miembros de su consejo de administraci¨®n cobraron 109.000 euros en concepto de dietas por asistir a las reuniones, lo que supone de media 5.450 euros por persona.
Hoy tambi¨¦n ha publicado su informe Caja Madrid. Seg¨²n el documento remitido a la CNMV por la entidad, los sueldos y otras remuneraciones an¨¢logas recibidas por sus altos ejecutivos alcanzaron en 2010 los 17,2 millones de euros. Adem¨¢s, en concepto de aportaciones a planes de pensiones o similares han recibido 497.000 euros y, por dietas, los miembros del consejo de han embolsado 1,8 millones de euros.
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