Populismo: comunismo 2.0
Si Europa reacciona y hacemos pol¨ªticas socialdem¨®cratas que disminuyan el paro y suban los salarios, el populismo volver¨¢ a ser una fuerza marginal
El Manifiesto Comunista de Marx y Engels describe los problemas del sistema capitalista, el principal su incapacidad para conseguir una distribuci¨®n de la renta justa compatible con la democracia y la estabilidad social. Pero el comunismo como alternativa gener¨® m¨¢s problemas a los ciudadanos de los que pretend¨ªa resolver.
Marx pron¨®stico que el capitalismo morir¨ªa de ¨¦xito. Las empresas eficientes se convertir¨ªan en monopolios, se apropiar¨ªan de toda la renta y alienar¨ªan a los empleados. Los trabajadores alienados har¨ªan la revoluci¨®n y llegar¨ªa el comunismo que se aprovechar¨ªa de la tecnolog¨ªa y la eficiencia del capitalismo para redistribuirla.
El comunismo lleg¨® en Rusia, pa¨ªs agr¨ªcola que no hab¨ªa desarrollado la burgues¨ªa ni ten¨ªa empresas exitosas con tecnolog¨ªa. Marx hab¨ªa muerto pero Engels sentenci¨® que los caminos de la revoluci¨®n eran inescrutables.
El mayor experimento comunista fue el muro de Berl¨ªn en 1945. Ambas Alemanias estaban asoladas por el nazismo y la guerra en 1945. En 1990 Alemania del Oeste con un modelo socialdem¨®crata era una de las econom¨ªas m¨¢s pr¨®speras del mundo. No hab¨ªa empresas monopol¨ªsticas que dominaran el sistema y el peso de los salarios de los trabajadores hab¨ªa aumentado significativamente en detrimento del capital. Alemania del Este, con un modelo comunista, ten¨ªa una renta por habitante la mitad que la de un alem¨¢n del Oeste.
El fracaso del comunismo fue tan estrepitoso que los comunistas negaron serlo, salvo algunos nost¨¢lgicos como Julio Anguita o Alberto Garz¨®n. No es que los comunistas abandonaran el comunismo, es que el comunismo les abandon¨® a ellos.
Pero lejos de reconocer el fracaso de sus ideas se reconvirtieron en populistas, especialmente en Am¨¦rica Latina. Ya no eran comunistas, ahora eran antiglobalizaci¨®n y antiliberales. Para ellos, hasta los socialdem¨®cratas que vencieron a Thatcher y a Reagan, pasaron a ser neoliberales. Pero los latinoamericanos, tras 15 a?os de populismo, tambi¨¦n han descubierto que genera m¨¢s problemas de los que intenta resolver. Venezuela es el caso extremo, donde la hiperinflaci¨®n ha empobrecido a los de abajo, a los funcionarios y los pensionistas hasta niveles de los a?os ochenta.
En Argentina, donde Kirchner ha perdido las elecciones tras una grave crisis econ¨®mica donde la pobreza y la desigualdad han vuelto a aumentar. Y en Ecuador, donde la econom¨ªa destruye empleo y Correa aplica duros recortes en sanidad y educaci¨®n. En Europa el populismo es inviable dentro del marco democr¨¢tico y jur¨ªdico de la UE. Syriza lo intent¨® y acab¨® rescatando a los bancos y aplicando duros recortes como Rajoy en 2012.
En Espa?a Podemos y sus confluencias ni lo podr¨¢n intentar, al tener unos 80 esca?os de 350. En sus alcald¨ªas ya pagan la deuda que promet¨ªan no pagar, contin¨²a la austeridad, los j¨®venes siguen cabreados y sigue habiendo los mismos pobres.
La otra opci¨®n es salir del euro. Anguita la defiende con pasi¨®n, y provocar¨ªa m¨¢s pobreza e infelicidad. Si Europa reacciona y hacemos pol¨ªticas socialdem¨®cratas el populismo volver¨¢ a ser marginal. Si sigue gobernando la derecha en Espa?a y en Europa, el populismo continuar¨¢.
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