Marruecos flexibiliza el tipo de cambio de su moneda
El Ministerio de Econom¨ªa inicia el camino hacia la liberalizaci¨®n del dirham, tal como aconseja el FMI
El Ministerio de Econom¨ªa de Marruecos anunci¨® el viernes por la noche que desde este lunes el valor de la moneda nacional fluctuar¨¢ en una banda del 5%. La noticia cogi¨® a todo el mundo por sorpresa, con lo cual se evitaron movimientos especulativos. El valor del d¨ªrham est¨¢ vinculado en un 60% al euro y en un 40% al d¨®lar; solo se mov¨ªa hasta ahora en una franja del 0,3% hacia arriba o abajo. A partir de esta semana, la moneda podr¨¢ aumentar su cotizaci¨®n (poco probable, en principio) en un 2,5% o depreciarse un m¨¢ximo del 2,5%. Si el mercado apuesta por una depreciaci¨®n del d¨ªrham las autoridades monetarias tendr¨¢n que echar mano de sus reservas de divisas para evitar la devaluaci¨®n y el consiguiente aumento en la carest¨ªa de vida. El objetivo es lograr la liberalizaci¨®n completa de la moneda dentro de 15 a?os, tal como aconseja el Fondo Monetario Internacional.
El pa¨ªs llevaba ocho a?os prepar¨¢ndose para este momento. De hecho, el anuncio estaba previsto para el pasado julio. Pero desde mayo se estaban registrando en el mercado operaciones que preve¨ªan la depreciaci¨®n. El pa¨ªs perdi¨® en pocos meses una cantidad inusual de reservas de divisas y se vio impelido a suspender la flexibilizaci¨®n. El presidente del banco central Bank Al-Maghrib, Abdelatif Juari, denunci¨® que varios bancos hab¨ªan ¡°especulado¡± contra el d¨ªrham y hab¨ªan traicionado los intereses de la naci¨®n. La medida qued¨® postergada sin que se fijara ninguna fecha y desde entonces no hab¨ªa habido informaci¨®n oficial sobre el asunto.
El anuncio se produce ahora de forma sorpresiva, cuando diversos observadores internacionales hab¨ªan descartado que el Gobierno se atreviera a afrontarlo. Los analistas ten¨ªan en cuenta que en T¨²nez se vienen registrando desde el pasado 9 de enero protestas pac¨ªficas y violentas en varias ciudades del pa¨ªs contra los recortes del Gobierno a las subvenciones y las subidas de impuestos recogidos en los presupuestos de 2018.
La situaci¨®n social en Marruecos no es la misma que en T¨²nez, aunque tambi¨¦n ha habido protestas en el ¨²ltimo a?o. En el Rif decenas de miles de personas salieron a la calle en el ¨²ltimo a?o para reclamar mejoras sociales y econ¨®micas. Ahora, tras m¨¢s de 300 personas encarceladas, la revuelta parece controlada pero no extinguida. En la ciudad tur¨ªstica de Zagora, la sequ¨ªa y la mala gesti¨®n h¨ªdrica provocaron protestas en septiembre y a¨²n hay ocho personas encarceladas. Las ¨²ltimas protestas se registraron en diciembre en el municipio deprimido de Yerada, tras la muerte de dos hermanos mineros que fallecieron en una mina abandonada de carb¨®n. El accidente puso de relieve el tr¨¢fico clandestino de carb¨®n en yacimientos abandonados. Tras su muerte, miles de personas se manifestaron contra la pobreza de la zona y el coste de las facturas de agua y electricidad.
Un economista europeo que sigue muy de cerca el mercado marroqu¨ª indic¨® a este diario: ¡°El objetivo de esta medida es equilibrar el d¨¦ficit por cuenta corriente. Marruecos necesita financiaci¨®n por valor del 4% de su PIB. Mediante la flexibilizaci¨®n del tipo de cambio el d¨ªrham se podr¨ªa abaratar y eso puede incentivar el aumento de las exportaciones y desalentar las importaciones, porque las podr¨ªa encarecer. Pero hay que tener en cuenta que Marruecos tiene una dependencia energ¨¦tica del 94%. El petr¨®leo y el gas les podr¨ªan salir m¨¢s caro si la moneda se depreciara. No obstante, los coches que exportan y el fosfato saldr¨¢n m¨¢s barato a los inversores extranjeros, con lo cual es previsible que vendan m¨¢s autos y fosfato. Habr¨¢ que ver si con las exportaciones se compensa la mayor carest¨ªa de las importaciones¡±.
El ministro de Econom¨ªa y Finanzas, Mohammed Boussaid, se?al¨® el viernes en un comunicado que el objetivo de la flexibilizaci¨®n es reforzar la econom¨ªa frente a ¡°choques ex¨®genos¡±, mantener su competitividad y aumentar su crecimiento.
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