Pymes, exportaci¨®n y globalizaci¨®n: las cosas claras

Que estamos atravesando momentos dif¨ªciles tras la crisis inmobiliaria y financiera, es un hecho. Sin embargo, las soluciones no pasan solamente por la financiaci¨®n (el sector inmobiliario necesitar¨¢ a?os para recuperarse). Esta crisis ha enmascarado la m¨¢s importante, la crisis de competitividad. Esta se mide por el valor a?adido por empleado, pero lo importante es el concepto desde el punto de vista estrat¨¦gico: la capacidad para mantener o conquistar cuotas de mercado en los mercados nacionales e internacionales.

?Por qu¨¦ digo esto? Porque el cambio que estamos viviendo es colosal. Y nos est¨¢ costando entenderlo. Hemos pasado en 10 a?os de desarrollar, comprar, producir y vender productos en Espa?a o en Europa a tener que vender, comprar, producir e innovar aqu¨ª y en (y para) los pa¨ªses emergentes. La demanda interna en Espa?a no crecer¨¢, nos estamos volviendo perif¨¦ricos: la industria migra de Norte a Sur y de Oeste a Este y nos ha invadido una emoci¨®n de miedo que paraliza nuestras decisiones frente a pa¨ªses con una ambici¨®n desmedida provocada por su emoci¨®n de esperanza.

?Nada nuevo? Pongamos datos a lo anterior: el coste de personal para la empresa ronda entre 0,50 y 2 euros la hora en Asia, frente a los 16-18 euros de Espa?a. Los pa¨ªses asi¨¢ticos consumen el 67% de los bienes de equipo mundiales, luego est¨¢ claro d¨®nde se ubica la industria. Invierten en I+D sobre PIB m¨¢s que nosotros: Espa?a, 1,3% (2011); China, 1,97% (2012); Singapur, 2,2% (2011); Corea del Sur, 3,74% (2011). Espa?a crecer¨¢ en PIB de 2012 a 2017 algo menos de un 2% acumulado, mientras que los emergentes crecer¨¢n cerca de un 40%, con niveles de absentismo menores que en Espa?a. Todo esto impacta en los resultados de nuestras empresas. Una pyme industrial china es capaz de obtener hoy unos resultados cuatro veces mejores que los nuestros. Aqu¨ª est¨¢ la clave de la competitividad. Sin coste, con tecnolog¨ªas medias, en sectores maduros y sin marcas de referencia (salvo algunas excepciones de primer nivel), la cosa se complica. Especialmente para las exportaciones.

Solamente tenemos una alternativa: apostar por las pymes y su internacionalizaci¨®n

?Existen oportunidades? Pues claro que s¨ª. Enormes. En primer lugar, la multilocalizaci¨®n, es decir, la diversificaci¨®n geogr¨¢fica con inversi¨®n en el exterior, comercial o industrial. Mejora ventas, exportaciones, valor a?adido, resultados y empleo en la casa matriz. La segunda oportunidad es el incremento de la clase media mundial: cada a?o, 80 millones de personas se incorporar¨¢n, con un impacto directo en el consumo. Por ¨²ltimo, los miles de proyectos de infraestructura consecuencia de los procesos de urbanizaci¨®n.

?Qu¨¦ pol¨ªticas dise?ar? Teniendo en cuenta las caracter¨ªsticas de la empresa espa?ola, solamente tenemos una alternativa: apostar por las pymes y su internacionalizaci¨®n. Tres razones para soportar mi afirmaci¨®n anterior: la primera es que Mondrag¨®n ha demostrado que la internacionalizaci¨®n no es un juego de suma cero, es decir, aquellas empresas multilocalizadas crecieron en ventas, exportaciones, valor a?adido, resultados y en empleo en la casa matriz frente a las que optaron por no internacionalizarse. En segundo lugar, las pymes pueden internacionalizarse, pero necesitan estructuras avanzadas, principalmente en emergentes, que faciliten un servicio integral. Por ¨²ltimo, no copiemos pol¨ªticas de otros pa¨ªses: la estructura de pymes en Espa?a casi dobla la de Alemania y Francia, que s¨ª disponen de empresas multinacionales con tecnolog¨ªas avanzadas y una marca pa¨ªs premium.

?Qu¨¦ pasar¨ªa si somos capaces de dise?ar un plan seleccionando y acompa?ando a pymes industriales en su estrategia de internacionalizaci¨®n y obteniendo los resultados que nosotros hemos obtenido estos a?os en t¨¦rminos de empleo?

Y si el efecto multiplicador de la industria en el resto de la econom¨ªa fuese entre dos y cinco, ?podr¨ªamos crear miles de empleos? Intent¨¦moslo. Sabemos hacerlo.

Josu Ugarte es presidente de Mondrag¨®n Internacional.