Hoy m¨¢s que nunca

La situaci¨®n de Catalu?a nos sumerge en la peor crisis pol¨ªtica e institucional de la historia de la democracia. Es precisamente durante las crisis cuando es fundamental que cada uno haga exactamente lo que tiene que hacer. Al poder legislativo le corresponde legislar; al poder ejecutivo, hacer que se cumpla la ley; al poder judicial, actuar si no se cumple; al mundo del deporte y de la cultura, explicar las consecuencias de una hipot¨¦tica secesi¨®n; y a nosotros, las organizaciones empresariales, como vertebradores del tejido productivo, explicar claramente las nefastas consecuencias que lo que est¨¢ ocurriendo puede acarrear para el resto de Espa?a, pero sobre todo para Catalu?a.

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Solo la deuda p¨²blica de la autonom¨ªa catalana, hace que un hipot¨¦tico proceso de independencia sea inviable.

Asimismo, Catalu?a aporta aproximadamente el 19% del PIB espa?ol, por lo que un proceso de independencia ser¨ªa grave para Espa?a y letal para dicha comunidad aut¨®noma, porque le supondr¨ªa renunciar al comercio interior, el cual le genera una situaci¨®n de claro super¨¢vit y supone m¨¢s del 40 % de sus ingresos. La independencia le provocar¨ªa tambi¨¦n renunciar al comercio con el resto de la UE. Estos hechos implicar¨ªan que fuera imposible mantener el Estado del bienestar y de protecci¨®n social del que disfrutan los ciudadanos catalanes, como ciudadanos espa?oles que son.

El posicionamiento de CEIM, la CEOE de Madrid, ha sido siempre claro:

1.-Catalu?a es una parte muy querida de Espa?a. El prestigio de las empresas catalanas y el reconocimiento de sus productos y servicios en el resto de Espa?a son muy altos.

2.-Una parte en ning¨²n caso puede negociar sobre el todo. Es un problema de la naturaleza jur¨ªdica del bien y de su propiedad. Nos corresponde a toda Espa?a decidir lo que afecta a una parte del pa¨ªs y no solo a esa parte.

3.- En ning¨²n caso futuras negociaciones pueden suponer que se tomen decisiones que beneficien a unos y perjudiquen a otros. As¨ª es necesario que en estos momentos, adem¨¢s de explicar las consecuencias econ¨®micas, se empiece a trabajar en un escenario positivo, tendente a mejorar la relaci¨®n de Catalu?a con el resto de Espa?a, analizando en profundidad cu¨¢les son los motivos que han provocado la creciente desafecci¨®n que existe entre una parte de ciudadanos catalanes, sin que sin embargo las medidas que se propongan puedan, en ning¨²n caso, crear diferencias ni desigualdades entre las distintas comunidades de Espa?a, dado que esto ser¨ªa injusto y adem¨¢s alentar¨ªa a otras zonas a iniciar el mismo camino. Lo que se tenga que decidir, ha de hacerse teniendo en cuenta que somos una naci¨®n y una unidad econ¨®mica totalmente interrelacionada, donde el ¨¦xito de cada una de las partes depende del ¨¦xito del conjunto.

Juan Pablo L¨¢zaro Montero de Espinosa. Presidente de CEIM (Confederaci¨®n Empresarial de Madrid-CEOE)