Indemnizaci¨®n millonaria a los exjefes de la quebrada Catalunya Caixa
El Supremo ordena que se pague 1,2 millones a Adolf Tod¨® y Jaume Masana
El Tribunal Supremo ha ratificado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) que obligaba a CatalunyaCaixa (CX) a pagar 1,2 millones de euros de indemnizaci¨®n por despido al expresidente Adolf Tod¨® y al exconsejero delegado Jaume Masana, pues lo considera improcedente.
El alto tribunal ha rechazado el recurso que hab¨ªa interpuesto el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB) para evitar este pago aduciendo indicios de irregularidades en la gesti¨®n por parte de estos directivos, a los que ces¨® el 10 de mayo de 2013, seg¨²n ha adelantado este jueves La Vanguardia. El Supremo ha condenado al Estado a las costas del juicio, como tambi¨¦n hizo el Superior de Justicia.
El auto del Supremo, consultado por Europa Press, comparte la tesis del TSJC respecto a que las argumentaciones de despido contra los directivos ¡ªquebranto de los deberes de buena fe y encargo de un informe a la consultora McKinsey de espaldas al consejo y por un precio excesivo¡ª son "bastante et¨¦reas y poco concretas".
El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya desestim¨® el recurso interpuesto por el Estado, a trav¨¦s de Catalunya Caixa, a una sentencia de un juzgado de Barcelona que declaraba improcedente el despido de Tod¨® y Masana, y en su sentencia obligaba a la entidad a readmitirles o a pagarles una indemnizaci¨®n de 600.000 euros a cada uno. La sentencia del Supremo es un varapalo para el Ministerio de Econom¨ªa, responsable del Frob, que fue quien realiz¨® el despido y hab¨ªa hecho bandera de la limpieza de la entidad porque consideraba que Tod¨® y Masana eran responsable de la quiebra de la entidad.
Cr¨ªticas a Guindos
El ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, ha declarado en el Congreso, en varias ocasiones, que esta ha sido la mayor quiebra del sistema financiero en proporci¨®n al tama?o de la entidad. En el sector financiero se realizaron fuertes cr¨ªticas a Econom¨ªa por no relevar antes a Tod¨®, ya que Guindos no le destituy¨® de la presidencia de la entidad hasta el 10 de mayo de 2013, cuando coloc¨® a Carlos Pla. Para entonces, las cuentas de Catalunya Caixa arrastraban enormes necesidades de provisi¨®n, debido a que la buena parte de los cr¨¦ditos se refinanciaron sin garant¨ªas y sin recibir ni siquiera los intereses de los pr¨¦stamos. En realidad, el origen de los problemas de la entidad era previo incluso a la llegada de Tod¨® y Masana.
La entidad catalana recibi¨® 12.052 millones de ayudas p¨²blicas, frente a los 22.424 millones de Bankia, pero era mucho m¨¢s peque?a. Catalunya Caixa fue vendida al BBVA por 1.165 millones. As¨ª, del total inyectado, el Estado recuper¨® 782 millones y 383 millones fueron para el Fondo de Garant¨ªa de los bancos, que hab¨ªa adquirido el 32% del capital. Adem¨¢s, el fondo Blackstone pag¨® 328 millones por una cartera de cr¨¦dito. Al final, el agujero neto, seg¨²n los datos del Banco de Espa?a, fue de 10.942 millones.
La indemnizaci¨®n concedida resulta de sumar dos anualidades de salario, fijado en un m¨¢ximo de 300.000 euros brutos anuales para los directivos de entidades que hubiesen sido nacionalizadas.
El auto considera que no hubo quebranto de la buena fe sino discrepancia interna "t¨¦cnico-profesional con evidente contenido econ¨®mico-pol¨ªtico" en los ¨®rganos de gesti¨®n de CataunyaCaixa por la disparidad de opiniones entre los despedidos y los representantes del Frob en el consejo de administraci¨®n.
En el caso del informe, se?ala que no hay pruebas que concluyan que el precio del informe fue excesivo, y que fue remitido al Frob pero sin constar acreditaci¨®n de si fue un borrador o la versi¨®n definitiva, "lo que impide profundizar m¨¢s en este extremo".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.