Takata se declara en bancarrota tras la crisis provocada por sus ¡®airbags¡¯
El fabricante de componentes de autom¨®vil japon¨¦s suministr¨® durante a?os millones de piezas defectuosas a las principales marcas del mundo
El fabricante japon¨¦s de componentes del autom¨®vil Takata se declar¨® en bancarrota al no poder hacer frente a la enorme deuda contra¨ªda en los ¨²ltimos a?os, unas obligaciones derivadas de la substituci¨®n de millones de airbags defectuosos en todo el mundo. El mal funcionamiento de algunos dispositivos han provocado una quincena de muertes en la carretera y decenas de heridos porque, en el momento de la colisi¨®n, ¨¦stos explotaron y arrojaron trozos de metal procedentes del encapsulado hacia el conductor.
El Consejo de Administraci¨®n de Takata hizo p¨²blica la decisi¨®n de someterse bajo tutela judicial este lunes con el objetivo de reestructurar su deuda, que supera los 8.000 millones de euros, informa la agencia japonesa Kyodo. La medida afecta tambi¨¦n a la subsidiaria del grupo en Estados Unidos, TK Holdings. El regulador burs¨¢til japon¨¦s suspendi¨® la cotizaci¨®n de los t¨ªtulos de la empresa, que en las ¨²ltimas semanas se hab¨ªan desplomado por los rumores de una posible quiebra. Se trata de la mayor bancarrota en Jap¨®n hasta la fecha.
El infierno de Takata comenz¨® en 2014, cuando sali¨® a la luz que la compa?¨ªa hab¨ªa escondido durante a?os un defecto en los airbags vendidos a m¨¢s de una docena de fabricantes de autom¨®viles, entre ellos Honda, Toyota, Nissan, BMW, Ford o General Motors. El problema radica en el inflador de la bolsa de aire, hecho de un material que al cabo de un tiempo y en condiciones clim¨¢ticas extremas lo hace especialmente vulnerable a roturas y explosiones. La compa?¨ªa fue obligada a llamar a revisi¨®n unos 100 millones de veh¨ªculos en todo el mundo, un proceso que contin¨²a a d¨ªa de hoy.
Takata anunci¨® que ha llegado a un acuerdo con la empresa de componentes estadounidense Key Safety Systems -filial estadounidense de la firma china Ningbo Joyson Electronic- para venderle la mayor¨ªa de sus activos rentables por unos 1.400 millones de euros. Takata, por ejemplo, produce tambi¨¦n una tercera parte de los cinturones de seguridad utilizados en los veh¨ªculos en todo el mundo.
Este dinero servir¨¢ para seguir con el proceso de revisi¨®n de veh¨ªculos y hacer frente a los gastos relacionados con los numerosos pleitos judiciales y compensaciones pendientes a los usuarios afectados y a las marcas, que asumieron de su bolsillo gran parte de los costes de los recambios ante las dificultades financieras que atravesaba Takata. Muchas de estas compa?¨ªas se hab¨ªan ya hecho a la idea que no recuperar¨ªan este dinero.
Al mal funcionamiento de los airbags se le atribuyen como m¨ªnimo 17 muertes y m¨¢s de 150 personas heridas en todo el mundo. En Estados Unidos, uno de los pa¨ªses m¨¢s afectados, la empresa fue sancionada este a?o con una multa de 1.000 millones de d¨®lares con el objetivo de zanjar una investigaci¨®n penal por parte del regulador de seguridad vial.
Los activos de Takata que no absorbe Key Safety Systems ser¨¢n reorganizados para continuar produciendo nuevos infladores de airbag que reemplacen a los defectuosos, seg¨²n informaron ambas compa?¨ªas. Uno de los acreedores de la empresa japonesa ha anunciado un nuevo pr¨¦stamo de unos 200 millones de euros para que Takata pueda seguir operando y mantener el ritmo de trabajo de las decenas de empresas subcontratadas por la compa?¨ªa japonesa durante el proceso de reestructuraci¨®n. Key Safety Systems garantiza adem¨¢s que mantendr¨¢ "pr¨¢cticamente todos" los 60.000 trabajadores en m¨¢s de 23 pa¨ªses, as¨ª como las f¨¢bricas en Jap¨®n. A largo plazo, sin embargo, todo indica que la marca Takata desaparecer¨¢.
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