En turismo, lo que no cuentas son cuentos

Conseguir los objetivos deseados y alcanzar el ¨¦xito solo es posible si se controlan las circunstancias y condicionamientos del cambio de los escenarios en desarrollo. El progreso en el conocimiento y la mejora de la ciencia son los ¨²nicos caminos para lograr el dominio de la eficiencia. Como consecuencia, cualquier hecho en el marco de la experiencia tur¨ªstica, tambi¨¦n, deber¨¢ someterse a estos principios, y, necesariamente, tendr¨¢ que estar apoyado en bases estad¨ªsticas consistentes.

Ahora bien, ?han sido pertinentes las pol¨ªticas de desarrollo tur¨ªstico aplicadas en el pasado? Pienso que con frecuencia los aciertos han sido suficientes, pero las decisiones adoptadas sin haber sido estructuradas tomando como base an¨¢lisis cient¨ªficos, solo considerando las tendencias del momento, han impulsado acciones y medidas algunas de las cuales han sido desafortunadas y otras, escasamente adecuadas. Y aunque sea una realidad el reconocimiento de los millones de turistas que aumentaban de manera sucesiva, el balance final podr¨¢ ser considerado bueno, pero no excelente. Hablar solo de millones de turistas, sin otro contraste estad¨ªstico, motiva permanentemente que se propague la idea del ¨¦xito rotundo, un mensaje que siempre se acercar¨¢ a un peligroso triunfalismo.

Durante cincuenta a?os (1965-2015) se ha puesto de relieve la llegada a Espa?a de millones de turistas. Pero sin duda un verdadero y correcto an¨¢lisis de la realidad exig¨ªa un conocimiento m¨¢s profundo y m¨¢s detallado, estructurado en fuentes estad¨ªsticas completas y rigurosas, con capacidad de establecer con mayor precisi¨®n lo que se estaba haciendo, bien y mal. Y lo que se estaba consiguiendo, o por el contrario, perdiendo.

Lamentablemente, en Espa?a, en el conjunto del sistema tur¨ªstico, por causa del nivel alcanzado, falta informaci¨®n estad¨ªstica que mejore las bases de datos y permita aplicar pol¨ªticas eficientes, que no se conformen solo con la eficacia. Por ello nos preocupa, a quienes llevamos largo tiempo estudiando el turismo y contribuyendo a un regular conocimiento de la realidad tur¨ªstica, a quienes hemos trabajado en numerosos proyectos, que se prescinda de la estimaci¨®n de un dato b¨¢sico, como es la aportaci¨®n de la actividad tur¨ªstica. Y nos ofende, no se puede decir de otra manera, el descuido y la p¨¦rdida de inter¨¦s por ampliar el esfuerzo que conduzca a un mejor juicio sobre el turismo y la totalidad de sus impactos, que no son solo econ¨®micos sino ambientales, sociales y t¨¦cnicos.

Por eso vemos con preocupaci¨®n c¨®mo se vac¨ªa de cometidos al Instituto de Estudios Tur¨ªsticos, una potente instituci¨®n que en el pasado realiz¨® una ejemplar tarea de construcci¨®n del sistema estad¨ªstico del turismo. Desde all¨ª, por ejemplo, se foment¨® la elaboraci¨®n de trabajos b¨¢sicos como la EGATUR (la encuesta de gasto tur¨ªstico), la FAMILITUR (la encuesta de movimientos tur¨ªsticos de los espa?oles) y la FRONTUR (la encuesta de movimientos tur¨ªsticos en fronteras). La trayectoria del Instituto ha sido ejemplo en numerosos pa¨ªses tur¨ªsticos del mundo en cuanto al estudio y desarrollo de metodolog¨ªas para mejorar las acciones a favor de los viajes. Destacan entre estas acciones destinadas a obtener un mejor conocimiento del sistema tur¨ªstico la estimaci¨®n de la serie de Tablas Input-Output de la Econom¨ªa Tur¨ªstica, una aportaci¨®n que ha sido fuente y fundamento del posterior desarrollo de las cuentas sat¨¦lites (CSTE).

Acabamos de saber, he de reconocer que con dolor, que el INE no continuar¨¢ con la obligaci¨®n de su estimaci¨®n anual, un compromiso que hab¨ªa sido aprobado en el Plan Nacional de Estad¨ªstica. De esta manera, de un plumazo, se impide estimar la contribuci¨®n directa e indirecta del turismo al PIB por medio de las cuentas sat¨¦lites, lo que sin duda va a dificultar la difusi¨®n del valor de participaci¨®n del turismo en la renta nacional, que en la actualidad es el 11,7 %. Con esta decisi¨®n se limita el uso de un valor estrat¨¦gico para organizar una pol¨ªtica sectorial eficiente. Es muy grave, a mi juicio, que nuestro pa¨ªs, que ha sido pionero en la construcci¨®n de una teor¨ªa formal del turismo, llegue a desconocer la colaboraci¨®n del sector econ¨®mico m¨¢s importante en la formaci¨®n de la riqueza y el bienestar de sus ciudadanos. Porque en turismo, tambi¨¦n, lo que no cuentas, son cuentos.

Manuel Figuerola Palomo es experto en estructura del mercado tur¨ªstico y distribuci¨®n tur¨ªstica, consultor internacional de la OMT y director del doctorado en Turismo de la Universidad Nebrija.