Grecia aprueba una nueva subida fiscal a la desesperada para evitar la quiebra

En las calles de las grandes ciudades griegas hay protestas cada vez m¨¢s subidas de tono. Y en Europa y en Washington, m¨¢s y m¨¢s dudas sobre el cumplimiento de los objetivos de d¨¦ficit, sobre si hay que seguir prestando ayuda y, en definitiva, sobre las posibilidades de Atenas de evitar la bancarrota. En medio de una recesi¨®n profunda y de una tensi¨®n social y financiera que amenaza derribo, el Gobierno socialista de Yorgos Papandreu ha anunciado el en¨¦simo paquete de medidas para tratar de evitar a toda costa la quiebra. M¨¢s de lo mismo: subida de impuestos y recorte del gasto pr¨¢cticamente a la desesperada para tratar de sumar 2.000 millones de euros a sus maltrechas arcas p¨²blicas.

Berl¨ªn dice que una suspensi¨®n de pagos ordenada no debe ser tab¨²

Papandreu ha presidido a media tarde de hoy una reuni¨®n extraordinaria de la que ha salido con un nuevo impuesto para todos los due?os de cualquier propiedad inmobiliaria, que se aplicar¨¢ este a?o y el pr¨®ximo. La Hacienda hel¨¦nica cobrar¨¢ a los propietarios, a trav¨¦s de las facturas de la luz, una media de cuatro euros por metro cuadrado, en una amplia horquilla que va desde el medio euro en las zonas m¨¢s pobres a los 10 euros por metro cuadrado en las m¨¢s pudientes del pa¨ªs. Adem¨¢s, los pol¨ªticos y altos funcionarios se ver¨¢n obligados a renunciar a una paga mensual: esas dos medidas suman en total los citados 2.000 millones, que permitir¨¢n, en principio, solventar parte del agujero en las cuentas p¨²blicas. Atenas trata as¨ª de salvar a toda costa el nuevo tramo de las ayudas de la UE y del FMI, imprescindible para seguir pagando las facturas. "Hay que hacer un esfuerzo nacional", ha dicho el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, en Sal¨®nica. Papandreu participa tambi¨¦n de esa versi¨®n griega del churchilliano sangre, sudor y l¨¢grimas: ha llamado a sus conciudadanos a "hacer lo que sea necesario para poner otra vez en pie" el pa¨ªs.

Las presiones arrecian. Alemania prepara un plan de recapitalizaci¨®n de sus bancos por si Grecia suspende pagos, y el ministro de Econom¨ªa, Philipp Roesler, ha echado este domingo m¨¢s le?a al fuego al considerar que un impago ordenado de Grecia no debe ser tab¨². El FMI ha convocado una cumbre extraordinaria para el mi¨¦rcoles ante las dudas acerca de las posibilidades de que Grecia cumpla con lo prometido. El divorcio entre Atenas y la Troika (los enviados del FMI, al Comisi¨®n Europea y el Banco Central Europeo) se hizo patente hace unos d¨ªas, cuando el Gobierno hel¨¦nico se plant¨® y amag¨® con incumplir los acuerdos suscritos en la cumbre del pasado julio, que daba m¨¢s dinero a Grecia a cambio de un ajuste a¨²n m¨¢s duro y de la participaci¨®n de la banca en el pago de la factura. Ante la recesi¨®n galopante (una ca¨ªda de m¨¢s del 5% del PIB este a?o), en los mercados se lleg¨® a dar por pr¨¢cticamente hecha la suspensi¨®n de pagos. Pero finalmente Atenas ha dado marcha atr¨¢s para seguir contando con ayuda internacional.

"Grecia ha dado su brazo a torcer y ha atendido las demandas del FMI y de sus socios: m¨¢s ajustes si quiere seguir recibiendo fondos. Porque sin ellos, Atenas estar¨ªa condenada al impago y podr¨ªa provocar un accidente en la zona euro", ha explicado en Washington ?ngel Ubide, del Peterson Institute. Ya el s¨¢bado, Papandreu hab¨ªa dado muestras de que Grecia har¨¢ todo lo posible para evitar la bancarrota, en un discurso televisado destinado a aplacar la ira que crece a diario en la calle. El primer ministro ha seguido en esa l¨ªnea: "La batalla por poner en marcha el ajuste pactado en julio [con fuertes recortes y un exigente calendario de privatizaciones] es ahora lo m¨¢s importante". Papandreu amaga incluso con gravar los dep¨®sitos de los griegos en Suiza, tras una huida de capitales que ha dejado muy maltrecha la banca hel¨¦nica. Los mercados, cada vez m¨¢s esc¨¦pticos, tienen ahora la palabra, pero Grecia y el euro deben salvar una bola de partido pr¨¢cticamente a diario: el mi¨¦rcoles ser¨¢ el FMI quien tenga el futuro del pa¨ªs en sus manos.