Pemex recorta 4.000 millones para hacer frente a la crisis del crudo
El ajuste reduce en un 11,5% el presupuesto de la petrolera p¨²blica y recae sobre la inversi¨®n en refino, gastos corrientes y contratas
La crisis del crudo no da descanso a M¨¦xico. Pemex, la petrolera p¨²blica mexicana, ha acordado un recorte de 4.200 millones de d¨®lares, el 11,5% de su presupuesto, para hacer frente al vertiginoso desplome del precio del barril. El tijeretazo afectar¨¢ b¨¢sicamente a las inversiones en refino, gastos corrientes y contratas de servicios. Menos da?ados quedan, en principio, los cap¨ªtulos de producci¨®n y exploraci¨®n, dos apartados clave en el nuevo escenario al que se enfrenta M¨¦xico y que se caracteriza por la entrada en el terreno de juego, por primera vez en tres cuartos de siglo, de competidores extranjeros y privados.
La posibilidad de despidos, en un a?o electoral y con un tormentoso conflicto abierto en el sector educativo, parece muy lejana
El ajuste ha sido ordenado por el secretario de Hacienda, el todopoderoso Luis Videgaray, disipando cualquier duda sobre la absoluta dependencia gubernamental de Pemex, que acababa de estrenar autonom¨ªa presupuestaria y consejo de administraci¨®n. Ante la ca¨ªda del crudo, cuyos ingresos nutren un tercio del erario mexicano, el zar econ¨®mico opt¨® a finales de enero por una reducci¨®n en el gasto p¨²blico de 9.000 millones de d¨®lares. La medida, que evitaba tanto el peligroso recurso de engordar el d¨¦ficit como un impopular aumento de impuestos, fue saludada por los expertos como un ejemplo de realismo pol¨ªtico, pero puso el grueso de la carga en las espaldas de la petrolera p¨²blica. Pemex asumi¨® el 50% del drenaje con disciplina militar. No hubo una sola protesta, pese a que en diciembre, Videgaray, bajo el eufem¨ªstico ep¨ªgrafe de ¡°aprovechamiento para la naci¨®n¡±, ya le hab¨ªa retirado por sorpresa casi 3.500 millones de d¨®lares para cuadrar las cuentas.
El nuevo recorte llega en un momento en que la empresa se muestra especialmente vulnerable. La perforaci¨®n de pozos ha bajado peligrosamente el ritmo, la producci¨®n discurre cuesta abajo (de 3,3 millones de barriles diarios a 2,5 millones en diez a?os) y, sobre todo, en el horizonte se dibuja un largo invierno petrolero, con precios bajos y consumos moderados por gigantes como China o Europa.
En este entorno hostil, la entrada de capital extranjero, en la que puso todas sus esperanzas la reforma energ¨¦tica, parece tambalearse. El motivo es simple. A menos valor del crudo, menos beneficio. La regla es universal. Un bill¨®n de d¨®lares en inversiones en todo el mundo, seg¨²n Goldman Sachs, corren el riesgo de ser cancelados. Y M¨¦xico, que ha visto como en menos de un a?o el precio del barril pasaba de un m¨¢ximo de 104 d¨®lares a un m¨ªnimo de 37, contempla estas sacudidas desde el ojo del hurac¨¢n.
Bajo esta perspectiva, la compa?¨ªa p¨²blica ha dejado de lado consideraciones estrat¨¦gicas y ha decidido dar el hachazo a los proyectos de refino. ¡°Este apartado va a fenecer, es insostenible en las condiciones actuales. La ventaja coyuntural es que, precisamente por la ca¨ªda de precios, las importaciones est¨¢n muy baratas y se produce un efecto de compensaci¨®n¡±, se?ala la profesora externa del Centro de Investigaci¨®n y Docencia Econ¨®micas (CIDE), Miriam Grunstein.
Otro sector afectado por el ajuste ser¨¢n las contratas. Ah¨ª han sonado todas las alarmas. En el comunicado en que se hacen p¨²blicos los recortes se advierte de que las condiciones de mercado han variado y que se va a convocar a los contratistas para renegociar. ¡°Eso genera una inseguridad enorme en las empresas privadas¡±, advierte el experto David Shields.
Pero el aspecto m¨¢s espinoso del tijeretazo procede de un cap¨ªtulo donde la propia empresa mantiene una ambig¨¹edad calculada: el de personal. Pese a que las grandes petroleras internacional, como BP o Shell, se han lanzado a profundas podas, la cuesti¨®n de los despidos supone un tab¨² en M¨¦xico. ¡°El consejo solicit¨® implementar un esfuerzo importante en bajar el gasto corriente, incluyendo los relativos a recursos humanos y servicios personales¡±, indica la nota de Pemex, sin ofrecer m¨¢s detalles.
La posibilidad de despidos, en un a?o electoral y con un tormentoso conflicto abierto en el sector educativo, parece muy lejana. ¡°Ser¨ªa demasiado explosivo, no lo har¨¢n a corto plazo¡±, se?ala Grunstein. Su necesidad, sin embargo, es defendida por muchos especialistas. ¡°Con 160.000 empleados, Pemex es la mayor burocracia petrolera el mundo despu¨¦s de China y Rusia. Deber¨ªan redimensionar¡±, afirma Shields.
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