El fraude de la pasta fresca

Al Capone entr¨® en prisi¨®n acusado de delito fiscal despu¨¦s de que la polic¨ªa se hiciera con los registros manuscritos de su contabilidad secreta. En la actualidad, la inform¨¢tica ha modernizado mucho los m¨¦todos para defraudar, y ya no es necesario ir apuntando a mano los pagos en negro. Pero la Agencia Tributaria (AEAT) tambi¨¦n ha redoblado sus esfuerzos y el a?o pasado lanz¨® una cruzada contra el software de doble uso, que permite ocultar f¨¢cilmente la contabilidad b en archivos inform¨¢ticos. Hace menos de un mes desbarat¨® la ¨²ltima trama, que protagoniz¨® una cadena de restaurantes de comida italiana.

Zapater¨ªas y f¨¢bricas tambi¨¦n usaban ¡®software¡¯ para enga?ar al fisco, seg¨²n descubri¨® la Agencia Tributaria

El pasado 16 de diciembre un dispositivo especial de inspectores y t¨¦cnicos de la Agencia lanz¨® un golpe para destapar las complejas pr¨¢cticas fraudulentas de una cadena de restaurantes de comida italiana. Ese desapacible martes de invierno 70 funcionarios de ocho delegaciones regionales del fisco, junto con agentes de la polic¨ªa, irrumpieron a la una de la tarde en 15 establecimientos franquiciados de la cadena en toda Espa?a. Ten¨ªan la orden de entrar de forma simult¨¢nea para evitar que los encargados borraran los ordenadores con los ficheros que probaban el fraude.

Destaparon un sofisticado sistema para reducir ficticiamente los ingresos de los restaurantes a trav¨¦s de un programa inform¨¢tico que permit¨ªa llevar una doble contabilidad para pagar menos a Hacienda. La operaci¨®n, bautizada como Pasta Fresca, permiti¨® a Hacienda desmontar el sistema inform¨¢tico que la matriz obligaba a instalar a los restaurantes franquiciados. Hacienda se niega a revelar el nombre de los restaurantes. Explica que la ley establece el car¨¢cter reservado de la informaci¨®n tributaria. A?ade que podr¨ªa perjudicar el desarrollo de la investigaci¨®n, todav¨ªa en marcha.

La Operaci¨®n Pasta Fresca forma parte de un plan de la Agencia contra la creciente pr¨¢ctica del fraude denominado software de doble uso, que se instala en cajas registradoras o en los ordenadores desde donde se lleva la gesti¨®n y la contabilidad.

Los funcionarios de Hacienda han llegado a encontrar los ordenadores ocultos en habitaciones tapiadas o escondidas tras armarios que se corren. En una operaci¨®n los agentes se percataron de que la planta superior de la nave industrial que investigaban ten¨ªa menos altura que la planta baja. Tras registrar las instalaciones durante cinco horas encontraron un habit¨¢culo con un ordenador desde donde se llevaba la contabilidad b. La entrada a esta dependencia estaba oculta tras un armario repleto de abrigos.

En julio del a?o pasado desmont¨® tambi¨¦n un sistema similar utilizado por una cadena de zapater¨ªas, que desviaba hasta el 30% de su facturaci¨®n real a trav¨¦s de una doble pesta?a de su sistema inform¨¢tico.

Doble facturaci¨®n secreta

En el caso de los restaurantes italianos, el sistema consist¨ªa b¨¢sicamente en un programa inform¨¢tico de gesti¨®n de los restaurantes, pero que inclu¨ªa una opci¨®n para aplicar descuentos ficticios a los clientes mediante los cuales desviaba a una contabilidad b los ingresos cobrados en efectivo. La franquicia obligaba adem¨¢s a las filiales a instalar otro software que le permit¨ªa controlar desde las oficinas centrales toda la facturaci¨®n. De esta forma, pod¨ªa decidir en la cuant¨ªa de dinero en met¨¢lico que trasladaban a la contabilidad b para reducir su factura fiscal. A trav¨¦s de este programa inform¨¢tico, la empresa ra¨ªz volcaba dos veces al d¨ªa todas las operaciones en sus servidores. As¨ª pod¨ªa gestionar f¨¢cilmente la doble contabilidad.

Los restaurantes franquiciados ten¨ªan acuerdos para pagar unos royalties ¡ªcomisi¨®n por el uso de la marca¡ª de cerca del 5% de su facturaci¨®n a la matriz. Pero parte de los ingresos reales se ocultaban en la contabilidad b. Para evitar cobrar menos, la central emit¨ªa una factura con el concepto ¡°servicios de asesoramiento¡±, en realidad ficticios, y as¨ª la franquicia no perd¨ªa su comisi¨®n oficial. Esta factura serv¨ªa adem¨¢s para reducir las ganancias de los restaurantes y, por tanto, rebajar sus pagos a Hacienda.

Los funcionarios de la Agencia hicieron copias de seguridad de todos los equipos inform¨¢ticos hallados en los 15 restaurantes y en la central. Tras un primer an¨¢lisis, fuentes del fisco calculan que las ventas en negro no declaradas por estos restaurantes ascender¨ªan a m¨¢s de cuatro millones de euros. Entre el material incautado, hallaron recibos de comidas falseados por el software inform¨¢tico: hay tiques duplicados de la misma operaci¨®n: en uno figuran todos los conceptos facturados y en el otro se eliminan productos pagados en met¨¢lico.