El talento quiere volver a casa

¡°Estoy feliz. ?Feliz!¡±. No han pasado ni dos minutos desde que apareci¨® por la plaza Mayor de Valladolid, y Nuria S¨¢nchez no puede ocultar su alegr¨ªa. Tras cuatro a?os en Londres en los que trabaj¨® primero en lo que pudo ¨Ccuidado de ni?os, limpieza¡­- y m¨¢s tarde en puestos m¨¢s cualificados, esta psic¨®loga de 31 a?os ha vuelto por fin a casa. Ella se fue en los momentos m¨¢s duros de la crisis y solo ha querido retornar cuando ha dado con un proyecto donde aprovechar lo aprendido en su experiencia brit¨¢nica.

Como ella, cada vez m¨¢s espa?oles que huyeron del pa¨ªs europeo con mayor tasa de desempleo juvenil ¡ªcon permiso de Grecia¡ª preparan las maletas de vuelta. Conscientes de los beneficios de este movimiento migratorio inverso, las administraciones municipales y auton¨®micas van desplegando poco a poco una t¨ªmida respuesta institucional.

A pocos metros de la terraza en la que la joven psic¨®loga desgrana los detalles de cuatro a?os de emigraci¨®n forzosa tiene su despacho Antonio Gato, concejal de Hacienda y Promoci¨®n Econ¨®mica de Valladolid. A ¨¦l tambi¨¦n se le nota contento. En su caso, la alegr¨ªa procede de la puesta en marcha de uno de los planes estrella de este Ayuntamiento gobernado por el PSOE con el apoyo de Podemos: la apuesta por el retorno de talento.

La mayor ciudad de Castilla y Le¨®n quiere luchar contra un proceso de p¨¦rdida de poblaci¨®n ¡ªcerca de caer por debajo de la barrera de los 300.000 habitantes¡ª y contra una huida de cerebros que en los ¨²ltimos a?os le ha hurtado en torno a un 80% de sus titulados universitarios. Para ello, el Ayuntamiento acaba de aprobar un programa dotado con 500.000 euros con el que pretenden convencer a aquellos que se fueron y que ahora se plantean dar marcha atr¨¢s.

¡°Otras administraciones tienen planes de apoyo, pero est¨¢n pensados para cuando el retornado ya est¨¢ aqu¨ª. Y quiz¨¢s en ese momento ya no le hace tanta falta. Nosotros queremos influir en la toma de decisi¨®n¡±, asegura con orgullo el concejal.

Es improbable que alguien vaya a tomar una decisi¨®n de tanto calado tan solo por una ayuda p¨²blica. Pero el Ayuntamiento quiere ofrecer incentivos a los que no se terminan de decidir, y para eso ha dise?ado tres l¨ªneas de apoyo: para empresas que contraten a retornados, para aquellos que quieran iniciar un proyecto innovador en la ciudad y para gastos pr¨¢cticos, como la mudanza o el alojamiento provisional.

El fen¨®meno no es nuevo, pero s¨ª creciente. Y la mejor¨ªa de la econom¨ªa espa?ola ¡ªcon una tasa de paro que, aunque a¨²n est¨¢ en niveles insosteniblemente altos, ha descendido ocho puntos en cuatro a?os¡ª lo refuerza. A todo emigrante le llega un momento en el que debe plantearse si su apuesta por el extranjero es definitiva o no. En 2015, fueron 52.109 los espa?oles que dieron el paso, un 27% m¨¢s que en el a?o anterior. El INE a¨²n no ha publicado los datos de 2016, pero la tendencia al alza continu¨® en el primer semestre, con casi 28.000 viajes de vuelta.

Para hablar de aquellos que quieren dejar atr¨¢s la etiqueta de emigrantes, pocas personas m¨¢s adecuadas que Diego Ruiz del ?rbol y Ra¨²l Gil. Son los creadores de Volvemos.org, una aplicaci¨®n pensada para poner en contacto a compa?¨ªas deseosas de emplear talento huido al extranjero con aquellos que quieren retornar. En un a?o de existencia, m¨¢s de 6.000 espa?oles ¡ªsobre todo residentes en Reino Unido y Alemania¡ª se han dado de alta rellenando un detallado cuestionario, una base de datos de excepcional valor para analizar las motivaciones, deseos y frustraciones de una generaci¨®n que se ha tenido que buscar la vida fuera de su pa¨ªs.

Para poner en marcha su proyecto, Ruiz del ?rbol y Gil no tuvieron que mirar muy lejos. Tan solo echar un vistazo a su propia historia personal, y sacar la conclusi¨®n de que como ellos hab¨ªa mucha gente m¨¢s. Por diversos motivos, este ingeniero y experto en comunicaci¨®n sintieron al mismo tiempo que su larga temporada en Berl¨ªn hab¨ªa acabado. Con una cerveza en mano en un bar de la capital alemana, empezaron a dise?ar una plataforma que deb¨ªa funcionar como una especie de Tinder entre emigrantes y empresas. Ahora, han sustituido las amplias y oscuras avenidas de Berl¨ªn por el castizo barrio de Embajadores, en Madrid, donde han alquilado un espacio de coworking.

Desinter¨¦s

Un a?o despu¨¦s, la realidad es muy distinta de la que se esperaban. Han comprobado con frustraci¨®n el desinter¨¦s de las empresas en gastar dinero para contratar residentes en el extranjero, procesos habitualmente lentos y costosos. Enviaron una carta a los consejeros delegados del Ibex 35. Con escasos resultados. ¡°Hemos avanzado a costa de darnos golpes contra la pared¡±, reconoce Gil.

La sorpresa positiva lleg¨® con unas administraciones p¨²blicas crecientemente sensibilizadas. Adem¨¢s de colaborar en la puesta en marcha del plan de Valladolid, Volvemos.org est¨¢ en contacto con una treintena de Ayuntamientos y Comunidades Aut¨®nomas. En el otro lado de la balanza, los creadores de esta plataforma online critican al Gobierno central por no ofrecer una respuesta adecuada ante lo que se ha convertido en un problema social.

De vuelta a Valladolid, el concejal de Econom¨ªa prefiere no aventurar una cifra sobre el n¨²mero de retornados que propiciar¨¢n las ayudas p¨²blicas. Por lo de pronto, la Agencia de Innovaci¨®n, de la que depende el plan, ya ha contratado como gerente a su propio expatriado, Jes¨²s G¨®mez, de vuelta en Espa?a tras 15 a?os en Alemania.

Al recordar su experiencia en Reino Unido, la psic¨®loga Nuria S¨¢nchez tiene sentimientos encontrados. Cuenta que ella nunca quiso marcharse de Espa?a, que solo lo hizo por necesidad y que cada d¨ªa de esos cuatro a?os buscaba trabajos o enviaba curr¨ªculum a su pa¨ªs. Pero al mismo tiempo reconoce haber vivido una experiencia extraordinaria. ¡°Mi etapa como emigrante es lo peor que me pas¨® en la vida, porque hubo momentos muy duros. Pero tambi¨¦n ha sido lo mejor. Hoy no ser¨ªa la que soy si no me hubiese ido¡±, concluye.