La innovaci¨®n tecnol¨®gica rinde sus frutos en el campo dominicano

La tradicional econom¨ªa agr¨ªcola de la Rep¨²blica Dominicana, sacudida en las ¨²ltimas d¨¦cadas por los vientos consumistas de la modernidad, se embarca ahora en un proceso de diversificaci¨®n que busca combinar la producci¨®n meramente artesanal con la utilizaci¨®n de innovadoras tecnolog¨ªas.

De esta "cohabitaci¨®n" han salido casos como el de mujeres campesinas de Arroyo Cano, una comunidad del apartado suroeste dominicano, que han aprendido a elaborar una rica mermelada de naranja y a procesar y enlatar "guandules" (legumbre tropical parecida al guisante), mejorando con ello sus niveles de vida.

Otro ejemplo es el de la Chocolatera de la Cuenca de Altamira (Chocal), en el que 30 mujeres de ese municipio de Puerto Plata (norte) han mejorado la producci¨®n de sus chocolates y vinos gracias a t¨¦cnicas suministradas por un ente estatal creado hace ocho a?os.

El Instituto de Innovaci¨®n en Biotecnolog¨ªa e Industria (IIBI) impulsa por igual en la provincia Espaillat (norte) la exportaci¨®n a Estados Unidos de la harina y el aceite de "zapote", una sabrosa fruta tropical, enviada tambi¨¦n a ese mercado en forma deshidratada.

"Tenemos en la zona de Restauraci¨®n (noroeste) el mejor clima para la producci¨®n de naranjas agrias que los franceses vienen a buscar para producir (el licor) Cointreau; y ese 'zapote' es el de mejor sabor y color de todo el Caribe", dijo a Efe la directora del IIBI, Bernarda Castillo, tras inaugurar una feria de innovaci¨®n.

Refiri¨® por igual el desarrollo de un turr¨®n de almendra criolla capaz, asegur¨®, de competir en sabor y duraci¨®n con los importados, adem¨¢s de una crema hidratante a base de lechuga y pepino y un enjuague para el pelo extra¨ªdo del nopal, que crece silvestre en el pa¨ªs.

Este organismo de investigaci¨®n ha alcanzado acuerdos con universidades de Espa?a y Argentina con el prop¨®sito de acceder a tecnolog¨ªas avanzadas que trasmite a productores e industriales locales, adem¨¢s de ofrecer calidad a trav¨¦s de certificaciones internacionales.

La m¨¢s reciente de estas acreditaciones toca al an¨¢lisis de pesticidas otorgado la semana pasada por el Ente Costarricense de Acreditaci¨®n (ECA), que garantiza la inocuidad de los productos agr¨ªcolas importados para el consumo nacional.

A la par del fomento a la industria agropecuaria, el IIBI ofrece servicios a m¨²ltiples sectores ya que cuenta con laboratorios de ingenier¨ªa gen¨¦tica, microbiolog¨ªa, ensayos f¨ªsicos y qu¨ªmicos, cromatograf¨ªa, textil, mineralog¨ªa, combustibles, aguas residuales, madera y biom¨¦dica.

El IIBI opera el Centro de Biotecnolog¨ªa Vegetal en el que ha desarrollado con ¨¦xito el mejoramiento gen¨¦tico de la pi?a, una de las frutas tropicales m¨¢s demandadas por propios y extra?os, y con la multinacional Nestl¨¦ produce gas metano y bioabono a partir del esti¨¦rcol del ganado.

"Creo que necesitamos de un mayor empuje para seguir creciendo, hay que auxiliar a los productores de yerbabuena y or¨¦gano (...) ser¨ªa bueno que esta instituci¨®n siga creciendo", expres¨® Castillo, quien record¨® que al principio "muchos" no entend¨ªan el surgimiento del IIBI, pero que al cabo de los a?os esto cambi¨® radicalmente.

Pero no solo ella requiere de m¨¢s ayuda para el organismo, pues las mujeres de Arroyo Cano, de donde es oriundo el presidente dominicano, Danilo Medina, esperan de un empuj¨®n extra para concretar sus expectativas.

"Agradecemos esta ayuda que nos brinda el IIBI porque ahora tenemos la oportunidad de colocar nuestros productos en el mercado, pero necesitamos con urgencia de maquinarias para tapar adecuadamente las mermeladas y colocar las etiquetas de los enlatados", dice Siria Luciano, presente en la feria con un estand levantado con palmas de coco.

Ram¨®n Santos Lantigua