La imagen de Catalu?a se hunde por la huida de las empresas

¡°La secesi¨®n ser¨ªa un desastre para Espa?a. Pero tambi¨¦n da?ar¨ªa a los catalanes, raz¨®n por la que una mayor¨ªa de ellos se opone¡±, aseguraba esta semana desde su portada The Economist. Agencias de rating como S&P o Moody¡¯s ya han alertado de los peligros para la financiaci¨®n catalana si las tensiones contin¨²an. ¡°La econom¨ªa espa?ola se ha mostrado estos a?os muy resistente al ruido pol¨ªtico. Pero es imposible ignorar que los riesgos crecen r¨¢pidamente¡±, escribe en un an¨¢lisis ?ngel Talavera, economista jefe para la eurozona de Oxford Economics.

La fuga de empresas no es un fen¨®meno nuevo. En los tres primeros trimestres del a?o, 584 sociedades trasladaron su domicilio social de Catalu?a a otra comunidad aut¨®noma, mientras que solo 449 hicieron el movimiento inverso, seg¨²n los datos de Axesor. As¨ª, la p¨¦rdida neta hasta septiembre ser¨ªa de 135 empresas. En el mismo periodo, Madrid registr¨® un saldo positivo de 111 compa?¨ªas. El ¨¦xodo empresarial de Catalu?a fue mayor a¨²n en el mismo periodo del a?o pasado. Seg¨²n los datos del Registro Mercantil, en Catalu?a se crearon el a?o pasado 22.246 sociedades, un 18,6% m¨¢s que en 2015. Los expertos consultados coinciden en que el mayor golpe para la econom¨ªa catalana lo constituye la p¨¦rdida de reputaci¨®n internacional. Las empresas grandes han dado el traum¨¢tico paso de irse empujadas por inversores y fondos extranjeros, que no tienen ninguna gana de poner dinero en una zona con cada d¨ªa m¨¢s incertidumbres y menos seguridad jur¨ªdica. Eso amenaza sobre todo a sectores estrat¨¦gicos para la econom¨ªa catalana, como el biotecnol¨®gico o el digital. Estas empresas requieren de tiempos de maduraci¨®n muy largos y de grandes aportaciones de capital.

Fuentes del mercado explican que, por ello, muchas de estas empresas tratar¨¢n de blindarse de cualquier riesgo ajeno a su actividad. ¡°Ahora las inversiones est¨¢n paralizadas en Catalu?a. Las empresas que necesiten ir a nuevas rondas de financiaci¨®n, ampliaciones de capital o captar socios se ver¨¢n forzadas a irse si el contexto pol¨ªtico se mantiene. Algunas tal vez ir¨¢n a Madrid, pero el destino de otras podr¨¢n ser otros hubs tecnol¨®gicos, as¨ª que ser¨¢ complicado que vuelvan¡±, sostienen estas fuentes. La biotecnol¨®gica Oryzon, que estaba planeando su salto al Nasdaq, fue la primera en llevar su sede a Madrid alegando la necesidad de estar m¨¢s cerca de la comunidad inversora.

¡°A medio y largo plazo, un cambio de sede puede ser el anticipo de una fuga de capitales de Catalu?a, lo que implica destrucci¨®n de empleo y riqueza. La seguridad jur¨ªdica y la estabilidad institucional son muy importantes para el crecimiento. Y en un Estado no reconocido a nivel internacional, la incertidumbre es total. Adem¨¢s, una salida del euro implicar¨ªa una fuerte devaluaci¨®n de la nueva moneda, lo que implica una p¨¦rdida de riqueza¡±, asegura el catedr¨¢tico de An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad de Valencia Joaqu¨ªn Maudos.

La p¨¦rdida para las arcas p¨²blicas ser¨¢, al menos a corto plazo, limitada. El impuesto de sociedades lo recauda el Gobierno central, por lo que tanto da en qu¨¦ comunidad tengan su sede fiscal las empresas. Adem¨¢s, trasladar la sede social no implica necesariamente el cambio de domicilio fiscal, aunque estas dos direcciones suelen coincidir. Pero perder compa?¨ªas del tama?o de CaixaBank o Gas Natural s¨ª tendr¨ªa un importante efecto en una hipot¨¦tica Catalu?a independiente, que se ver¨ªa privada de los impuestos de estas compa?¨ªas.

P¨¦rdida de ingresos

Pase lo que pase, Catalu?a ya ha perdido los ingresos de las empresas huidas de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jur¨ªdicos Documentados, impuesto que el a?o pasado aport¨® a la Generalitat 1.474 millones. Es dif¨ªcil cuantificar el impacto de esta p¨¦rdida.

¡°Las empresas que han trasladado su domicilio social ir¨¢n poco a poco desplazando personal a su nueva sede, con el pago de impuestos que ello conlleva. La p¨¦rdida de ingresos se ir¨¢ notando m¨¢s a medio y largo plazo¡±, asegura Luis del Amo, secretario t¨¦cnico de Asesores Fiscales del Consejo General de Economistas.

Eurona, una empresa de telecomunicaciones que cotiza en el Mercado Alternativo Burs¨¢til (MAB), explic¨® que hac¨ªa tiempo que ven¨ªa barruntando una reestructuraci¨®n interna que la llevar¨ªa a pilotar la compa?¨ªa desde Madrid. El contexto pol¨ªtico actual se lo ha servido en bandeja. Las juntas de accionistas de las grandes empresas, que suelen hacerse en el domicilio social de cada compa?¨ªa, tambi¨¦n generan unos importantes ingresos que ahora recibir¨¢n la Comunidad Valenciana, en los casos del Sabadell y CaixaBank, y Madrid en el caso de Gas Natural. De las siete empresas del Ibex que Catalu?a ten¨ªa hace una semana, solo queda una: Grifols. Cellnex, Abertis y Colonial deciden hoy el traslado.

M¨¢s all¨¢ de la fuga de empresas, el empresariado catal¨¢n est¨¢ inquieto por las repercusiones que ello pueda tener en la marca Barcelona, que el Reputation Institute sit¨²a como la octava con mejor reputaci¨®n del mundo. Sobre todo despu¨¦s de que uno de los motores de su econom¨ªa, el turismo, tambi¨¦n haya quedado tocado por las im¨¢genes del 1 de octubre y las manifestaciones en las calles.

Otro golpe para la econom¨ªa catalana ser¨¢n las oportunidades perdidas por culpa de las convulsiones pol¨ªticas. Barcelona era una firme candidata para hacerse con la Agencia Europea del Medicamento una vez que Reino Unido haya consumado su abandono de la UE. El ¨²ltimo informe t¨¦cnico de la Comisi¨®n Europea la situaba como la mejor situada para albergarla. Pero la perspectiva de una Catalu?a fuera de Espa?a ¨Cy por tanto de la UE- reduce las opciones de hacerse con un organismo que emplea a 900 personas y tiene 340 millones de euros de presupuesto.