La ¡®naci¨®n startup¡¯ solo beneficia a unos pocos afortunados
El ecosistema tecnol¨®gico israel¨ª solo es capaz de ocupar a uno de cada 10 j¨®venes
El exitoso ecosistema de las startup, la puntera industria tecnol¨®gica que capta para Israel el 15% del capital-riesgo global en ciberseguridad, solo da empleo a una d¨¦cima parte de la poblaci¨®n laboral. El paradigma del triunfo en los cibernegocios lo encarnan compa?¨ªas como Waze, que vendi¨® su navegador para autom¨®viles a Google por mil millones de euros en 2013, o Mobileye, adquirida por Intel por m¨¢s de 14.300 millones este mismo a?o con el fin de disponer de su avanzada tecnolog¨ªa para el control de veh¨ªculos de conducci¨®n aut¨®noma.
Las multinacionales acuden a pescar en el caladero de las empresas emergentes israel¨ªes promocionado por la Administraci¨®n, que financia hasta el 85% de la inversi¨®n de puesta en marcha de las startup. El 15% restante lo suelen aportar las incubadoras privadas. Se agrupan sobre todo en el ¨¢rea metropolitana de Tel Aviv, pero tambi¨¦n est¨¢n presentes en Jerusal¨¦n o Nazaret. El Gobierno decidi¨® crear hace casi cinco d¨¦cadas en todos los ministerios la figura del jefe cient¨ªfico, el responsable de apoyar desde el sector p¨²blico el desarrollo de los proyectos de innovaci¨®n y coordinar las decisiones de inversi¨®n p¨²blica. El Gobierno "anima" adem¨¢s a las grandes empresas internacionales que quieren instalarse en el Estado a abrir sus propios centros de I+D.
Mercado de patentes
"El camino del ¨¦xito est¨¢ sembrado de fracasos", reconoce Uri Levine, el creador del navegador Waze adquirido por Google, quien no se retir¨® del sector tecnol¨®gico despu¨¦s de haber amasado una fortuna. A los 51 a?os ha fundado otra startup para desarrollar la aplicaci¨®n Moovit, destinada a usuarios del transporte p¨²blico, cuyo uso est¨¢ muy extendido en Israel. "Si el proyecto fracasa, no pasa nada, a nadie le van a embargar el piso", puntualiza el consejero econ¨®mico y comercial de Espa?a en Tel Aviv. "Sin embargo, en Israel no se ha desarrollado suficientemente la fase de acceso al mercado de las patentes innovadoras, lo que abre una oportunidad a inversores con experiencia comercial global", precisa Blasco.
Telef¨®nica Internacional, por ejemplo, est¨¢ presente en Israel con un proyecto de I+D para su aplicaci¨®n Tu Go, sobre llamadas a trav¨¦s de Internet en itinerancia (roaming), desarrollada para dispositivos wearables (tecnolog¨ªa ponible). Banco Santander tambi¨¦n participa en un centro de I+D del sector financiero junto con otras entidades. El fondo de capital riesgo del Santander, InnoVentures, ha invertido en el desarrollo de la startup israel¨ª MyCheck, especializada en el pago mediante tel¨¦fonos m¨®viles. Otras empresas espa?olas con menos renombre, sin embargo, prefieren cambiar de identidad o utilizar el de una de sus filiales menores para poder operar en el mercado israel¨ª sin ver limitadas sus posibilidades de expansi¨®n en los pa¨ªses isl¨¢micos.
El ecosistema de empresas emergentes israel¨ªes debe su ¨¦xito al "desarrollo de instrumentos oficiales de apoyo a la creaci¨®n de empresas y para la financiaci¨®n de la innovaci¨®n", asegura la experta en desarrollo tecnol¨®gico industrial Carmen Galindo en un estudio publicado el pasado mes de marzo por el Ministerio de Econom¨ªa espa?ol. El ¨¦xito del llamado Silicon Wadi (un calco de Silicon Valley haciendo referencia a los wadi o ramblas) implica a 4.770 startup que recibieron una inversi¨®n privada total por valor de 4.400 millones de d¨®lares en 2015. Israel dedic¨® ese a?o a I+D civil el 4,3% del PIB.
En los inicios de su pol¨ªtica de fomento de la innovaci¨®n, Israel se centr¨® en las universidades y los centros de investigaci¨®n. En 1969 se cre¨® la Oficina del Jefe Cient¨ªfico, para gestionar una pol¨ªtica transversal de apoyo a la I+D y la creaci¨®n de empresas tecnol¨®gicas. La pol¨ªtica de la llamada Startup Nation, dirigida en la actualidad desde la Autoridad Nacional de la Innovaci¨®n, promueve cada a?o la creaci¨®n de unas 80 empresas emergentes.
Las incubadoras p¨²blicas de empresas de base tecnol¨®gica surgen a partir de 1991 con el objetivo pol¨ªtico de integrar en el mercado laboral a los miles de inmigrantes jud¨ªos cualificados llegados desde la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica. Los proyectos contaban con una financiaci¨®n estatal de hasta el 85% del presupuesto. El Gobierno se garantiza mediante derechos sobre las patentes (royalties) aprobadas la devoluci¨®n del cr¨¦dito concedido a trav¨¦s de las incubadoras, cuya gesti¨®n ha sido asignada en los ¨²ltimos a?os a la iniciativa privada.
El pr¨¦stamo solo se reintegra en caso de que el proyecto de la empresa emergente tenga ¨¦xito y pueda comercializarse. El 15% restante lo financia la incubadora a cambio de participaciones en el proyecto. La implicaci¨®n de la Administraci¨®n ha servido sobre todos para ofrecer mayores garant¨ªas a los inversores privados a la hora de decidirse a financiar proyectos tecnol¨®gicos. El 36% de las startup est¨¢n relacionadas con las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n; un 35% se dedica a fabricar dispositivos m¨¦dicos, un 19%, a las tecnolog¨ªas renovables y agricultura, y el 10% restante, al sector farmac¨¦utico.
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