El pol¨¦mico ¨ªndice argentino tiene los d¨ªas contados, pero no la inflaci¨®n

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha puesto esta semana fecha de caducidad al pol¨¦mico ¨ªndice de inflaci¨®n de Argentina, cuyos precios reales volver¨¢n a crecer con fuerza en 2014, seg¨²n el consenso privado.

El organismo internacional dio el lunes al pa¨ªs sudamericano de plazo hasta finales de marzo pr¨®ximo para presentar un nuevo ¨ªndice de precios que sustituya al creado en 2007, cuando el Gobierno del entonces presidente N¨¦stor Kirchner introdujo cambios metodol¨®gicos en la medici¨®n de la inflaci¨®n.

El directorio del Fondo reconoci¨® en un comunicado el trabajo en marcha y la intenci¨®n del Gobierno argentino de ofrecer un nuevo sistema de medici¨®n de precios que supere las "inexactitudes" de las actuales estad¨ªsticas.

Desde que se introdujeron los cambios metodol¨®gicos, la medici¨®n de los precios ha sido muy cuestionada por consultores privados y por los propios trabajadores del Instituto Nacional de Estad¨ªstica y Censos (Indec).

La distorsi¨®n desde entonces entre los datos oficiales y los difundidos por entidades privadas lleg¨® a ser de entre el doble y el triple.

S¨®lo en 2012, para el Indec la inflaci¨®n fue del 10,8 %, mientras que las consultoras privadas alcanz¨® el 25,6 %.

Estas diferencias impactaron en diferentes actividades de la econom¨ªa argentina, como las negociaciones salariales o los alquileres, que pasaron a regirse por ¨ªndices de precios no oficiales, en medio de una total desconfianza sobre la fiabilidad de los datos del Indec.

Guillermo Moreno, art¨ªfice de los cambios en el ente oficial de estad¨ªsticas y secretario de Comercio Interior, incluso lleg¨® a multar y a llevar ante la Justicia a las consultoras privadas por difundir sus propios ¨ªndices de precios, que ahora divulgan mensualmente bloques de oposici¨®n en el Parlamento.

Precisamente, Moreno es uno de los funcionarios desplazados las ¨²ltimas semanas por la presidenta argentina, Cristina Fern¨¢ndez, para dar un nuevo aire a su equipo de gesti¨®n y dar se?ales positivas a los inversores, entre ellas avenirse a las recomendaciones del FMI para recuperar la confianza en las estad¨ªsticas oficiales.

Aunque hacer transparentes los datos sobre la inflaci¨®n podr¨ªa ser un buen inicio para comenzar a normalizar las distorsiones de precios, un nuevo ¨ªndice no bastar¨¢ para frenar la inflaci¨®n, que continuar¨¢ en niveles altos, seg¨²n proyectan las consultoras privadas.

El Gobierno prev¨¦ que la inflaci¨®n cerrar¨¢ este a?o en torno al 10,3 % y que en 2014 llegue al 10,4 %.

Pero para consultoras privadas los precios cerrar¨¢n 2013 con un alza cercana al 26 % y del 28 % en 2014.

Para los expertos, la alta inflaci¨®n, junto con los problemas cambiarios y la p¨¦rdida de reservas monetarias, es consecuencia de la distorsi¨®n de precios relativos en la econom¨ªa argentina.

Seg¨²n este diagn¨®stico, los subsidios y la pol¨ªtica de precios regulados abarataron bienes y servicios estimulando un fuerte consumo pero desalentado la inversi¨®n.

Un c¨®ctel que desemboc¨® en desequilibrio fiscal y creciente emisi¨®n monetaria, alimentando aun m¨¢s la tensi¨®n inflacionaria.

De momento, los nuevos integrantes del equipo econ¨®mico argentino no han dado demasiadas pistas de c¨®mo piensan atacar el problema de la inflaci¨®n.

S¨®lo han manifestado su intenci¨®n de sellar nuevos acuerdos de congelaci¨®n de precios, pero medidas de este tipo no parecen entusiasmar demasiado ante los limitados efectos que han tenido hasta ahora para moderar las alzas.

Natalia Kidd