M¨¦xico ofrece a las multinacionales la regi¨®n petrolera m¨¢s rica
La regi¨®n con el 40% de las reservas del pa¨ªs ser¨¢ la mayor oferta a las empresas privadas y extranjeras tras la apertura del sector
La joya de la corona petrol¨ªfera en M¨¦xico se llama Chicontepec. Una regi¨®n de 3.800 kil¨®metros cuadrados en el norte de los estados de Veracruz y Puebla cuyo subsuelo alberga el 40% de las reservas de hidrocarburos del pa¨ªs. Tras la aprobaci¨®n de la reforma energ¨¦tica, que permite por primera vez en 76 a?os la inversi¨®n privada en la industria petrolera de M¨¦xico, esta zona estar¨¢ disponible casi en su totalidad para la instalaci¨®n de compa?¨ªas privadas en su suelo. De los 169 campos energ¨¦ticos que la Secretar¨ªa de Energ¨ªa de M¨¦xico ofrecer¨¢ a los nuevos participantes de la industria a partir del pr¨®ximo a?o, 90 est¨¢n localizados all¨ª.
Chicontepec podr¨ªa considerarse el tesoro de 139.000 millones de barriles de crudo que m¨¢s dolores de cabeza ha dado al Gobierno mexicano. Una mina de petr¨®leo descubierta desde 1926, en la que se comenz¨® a trabajar 30 a?os despu¨¦s, y de la que nunca se han podido obtener significativas cantidades de hidrocarburos por su complejidad geol¨®gica. Petr¨®leos Mexicanos (Pemex), como antiguo encargado de toda la industria petrol¨ªfera del pa¨ªs, se encontr¨® con un enorme yacimiento donde el crudo se hallaba en rocas con poca porosidad y permeabilidad, en un suelo con poca presi¨®n para extraer numerosos barriles de petr¨®leo. Hasta 2012, la petrolera mexicana logr¨® all¨ª una inestable producci¨®n de 74.000 barriles diarios, cuando yacimientos estrella como Cantarell o Ku Maloob Zaap, en el golfo de M¨¦xico, han conseguido m¨¢s de 800.000 barriles al d¨ªa.
La administraci¨®n del expresidente Felipe Calder¨®n intent¨® en su mandato (2006-2012) dar un empuje a la regi¨®n con una t¨ªmida reforma energ¨¦tica que apenas permiti¨® a las empresas privadas intervenir en la industria como proveedoras de servicios. ¡°Chicontepec es un proyecto exitoso, que le est¨¢ dando viabilidad al futuro de la industria petrolera de M¨¦xico¡±, dijo el exmandatario el 25 de noviembre de 2012, cinco d¨ªas antes de dejar la presidencia. Esos planes jam¨¢s se cristalizaron. ¡°Son reservorios muy peque?os que requieren nueva tecnolog¨ªa, muy probablemente fracking (fracturaci¨®n hidr¨¢ulica). El reto y el riesgo tecnol¨®gico son altos y s¨®lo una compa?¨ªa con experiencia y conocimiento del tema podr¨ªa arriesgarse y participar¡±, explica Dante San Pedro, abogado energ¨¦tico que particip¨® en la redacci¨®n de la reforma de 2008.
De los 169 campos energ¨¦ticos que la Secretar¨ªa de Energ¨ªa de M¨¦xico ofrecer¨¢ el pr¨®ximo a?o, 90 est¨¢n en Chicontepec
Pemex puso, en 2013, a disposici¨®n de las grandes petroleras seis campos en la zona y les ofreci¨® contratos incentivados, donde por cada barril de crudo extra que obtuvieran conseguir¨ªan una tarifa de hasta 6,5 d¨®lares. La oferta solo interes¨® a tres compa?¨ªas: Baker Hughes, Weatherford y Halliburton. Esta ¨²ltima redujo su pago a un centavo de d¨®lar por barril y tres campos quedaron desiertos. Los rumores de que el presidente, Enrique Pe?a Nieto, presentar¨ªa pronto la iniciativa de reforma energ¨¦tica hicieron retroceder a varias compa?¨ªas bajo la esperanza de obtener mejores condiciones contractuales en el futuro. Ahora es un negocio que puede convenir a todas estas compa?¨ªas. ¡°Por los retos tecnol¨®gicos de Chicontepec pensar¨ªa que la reforma energ¨¦tica podr¨ªa crear mejores condiciones para que las empresas existentes migren a los nuevos tipos de contratos¡±, se?ala Miriam Grunstein, acad¨¦mica del Centro de Investigaci¨®n y Docencia Econ¨®micas (CIDE).
La complejidad del yacimiento de Chicontepec no es un secreto, en 2010 la Comisi¨®n Nacional de Hidrocarburos (CNH) elabor¨® un pol¨¦mico informe sobre la regi¨®n donde apuntaba que no s¨®lo las dificultades t¨¦cnicas eran un problema sino tambi¨¦n los altos costos de indemnizaci¨®n para la poblaci¨®n que all¨ª vive, as¨ª como el riesgo medioambiental que corre la regi¨®n cuando la intervenci¨®n que se necesita es sumamente agresiva. En el mismo reporte, la Comisi¨®n criticaba duramente a Pemex por no cumplir con las expectativas: ¡°Pemex decidi¨® implementar un programa de perforaci¨®n de pozos en distintas partes del paleocanal de Chicontepec, a pesar de que contaba con un conocimiento limitado de las caracter¨ªsticas y de la din¨¢mica de los yacimientos en el proyecto. Esa decisi¨®n de inversi¨®n careci¨® de mecanismos oportunos de control para corregir su implementaci¨®n¡±, expone el texto.
El error de Pemex, seg¨²n el abogado San Pedro, fue la confianza que sus antiguos directivos tuvieron en que el futuro los alcanzar¨ªa para tener la capacidad de explotaci¨®n de Chicontepec. ¡°El yacimiento se desarroll¨® pensando en que con las nuevas tecnolog¨ªas que se fueran incorporando lo iban a hacer m¨¢s rentable. La realidad es que los n¨²meros no mienten, Chicontepec no deja dinero. Para Pemex ha sido m¨¢s un gasto que una utilidad¡±, se?ala. La actual subsecretaria de Hidrocarburos, Lourdes Melgar, ha reconocido en encuentros con la prensa internacional que el trabajo en este yacimiento ¡°no ha sido exitoso¡±. Ahora la petrolera mexicana se quedar¨¢ en una peque?a porci¨®n del yacimiento a la espera de una alianza con una compa?¨ªa con la capacidad t¨¦cnica para trabajar all¨ª.
Puestas las esperanzas en que la reforma energ¨¦tica ser¨¢ clave para el despegue de la econom¨ªa mexicana ¡ªel Gobierno calcula un crecimiento del 1% del PIB nacional para 2018 e inversiones de 50.000 millones de d¨®lares¡ª queda pendiente que la administraci¨®n de Pe?a Nieto dise?e los contratos con las condiciones legales y econ¨®micas para que las compa?¨ªas interesadas en Chicontepec levanten la mano.
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