Los bolsos de lujo son espa?oles

En Ubrique est¨¢n euf¨®ricos. Doce a?os despu¨¦s del inicio de la mayor crisis sufrida por el pueblo, este vive un verdadero boom. Las grandes marcas de bolsos de lujo, que a partir del 2003 se abalanzaron a fabricar en Asia, hacen cola estos d¨ªas para volver a producir all¨ª. Ya nadie recuerda, pues, lo que seg¨²n Jos¨¦ Pulido, presidente de Empiel, la asociaci¨®n local del sector, define como ¡°un aut¨¦ntico batacazo¡±, cuando llegaron a sufrir una ca¨ªda de la facturaci¨®n del 50% y del 20% en el empleo.

¡°La afluencia de marcas extranjeras a las f¨¢bricas de la zona [unas 150] es tan elevada que seg¨²n mi ¨²ltimo recuento¡±, especifica Alfonso Morant, consultor de la industria, ¡°hay m¨¢s de cien marcas de nivel muy alto produciendo en Ubrique¡±. Est¨¢n todas las que son: Dior, Givenchy, Chanel, Carolina Herrera, Comme Des Gar?ons, Jil Sander, Hackett, Alfred Dunhill¡­ Incluso algunas marcas italianas, pa¨ªs que ocupa la primera posici¨®n como fabricante en Europa, est¨¢n desplazando su producci¨®n a este pueblo de C¨¢diz. ¡°El top ten de las grandes marcas de lujo mundiales ya est¨¢n aqu¨ª¡± asegura Pulido. Pero Ubrique, que concentra cerca del 60% de la producci¨®n espa?ola de marroquiner¨ªa (sobre todo en bolsos), no es la ¨²nica. Tambi¨¦n en Alicante, Barcelona, la Rioja, Galicia o Madrid est¨¢ subiendo la producci¨®n de estos art¨ªculos.

La apuesta por el exterior le ha permitido compensar la quiebra del mercado interno y mantener el nivel de producci¨®n entre los 1.800 y los 1.900 millones de euros anuales. Espa?a, que exportaba marroquiner¨ªa por valor de 419 millones de euros en el 2007, dobl¨® estas cifras el a?o pasado hasta los 841 millones. Las de bolsos crecieron incluso m¨¢s, desde 194 a 462 millones de euros, un 138%. Un repunte que no parece detenerse ya que, seg¨²n apunta Fernando Guti¨¦rrez, secretario general de Asefma, la patronal del sector, ¡°las exportaciones volvieron a crecer el 20,4% el a?o pasado¡±.

REGRESO A EUROPA

?Qu¨¦ explica el resurgir de estas dos industrias? El regreso de la fabricaci¨®n de bolsos de lujo desde Asia a Europa, una apuesta para la que Espa?a estaba bien preparada. ¡°Nuestra industria es puntera en el mundo¡± asegura Guti¨¦rrez, ¡°solo Italia, que produce m¨¢s y tiene m¨¢s marcas, se nos puede comparar en calidad¡±. Especialmente en Ubrique, ¡°donde¡± asegura Javier Gallego, gerente de Movex, el centro tecnol¨®gico de la ciudad, ¡°tenemos un know how que se ha transmitido por generaciones¡±. Adem¨¢s, mientras un patronista percibe en Ubrique en torno a los 1.250 euros brutos y un oficial marroquinero 1.000, en Francia e Italia los sueldos vienen a ser el doble.

Como estos sueldos siguen siendo altos en comparaci¨®n con los que se pagan en Asia, Marruecos o Turqu¨ªa, la industria espa?ola ha tenido que especializarse en el segmento alto. ¡°Es muy dif¨ªcil que un bolso hecho en Ubrique, que saca el 80% de sus ingresos de la marroquiner¨ªa de lujo, se pueda vender por menos de 350 euros¡± explica Pulido. Tan es as¨ª que, seg¨²n reconoce Guti¨¦rrez, ¡°las cadenas espa?olas de moda como Inditex, Mango o Cortefiel apenas fabrican en el pueblo y en general en Espa?a¡±. ¡°Solo fabrican aqu¨ª¡±, puntualiza Morant, ¡°cuando les entran las prisas y necesitan llegar en un periodo muy corto a tienda¡±.

Los bolsos de lujo han vuelto a Europa por una serie de circunstancias que han acabado por eliminar las ventajas de la producci¨®n en Asia: los sueldos, que no han parado de subir en China, los costes impuestos por la distancia (fletes, env¨ªo de equipos) o los aranceles. Las grandes marcas han visto, adem¨¢s, que no les tra¨ªa cuenta producir en esta regi¨®n debido a los problemas de calidad (inferior) y a la cultura de pirater¨ªa imperante en Asia. Adem¨¢s, los clientes de lujo, sobre todo los asi¨¢ticos, cuando pagan 1.000 euros por un bolso quieren que sea made in Europe, no en China. Y en Asia, otra pega, hay que producir en series grandes mientras las peque?as f¨¢bricas espa?olas est¨¢n preparadas para las series cortas que se estilan ahora.

M¨¢s ventajas: los plazos de dise?o-fabricaci¨®n y entrega son m¨¢s cortos aqu¨ª y los viajes de los equipos de dise?o y control de estas marcas m¨¢s r¨¢pidos y baratos. ¡°En dos horas est¨¢n en Espa?a y las diferencias culturales m¨ªnimas¡±, explica Morant. El control de las marcas de lujo sobre el producto es muy estrecho. Env¨ªan los bocetos y las pieles (espa?olas, pero tambi¨¦n francesas o italianas) y tambi¨¦n los forros, las cremalleras, las partes de metal y hasta el pegamento. Y luego hacen un control aleatorio de las prendas. ¡°Todo esto sale m¨¢s caro en Asia, por la distancia¡±, asegura Pulido. Para estar a la altura de las exigencias, las empresas fabricantes han tenido que ponerse las pilas. En Ubrique han fundado un centro tecnol¨®gico, Movex, en el 2008. La ciudad inaugur¨® tambi¨¦n el a?o pasado su Escuela de Artesanos de la Piel, que va ya por la tercera promoci¨®n.

SIN MARCAS PROPIAS

Algunos expertos se quejan de que la industria no se haya esforzado m¨¢s por crear marcas propias. Otros aducen que esto es dif¨ªcil ya que la marroquiner¨ªa de lujo est¨¢ copada por las grandes casas de lujo mundiales. ¡°Estas marcas¡±, explica Pulido, ¡°venden sus bolsos a 2.000 o 3.000, y en la f¨¢brica queda el 10% o 12%¡±. Pero, en Ubrique no pueden quejarse. Mientras el paro en la provincia de C¨¢diz supera el 35%, en el pueblo est¨¢ sobre el 15%. Casi toda la poblaci¨®n (17.000 personas) depende, de modo directo o indirecto, del sector.

Sin que se llegue a los extremos del pueblo andaluz, tambi¨¦n en Igualada (Barcelona), se respira optimismo. La producci¨®n de piel de Espa?a, el segundo productor de Europa despu¨¦s de Italia (con el 12% frente a su 60%), se est¨¢ recuperando. Entre el 2007 y el 2014 las exportaciones han subido de 341 a 396 millones de euros. La mayor parte de esta industria est¨¢ en Catalu?a, con el 50% de las empresas y el 47% del empleo. ¡°El curtido catal¨¢n exporta la mayor parte de su producci¨®n¡± apunta Josep Ballb¨¦, director de Acexpiel, la asociaci¨®n espa?ola del sector, ¡°y las que trabajan para marcas de lujo hasta el 85% o el 90%¡±. A Ballb¨¦ no le queda la menor duda de que ¡°si bien los italianos son m¨¢s creativos en lo que se refiere al trabajo de la piel, la nuestra es la de mejor calidad en el mundo¡±.