La renta agraria sube, pero todav¨ªa est¨¢ al nivel de 2001

La renta agraria en 2015 subi¨®, en moneda corriente, un 1,7% sobre el ejercicio anterior y alcanz¨® los 22.170 millones de euros. De esa cifra, 6.493 millones, el 29,3%, correspondieron a subvenciones, mayoritariamente comunitarias.

Este volumen de renta se coloca algo por encima del nivel de 2000 y por debajo de 2001. Desde esa fecha, salvo los a?os 2003 y 2007, cuando la renta super¨® los 26.000 millones, en el resto de los ejercicios se movi¨® entre los 22.000 y los 23.000 millones, lo que supone una permanente ca¨ªda de poder adquisitivo de agricultores y ganaderos con diferentes Gobiernos.

Seg¨²n la Administraci¨®n, el resultado ligeramente positivo de 2015 se debe al buen comportamiento de las producciones de frutas y hortalizas y, sobre todo, a la buena evoluci¨®n de los precios durante la mayor parte del a?o. El conjunto de las frutas y hortalizas suponen el 40% de la producci¨®n final agr¨ªcola. Cereales y, sobre todo, vino y aceite han tenido un comportamiento negativo, al igual que la mayor parte de las producciones ganaderas, donde destacan las ca¨ªdas de los precios de leche, porcino y huevos hasta que se abri¨® el mercado estadounidense.

Al margen de las condiciones meteorol¨®gicas, la evoluci¨®n de las rentas agrarias obedece a dos factores. Por un lado, a la producci¨®n agraria que est¨¢ estabilizada en la ¨²ltima d¨¦cada entre los 42.00 y los 43.000 millones de euros. Esto se debe a un mal funcionamiento de los mercados y a la incapacidad del sector para defender sus precios frente a la distribuci¨®n. Por otra parte, en contra de las rentas agrarias juega el incremento de los costes de los medios de producci¨®n, que en la ¨²ltima d¨¦cada han pasado de significar el 30% de la producci¨®n final agraria al 50% que suponen en la actualidad, con casi 22.000 millones de euros. De esa partida, destacan los gastos en fertilizantes y energ¨ªa, que suponen en cada caso m¨¢s de 2.000 millones.