?Contrato ¨²nico? ?Mochila austr¨ªaca? Recetas contra la precariedad
Partidos, agentes sociales y expertos proponen medidas contra uno de los principales males del mercado laboral espa?ol
Espa?a lleva cuatro a?os de recuperaci¨®n. Crea m¨¢s empleo que ning¨²n otro pa¨ªs de Europa ¡ªantes lo destruy¨®¡ª pero ese dato est¨¢ oscurecido por la escasa calidad de esos puestos de trabajo. La temporalidad ha llegado al 27,5%. Entre quienes trabajan a tiempo parcial, domina el subempleo: el 60% quisieran trabajar m¨¢s horas. Y todo esto incide sobre los salarios, que no se suman a la recuperaci¨®n.
La precariedad, sobre todo en su vertiente temporal, no es algo nuevo del mercado laboral. Lleg¨® a Espa?a a mitad de los ochenta y tras una cincuentena de reformas laborales sigue ah¨ª enquistada. El Gobierno, los sindicatos y los empresarios han abierto una mesa de negociaci¨®n para abordar el problema y buscarle soluciones, pero sus avances y sus encuentros, por el momento, son escasos. En esa mesa se present¨® la propuesta oficial, que emana del pacto de investidura de Ciudadanos y el PP. Los sindicatos llevaron la suya. Hay otras iniciativas de partidos pol¨ªticos, como la presentada por el PSOE, o las de economistas y profesores de Derecho. Estas son algunas de ellas:
Contrato ?nico
Su formulaci¨®n inicial, nacida bajo el paraguas de Fedea, reduc¨ªa a uno todos los tipos contratos. Despu¨¦s se abri¨® otros tipos para los interinos (sustituciones forzosas) o los relevos por jubilaci¨®n. Ser¨ªa indefinido desde el primer d¨ªa. La indemnizaci¨®n por despido al comienzo ser¨ªa m¨¢s baja que en un indefinido actual, pero a?o a a?o ir¨ªa creciendo hasta llegar a un tope, por ejemplo, de 12 d¨ªas por a?o trabajado a 20 d¨ªas en los despidos procedentes y una escala paralela hasta los 33 d¨ªas para los improcedentes. Solo se aplicar¨ªa en las nuevas contrataciones. Uno de sus defensores, Jos¨¦ Ignacio Conde-Ruiz, profesor de econom¨ªa, explica que el dise?o debe hacerse de forma que el coste agregado para las empresas sea el mismo que ahora.
Reducci¨®n de contratos
Ciudadanos y PP pactaron reducir el men¨² de contratos a tres: uno indefinido como el actual, otro de formaci¨®n y un tercero temporal que el primer a?o tuviera una indemnizaci¨®n de 12 d¨ªas el primer a?o; de 16, el segundo; y de 20, el tercero. La duraci¨®n m¨¢xima de este ¨²ltimo ser¨ªa de dos a?os y podr¨ªa aumentarse a tres si se pacta en los convenios. BBVA Research ha propuesto una reducci¨®n similar, aunque con un matiz: al principio la indemnizaci¨®n para los temporales ser¨ªa m¨¢s alta que para los indefinidos. UGT y CC OO piden acabar con el contrato indefinido de apoyo a emprendedores, con despido gratuito durante el primer a?o, ¡°por ser un contrato temporal encubierto¡±.
Castigo al abuso
El uso abusivo de contratos eventuales es, probablemente, el mayor fraude de ley en Espa?a. Para castigarlo, el Gobierno pretende que las empresas que abusen de la temporalidad paguen m¨¢s cotizaci¨®n. Tambi¨¦n lo defienden economistas partidarios del contrato ¨²nico como Marcel Jansen o Florentino Felgueroso. La Fundaci¨®n para Investigaci¨®n sobre el Derecho y la Empresa (FIDE) , propone ¡°indemnizaciones [a los trabajadores] claramente disuasorias¡± con la contrataci¨®n irregular temporal. Adem¨¢s, el catedr¨¢tico de Derecho Laboral Jes¨²s Cruz a?ade otros dos castigos: una sanci¨®n administrativa y el pago del coste de la prestaci¨®n por desempleo o una cotizaci¨®n retroactiva. La iniciativa requiere de una campa?a de la Inspecci¨®n de Trabajo llamativa y medi¨¢tica en sus primeros compases que, como sucedi¨® con los accidentes de tr¨¢fico, prevenga a los empresarios. En la misma direcci¨®n apuntan varias propuestas del plan de choque contra la precariedad del PSOE. La propuesta de Cruz se compensa con la reducci¨®n de costes para aquella temporalidad justificada.
Reforzar la causa
Cuando alguien contrata de forma temporal, esto debe estar justificado. Para los sindicatos que una actividad sea estacional, no debe justificar un contrato temporal y se?alan que para eso existe el llamado contrato fijo discontinuo. Tambi¨¦n piden UGT y CC OO que una empresa que presta un servicio subcontratado no pueda esgrimir esto como causa de temporalidad. ¡°La actividad del trabajador es estable independientemente de que desarrolle su actividad contratante en una empresa o en otra¡±, se?alan. El PSOE reclama que, en estos casos, se garantice que se cobre lo mismo si el trabajo es el mismo en la firma matriz o en la subcontratada.
Mochila austr¨ªaca
Como el contrato ¨²nico, es una propuesta que lleva tiempo en el debate p¨²blico y resurge. En este caso incluso hubo un compromiso de desarrollarla en la reforma laboral de 2010, la que hizo el PSOE. Finalmente no se hizo. Consiste en que se paga una cotizaci¨®n que se va acumulando en una especie de hucha a la que el trabajador tendr¨ªa acceso si es despedido. Solo Austria ha puesto en marcha este mecanismo, defendido por Conde-Ruiz o BBVA Research. La medida puede ir acompa?ada de una reducci¨®n de la indemnizaci¨®n en el momento del despido, ya que est¨¢ compensado por la hucha. Tambi¨¦n busca incentivar la movilidad laboral entre empresas, ahora lastrado por la p¨¦rdida de la antig¨¹edad y la potencial indemnizaci¨®n.
Menos eventuales en la Administraci¨®n
La temporalidad es casi tan alta en el sector p¨²blico como en el privado. El PSOE y los sindicatos defienden que acabe con la temporalidad injustificada en la administraci¨®n. M¨¢s peso a ETT. El abogado laboralista, Fernando Moreno, de Analistas de Relaciones Industriales, defiende que se estudie el papel de las ETT para darles m¨¢s papel en los contratos de muy corta duraci¨®n. Este coautor del documento de FIDE lo defiende, entre otros motivos, porque para la Inspecci¨®n ¡°ser¨ªa m¨¢s sencillo controlar a un n¨²mero determinado de empresas que los m¨¢s de 500.000 contratos de menos de una semana que se firman cada mes¡±. Y, adem¨¢s, a?ade que las exigencias y la regulaci¨®n que hay sobre las empresas de trabajo temporal (respeto de convenios de referencia, exigencia de formaci¨®n) garantizan un menor abuso.
Aumentar el papel de las ETT
El abogado laboralista, Fernando Moreno, de Analistas de Relaciones Industriales, defiende que se estudie el papel de las ETT para darles m¨¢s papel en los contratos de muy corta duraci¨®n. Este coautor del documento de FIDE lo defiende, entre otros motivos, porque para la Inspecci¨®n ¡°ser¨ªa m¨¢s sencillo controlar a un n¨²mero determinado de empresas que los m¨¢s de 500.000 contratos de menos de una semana que se firman cada mes¡±. Y, adem¨¢s, a?ade que las exigencias y la regulaci¨®n que hay sobre las empresas de trabajo temporal (respeto de convenios de referencia, exigencia de formaci¨®n) garantizan un menor abuso.
Flexibilidad interna
La opci¨®n de que cuando lleguen mal dadas los ajustes se hagan sobre las condiciones laborales y no solo sobre reducciones de plantilla, principalmente por la finalizaci¨®n de los contratos temporales, es lo que viene a defender la patronal. Su director de relaciones laborales, Jordi Garc¨ªa Vi?a, defiende para eso m¨¢s ¡°flexibilidad en la contrataci¨®n indefinida, sin que eso tenga que suponer rebajas en las indemnizaciones por despido¡±. Con esto lo que viene a decir Garc¨ªa Vi?a es que el empresario tenga m¨¢s facilidad a la hora de adaptarse a la demanda con ajustes horarios o salariales.
Ajustes en la regulaci¨®n del empleo a tiempo parcial
En la reforma laboral de 2012 y a finales de 2013, se cambi¨® la regulaci¨®n del empleo a tiempo parcial dando mucho m¨¢s margen de decisi¨®n al empresario. El PSOE y los sindicatos piden que se reequilibre la situaci¨®n. Los primeros piden que se acabe con la posibilidad de que se pueda hacer horas extraordinarias en estos contratos. Los sindicatos, por su parte, denuncian que este contrato se utiliza como ¡°un instrumento potente de la flexibilidad interna desregularizada, que afecta en gran medida a las mujeres, y est¨¢ provocando una enorme precarizaci¨®n laboral¡±. Por ello, piden cambiar la regulaci¨®n de estos contratos en su integridad.
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