A los matem¨¢ticos les salen las cuentas
Los perfiles de ciencias exactas eluden mejor el paro y crecen en todo tipo de sectores y posiciones
Le llaman el Lady Gaga de las matem¨¢ticas. Y es que el franc¨¦s C¨¦dric Villani (Brive-la-Gaillarde, 1973) tiene m¨¢s aspecto de estrella del rock que de cient¨ªfico. Pero no se dejen enga?ar. Porque detr¨¢s de esa melena a lo David Guetta y de un repertorio de corbatas que parece directamente rescatado del guardarropa de Lord Byron est¨¢ uno de los matem¨¢ticos m¨¢s insignes de Francia. Ganador de la prestigiosa Medalla Fields en 2010, en la actualidad dirige el Institut Henri Poincar¨¦ de Par¨ªs. Su ¨²ltima haza?a: el pasado junio fue elegido diputado de la Asamblea Nacional, tras concurrir a las elecciones como fichaje gal¨¢ctico del presidente Emmanuel Macron para su movimiento La Rep¨²blica En Marcha.
Villani ha puesto bajo los focos un fen¨®meno que ha tenido un fuerte empuje en los ¨²ltimos a?os: el ascenso de los perfiles matem¨¢ticos hasta los m¨¢s altos puestos de la sociedad y la econom¨ªa. Y no solo en su ¨¢rea de conocimiento. Diez de los actuales 50 rectores de las universidades p¨²blicas espa?olas son matem¨¢ticos. Y tambi¨¦n salieron de esa carrera las presidentas de compa?¨ªas como IBM, Dia o Siemens.
Seg¨²n la ¨²ltima Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA), los titulados en Matem¨¢ticas son, junto a qu¨ªmicos y f¨ªsicos, los profesionales que menos desempleo sufren en Espa?a. "Hace a?os, las salidas m¨¢s habituales para un matem¨¢tico eran la docencia o la investigaci¨®n. En las dos ¨²ltimas d¨¦cadas, sin embargo, su proyecci¨®n laboral se ha diversificado. Ahora estos perfiles son muy demandados en todo tipo de sectores. Se pueden encontrar matem¨¢ticos en empresas aeron¨¢uticas, de comunicaciones, inform¨¢ticas, bancos, consultoras...", se?ala Antonio D¨ªaz-Cano, decano de la Facultad de Ciencias Matem¨¢ticas de la Universidad Complutense de Madrid.
La crisis de los noventa
N¨²meros al poder
Rosa Garc¨ªa (Madrid, 1965), presidenta de Siemens Espa?a, iba para profesora de secundaria. Pero en los meses que mediaron desde que se licenci¨® en Matem¨¢ticas hasta la fecha de arranque de los cursos de acceso a la docencia la tecnolog¨ªa se cruz¨® en su camino. "Entr¨¦ a trabajar en una empresa inform¨¢tica y all¨ª me di cuenta de que la tecnolog¨ªa mejoraba la vida de las personas, de que serv¨ªa para solucionar problemas. Me enamor¨®".
Fue su padre quien le transmiti¨® la pasi¨®n por las matem¨¢ticas. "Siempre me las plante¨® como algo divertido. Recuerdo que jug¨¢bamos a hacer magia con los n¨²meros haciendo multiplicaciones. ?l me ense?¨® a apreciar su belleza".
De los a?os de Facultad se queda con un aprendizaje: el control de los nervios. "Llegabas a un examen y el primer pensamiento era que ten¨ªas el cero garantizado. Y as¨ª era si perd¨ªas la calma. As¨ª que te repon¨ªas, volv¨ªas a leer el enunciado y empezabas a contestar las preguntas".
Sus colaboradores le dicen que se nota que es matem¨¢tica. "Porque soy muy pr¨¢ctica y s¨¦ analizar muy bien tanto los problemas como los datos", comenta. Y tambi¨¦n, remata, por otro rasgo muy del gremio. "Me gusta llegar a una reuni¨®n con los deberes hechos. Si me van a presentar una nueva tecnolog¨ªa o proyecto, yo ya me he preocupado de investigar por mi cuenta antes. Para que no me lo tengan que explicar desde cero".
Y eso a pesar de que en los a?os noventa la carrera entr¨® en una profunda crisis. "Se produjo una importante fuga de estudiantes hacia las ingenier¨ªas, hasta el punto de que varias Facultades de Matem¨¢ticas estuvieron a punto de cerrar", recuerda Francisco Marcell¨¢n, presidente de la Real Sociedad Matem¨¢tica Espa?ola. Los telecos se convierten en los chicos de oro de las ciencias. Pero con la crisis econ¨®mica de 2008 vuelve a cambiar la tendencia. "Se retoma el inter¨¦s por la disciplina. Surgen una serie de titulaciones dobles como Matem¨¢ticas/F¨ªsica con altas notas de corte y pocas plazas, para alumnos muy seleccionados. Carreras en las que el estudiante adquiere una perspectiva biun¨ªvoca que le abre los ojos sobre el hecho de que las matem¨¢ticas pueden servirle para muchas otras cosas", a?ade.
La actual explosi¨®n tecnol¨®gica ha contribuido a este resurgir. Big data, blockchain, machine learning... "El nivel de datos a los que tenemos acceso se ha incrementado exponencialmente. La digitalizaci¨®n, la automatizaci¨®n, las redes sociales o la aparici¨®n de los tel¨¦fonos inteligentes hacen que las empresas necesiten perfiles capaces de extraer la informaci¨®n ¨²til que subyace a todo ese volumen de datos", argumenta Rub¨¦n Berrocal, jefe de equipo de ?Randstad Technologies.
Pero los herederos de Pit¨¢goras no lucen solo en la parcela t¨¦cnica. Poco a poco se han ido sacudiendo la imagen de friki pegado a una calculadora, abri¨¦ndose paso hasta los puestos de direcci¨®n. "De la carrera de Matem¨¢ticas se sale con la cabeza muy bien amueblada. Son personas que saben organizar su propio trabajo y tambi¨¦n el de los dem¨¢s", resume Francisco Marcell¨¢n.
Elisa Mart¨ªn Garijo es directora de tecnolog¨ªa e innovaci¨®n de IBM Espa?a, Portugal, Grecia e Israel. Y matem¨¢tica. Para esta directiva, la carrera equipa al estudiante con tres competencias que le habilitan para desempe?ar pr¨¢cticamente cualquier actividad: "Capacidad de abstracci¨®n, orientaci¨®n a la resoluci¨®n de problemas y mucha paciencia. El objetivo del matem¨¢tico es resolver problemas. Cuando no lo consigue de una manera, sabe que debe intentarlo de otra".
D¨ªaz-Cano coincide en que esa capacidad para aportar soluciones junto a su versatilidad son dos de los rasgos m¨¢s apreciados por el mercado laboral en estos perfiles. "Es lo que les permite adaptarse a cualquier situaci¨®n, evolucionar y no quedarse estancado ante las dificultades. Adem¨¢s, los matem¨¢ticos aportan una mente l¨®gica y una gran capacidad de an¨¢lisis a la organizaci¨®n, lo que les ayuda a minimizar los posibles errores en cualquier proceso".
Aunque tambi¨¦n hay puntos de mejora. El amante de las ciencias exactas se suele sentir muy c¨®modo en el trabajo individual. Pero en las organizaciones actuales no hay sitio para las almas solitarias. Elisa Mart¨ªn Garijo cree que la comunicaci¨®n y el trabajo en equipo son los dos grandes d¨¦ficits de los reci¨¦n graduados. "Afortunadamente, cuando llegan al mundo de la empresa, esto se resuelve de un modo natural. Porque las matem¨¢ticas no tienen sentido por s¨ª solas; necesitan ser aplicadas en otros campos. Y esto obliga al matem¨¢tico a colaborar con profesionales de otras disciplinas".
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