Argentina cambia a su banquero central en plena tensi¨®n por el peso
Fern¨¢ndez acus¨® al jefe de la autoridad monetaria de favorecer a quienes especulan con la moneda mientras el pa¨ªs cumple dos meses de crisis de deuda, estancamiento e inflaci¨®n
Juan Carlos F¨¢brega ha dejado la presidencia del Banco Central de Argentina en medio de la tensi¨®n por una eventual devaluaci¨®n del peso, que ser¨ªa la segunda en 2014, despu¨¦s de la de enero. La presi¨®n sobre la tasa de cambio comenz¨® tras la crisis de deuda de julio pasado, cuando qued¨® en claro que el pa¨ªs sudamericano no iba a emitir deuda en el extranjero para solventar su escasez de divisas. A partir de entonces, la brecha entre la cotizaci¨®n del d¨®lar en el mercado de cambio oficial y controlado y la de la plaza ilegal, o ¡®blue¡¯ (azul), se ampli¨® del 50% al 85%. En el primero, la moneda norteamericana cuesta 8,45 pesos y en el segundo, 15,65. Una diferencia tal presiona a favor de una devaluaci¨®n que contraer¨ªa la actividad econ¨®mica y acelerar¨ªa a¨²n m¨¢s la inflaci¨®n.
El Gobierno de Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, que este a?o corrigi¨® por lo menos en parte las desprestigiadas estad¨ªsticas p¨²blicas, ha informado que en la primera mitad de 2014 el PIB solo creci¨® el 0,1%, un nivel tan bajo como en la crisis mundial de 2009, aunque a¨²n incomparable con el colapso argentino de 2001/2002. Las cifras oficiales siguen levantados sospechas, aunque menos que antes. El estudio Ferreres calcula que el PIB se ha contra¨ªdo en los primeros ocho meses de 2014 un 1,7%, pero a¨²n el a?o no estar¨ªa siendo tan malo como 2009 (-4,3%, seg¨²n sus cifras). Tras la crisis de deuda, los n¨²meros oficiales no muestrna un empeoramiento: la industria decreci¨® en agosto el 2,8%, menos que entre marzo y junio.
Tambi¨¦n hay diferencias de c¨¢lculo sobre la inflaci¨®n, aunque nadie duda de que la devaluaci¨®n de enero la ha acelerado. A partir de los n¨²meros del Gobierno se infiere que la inflaci¨®n anual alcanza el 30%, pero las agencias provinciales de estad¨ªsticas, en las que prefiere confiar una de las centrales sindicales kirchneristas en sus informes, hablan de un 40%.
Cifras oficiales reconocen estancamiento econ¨®mico e inflaci¨®n del 30%; otros creen que llega al 40% con recesi¨®n
En ese contexto, Fern¨¢ndez acus¨® en un discurso p¨²blico el martes, no a F¨¢brega directamente, pero s¨ª a los empleados del Banco Central que deber¨ªan haberle obedecido porque presuntamente ayudan a quienes especulan con otra devaluaci¨®n. La jefa de Estado cit¨® en ese acto al fiscal especializado en lavado de dinero, Carlos Gonella, que hab¨ªa participado el lunes de allanamientos en cuevas, o casas de cambio ilegales: ¡°El fiscal cuenta que desde el Banco Central algunos hab¨ªan avisado que estaba todo tranquilo, que no iba a pasar nada¡±.
Las cuevas compran y venden divisas fuera del control de la autoridad monetaria y de lo establecido por la ley penal cambiaria, pero se desconocen casos de presos por estos delitos. Funcionan en casas de cambio legales, agencias de viajes, sociedades de bolsa, bancos, joyer¨ªa o kioscos de golosinas. Por la tur¨ªstica peatonal de Florida, en Buenos Aires, se oyen los arbolitos, empleados de cuevas que gritan o susurran: ¡°Cambio, cambio¡±. Pero los arbolitos operan con turistas y ciudadanos de a pie, mientras que en las cuevas m¨¢s sofisticadas se movilizan el gran capital, incluido el que huye a para¨ªsos fiscales.
Fern¨¢ndez despach¨® otras cr¨ªticas a la autoridad monetaria, aunque no solo contra F¨¢brega sino que tambi¨¦n ata?en sus antecesores, incluido los de los 11 a?os del kirchnerismo, como Alfonso Prat-Gay, Mart¨ªn Redrado y Mercedes Marc¨® del Pont: ¡°En el Banco Central hay m¨¢s de 80.000 expedientes, algunos datan de los a?os 80, sobre infracciones a la ley penal cambiar¨ªa de exportadores, bancos, financieras, (infracciones) que no se tratan. Miles y miles de millones de d¨®lares que le han sido sustra¨ªdos, por emplear un t¨¦rmino adecuado, al pa¨ªs¡±.
La presidenta argentina continu¨®: ¡°?C¨®mo no se va a poder controlar un universo de 80 instituciones (financieras), que adem¨¢s est¨¢n fuertemente reguladas por la carta org¨¢nica del Banco Central, la nueva ley de mercado de capitales y la Comisi¨®n de Nacional de Valores?¡±. Quien hasta este mi¨¦rcoles dirig¨ªa esta comisi¨®n, Alejandro Vanoli, ahora presidir¨¢ el Banco Central y deber¨¢ cumplir con lo que le reclama la jefa de Estado, cuyo gobierno finaliza en diciembre de 2015, dos meses despu¨¦s de que los argentinos voten un sucesor.
Fern¨¢ndez tambi¨¦n denunci¨® que una medida del Banco Central se filtr¨® antes de tiempo a los bancos y eso les permiti¨® ganar dinero en el mercado oficial de cambio. Como dijo un economista af¨ªn al kirchnerismo, Aldo Ferrer: ¡°El especulador es un hecho natural de la econom¨ªa de mercado. Trata de ganar plata donde la oportunidad est¨¢. En un cuadro de incertidumbre que privilegia la especulaci¨®n, habr¨¢ especulaci¨®n¡±. Lo ins¨®lito es la connivencia de autoridades con pr¨¢cticas financieras ilegales, pero no extra?a. Cuando se reforzaron los controles cambiarios en 2011, el entonces secretario de Comercio Interior y mandam¨¢s de la econom¨ªa argentina, Guillermo Moreno, reconoc¨ªa ante empresarios que negociaba con las cuevas para mejorar la cotizaci¨®n del peso, seg¨²n public¨® en su momento el peri¨®dico P¨¢gina/12.
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