Berthold Albrecht, heredero del imperio de supermercados alem¨¢n Aldi
Celoso de su intimidad, pose¨ªa una de las mayores fortunas del pa¨ªs
De los Albrecht siempre se sabe poco y esto se suele saber tarde. Los peri¨®dicos alemanes conocieron la muerte del Berthold Albrecht a trav¨¦s de las grandes esquelas encargadas para el viernes por su familia y por su viuda, Babette. Berthold Albrecht, uno de los hombres m¨¢s ricos de Alemania y del mundo, lleva enterrado desde noviembre. Muri¨® con 58 a?os, solo dos despu¨¦s de su padre, Theo (1922-2010), fundador del imperio alem¨¢n de supermercados baratos Aldi (Albrecht Discount) junto a su hermano Karl (hoy de 92 a?os).
Berthold y su hermano Theo heredaron unos 16.000 millones de euros de Theo padre, que era el due?o de la mitad norte?a de la cadena de supermercados. El patrimonio combinado de estos dos herederos solo era superado en Alemania por la del t¨ªo Karl, que atesora alrededor de 17.500 millones de euros.
Theo y Karl pactaron en 1960 dividir su pujante negocio mediante una suerte de Tratado de Tordesillas sobre el mapa alem¨¢n: Theo, m¨¢s joven pero menos audaz en su concepci¨®n del negocio, se qued¨® el norte de la l¨ªnea demarcada por el r¨ªo Ruhr. Karl se qued¨® con el sur. Antes de morir, Theo dispuso que su enorme fortuna quedara en una fundaci¨®n. Berthold la dirigi¨® hasta su muerte el mes pasado. Tambi¨¦n era miembro del Consejo de Administraci¨®n de Aldi Norte.
Su esquela publicada el viernes inclu¨ªa su ¨²nica foto conocida. Muestra a un hombre con gafas finas y pelo peinado hacia atr¨¢s, de pelo blanco, como el color de su camisa sin corbata. Como casi todas las primeras fortunas alemanas, los Albrecht evitan cualquier publicidad personal. Para la cadena acu?aron el eslogan: ¡°Nuestra publicidad son los precios bajos¡±.
Se sabe que Berthold tuvo cinco hijos con Babette, cuatro de ellos, gemelos. Pero muy poco m¨¢s. La revista Manager Magazine public¨® en 2006 que hab¨ªa hecho una generosa donaci¨®n al colegio de sus hijos, bajo la condici¨®n de que se mantuviera en estricto secreto. No sorprende, por tanto, que nadie sepa de qu¨¦ muri¨®. La familia explica en la esquela que ¡°era de naturaleza luchadora y por eso conserv¨® la esperanza hasta el final¡±. Solo los allegados m¨¢s pr¨®ximos asistieron a sus honras f¨²nebres. Berthold Albrecht, escriben sus familiares en el homenaje que publicaron a toda p¨¢gina en los grandes peri¨®dicos nacionales, ¡°era un hombre cari?oso y extremadamente generoso, un marido y un padre ejemplar¡±.
Seg¨²n public¨® la revista de millonarios Forbes, en la familia Albrecht ¡°viven m¨¢s retirados que el Yeti¡±. Tanta discreci¨®n puede deberse al secuestro sufrido por Theo en 1971. Por la calidad de su ropa, los secuestradores pensaron al principio que hab¨ªan cogido por error a un contable de la empresa. Lo metieron en un armario y lograron 7 millones de marcos (al cambio de 2002, unos 3,5 millones de euros) por su rescate. Theo Albrecht trat¨® de desgravar el sustancioso rescate en su declaraci¨®n de la renta, porque, seg¨²n aduc¨ªa su abogado, ¡°no lo secuestraron como persona privada, sino como empresario¡±.
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