Pocoy¨® busca amigos con dinero
La CNMV advierte del riesgo de la emisi¨®n Zinkia y su presidente habla de ¡°linchamiento¡±
Pocoy¨® se la juega. Zinkia, la productora que cre¨® el famoso personaje infantil, est¨¢ inmersa en una emisi¨®n de obligaciones por valor de 7,78 millones de euros que se presume clave para su futuro. Con este dinero pretende cubrir sus urgentes necesidades de tesorer¨ªa, refinanciar deuda y, si queda algo de capital, potenciar sus equipos comerciales.
El problema para Pocoy¨®, sin embargo, es doble. A las dificultades que tienen las peque?as empresas para convencer a los inversores hay que a?adir la dura advertencia que ha incluido la CNMV en el folleto de emisi¨®n. El supervisor burs¨¢til pone el ¨¦nfasis en dos riesgos que en su opini¨®n tiene la operaci¨®n. En primer lugar, advierte de que Zinkia no cuenta con liquidez suficiente a corto plazo para atender sus deudas y que, si se prolonga la actual ca¨ªda de sus resultados, podr¨ªa acogerse al concurso de acreedores. En segundo lugar, la CNMV recuerda que la emisi¨®n se dirige a peque?os inversores ¡ªlas obligaciones se pueden adquirir desde mil euros¡ª y el cup¨®n anual que pagar¨¢n (11%) es inferior a la rentabilidad que le hubieran exigido los inversores profesionales.
Jos¨¦ Mar¨ªa Castillejo, presidente y m¨¢ximo accionista ¡ªaunque todos sus t¨ªtulos, el 51,8%, est¨¢n pignorados¡ª de Zinkia, reconoce que la CNMV est¨¢ en su derecho de hacer las advertencias que considere necesarias. ¡°Sin embargo, sus opiniones en nuestro caso son sesgadas, no transmiten la situaci¨®n real de la compa?¨ªa y han dado lugar a todo un linchamiento p¨²blico¡±, se queja en conversaci¨®n telef¨®nica con EL PA?S desde Angola, donde viaj¨® esta semana.
Con respecto al problema de liquidez, Castillejo se queja de que el plazo de aprobaci¨®n de la emisi¨®n se ha demorado un a?o. ¡°En Irlanda no hubi¨¦ramos tardado ni 30 d¨ªas en lograr el visto bueno. La ca¨ªda de ingresos de la que habla la CNMV se debe a que compara un semestre sensacional, el de 2012, con una primera mitad del a?o 2013 que ha sido floja. Pero seguimos manteniendo nuestro compromiso de lograr un Ebitda de 14 millones a final de a?o [de enero a junio las p¨¦rdidas de explotaci¨®n superaron el mill¨®n]¡±.
¡°G¨¹emes me ha dicho que sigue con la idea de comprar obligaciones¡±
El presidente de Zinkia quita hierro a qu¨¦ pasar¨ªa si la emisi¨®n no concluye con ¨¦xito. ¡°Ya tenemos compromisos de suscripci¨®n y todav¨ªa queda tiempo. La capacidad de supervivencia de la compa?¨ªa no est¨¢ en duda. Puede haber tensiones de tesorer¨ªa, pero contamos con contratos de distribuci¨®n muy importantes. Si el Estado espa?ol hubiera tenido tanto tiempo cerradas las ventas de liquidez como nosotros habr¨ªa suspendido pagos¡±. A pesar del optimismo del directivo, lo cierto es que a 30 de junio pasado, como recuerda la CNMV, el fondo de maniobra de la compa?¨ªa era negativo por valor de tres millones de euros.
En cuanto a si el cup¨®n que ofrecen las obligaciones hubiera sido m¨¢s alto de venderlas a inversores profesionales, Castillejo dice que se trata de un tipo de inter¨¦s bueno ¡ª¡°siete veces mayor a los dep¨®sitos bancarios¡±¡ª y que est¨¢ avalado por el informe de un experto independiente (Auren). ¡°El minorista es nuestro mercado natural. Los grandes fondos no est¨¢n interesados en financiar a peque?as empresas porque no tienen ninguna ventaja¡±.
El mercado tiene memoria, y m¨¢s cuando se le va a pedir dinero. En este sentido, Zinkia puede tener problemas con su emisi¨®n. La compa?¨ªa fue la primera en debutar en el Mercado Alternativo Burs¨¢til (MAB) en julio de 2009. La acci¨®n sali¨® valorada en 1,92 euros y ahora cotiza un 55% por debajo. Adem¨¢s, el creador de Pocoy¨® ha incumplido de forma repetida los objetivos que ha venido prometiendo desde entonces. ¡°Es cierto que hemos incumplido algunas promesas, pero aqu¨ª veo una paradoja. Fuimos los pioneros en el MAB y se nos oblig¨® a dar previsiones a cinco a?os. Adem¨¢s, hay que recordar que sufrimos la peor crisis econ¨®mica y de financiaci¨®n en muchos a?os. A pesar de este contexto tan negativo hemos sido capaces de multiplicar por cinco nuestros resultados¡±, seg¨²n Castillejo.
¡°Si el Estado hubiera tenido tan vedado el acceso a financiaci¨®n ya habr¨ªa quebrado¡±
La pol¨¦mica en torno a la situaci¨®n financiera de Zinkia ha subido de decibelios tras la renuncia de Juan Jos¨¦ G¨¹emes a su puesto de consejero ¡°por motivos personales¡± pocos d¨ªas despu¨¦s de que la CNMV advirtiera del riesgo de impago de la empresa. El exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid era, adem¨¢s, el presidente de la comisi¨®n de auditor¨ªa de Zinkia. ¡°Cada uno es libre de tomar sus decisiones. A G¨¹emes le afect¨® toda la pol¨¦mica que surgi¨® en torno a la compa?¨ªa, pero me ha dicho que sigue con sus planes de comprar obligaciones. Las cuentas de la empresa est¨¢n aprobadas por el consejo, auditadas y revisadas por el supervisor. En ese sentido no hay ning¨²n problema¡±, asegura el presidente.
Entre los riesgos que figuran en el folleto de emisi¨®n de las obligaciones destacan dos potenciales problemas de Zinkia por su elevada concentraci¨®n tanto en clientes (licenciatarios) como en productos (Pocoy¨®). En 2012 el 31% de los ingresos se concentr¨® en un ¨²nico cliente, la sociedad estadounidense Carears. Adem¨¢s, el contrato entre ambas expira en 2015. ¡°Recuperamos los derechos de comercializaci¨®n hace dos a?os despu¨¦s de un largo pleito. El acuerdo con Carears es importante y lo tenemos que cuidar, pero nuestro objetivo es lograr nuevos e importantes acuerdos de distribuci¨®n en los pr¨®ximos meses¡±, dice el directivo.
Por lo que se refiere a la distribuci¨®n de ingresos por productos la mayor¨ªa (el 61% en 2012) dependen de la explotaci¨®n comercial de Pocoy¨®. La viabilidad del negocio est¨¢ altamente ligada al desarrollo estrat¨¦gico de esta marca. ¡°No solo no est¨¢ agotado este producto, sino que apostamos por ¨¦l para crecer. Ahora debemos minimizar nuestro riesgo. Eso quiere decir que no tenemos que apostar por el desarrollo de nuevas marcas sino centrarnos en aquellas que ya funcionan muy bien¡±, concluye Castillejo.
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