Las empresas turcas se lanzan a la conquista de Europa
En los ¨²ltimos cinco a?os, el capital turco se ha lanzado a comprar participaciones en el exterior para compensar la devaluaci¨®n de la lira y aprovechar los descuentos en empresas europeas en crisis
Turqu¨ªa puede invadir Europa en tres d¨ªas¡±, era la provocativa portada de un diario progubernamental turco hace unos meses. Pero m¨¢s all¨¢ de las estridencias nacionalistas t¨ªpicas de la prensa local ¡ªen su mayor¨ªa de consumo interno¡ª, se est¨¢ produciendo una llegada m¨¢s callada y silenciosa de los turcos a Europa: las inversiones de empresas en el Viejo Continente no han parado de crecer en los ¨²ltimos cinco a?os.
La inversi¨®n exterior de las empresas turcas ha pasado de estar por debajo de los 2.000 millones de d¨®lares anuales durante la pasada d¨¦cada a situarse en un nivel no inferior a 6.000 millones en los ¨²ltimos cuatro a?os (con un pico de 9.000 millones en 2014, cuando se ejecutaron varias compras de calado). Y la mayor¨ªa de ese dinero va a parar a la Uni¨®n Europea, que, pese a los intentos de diversificaci¨®n del Gobierno turco, sigue siendo con creces el principal socio comercial de Turqu¨ªa y refugio de las empresas del pa¨ªs euroasi¨¢tico. De acuerdo con el Consejo de Relaciones Econ¨®micas Exteriores de Turqu¨ªa (DEIK), la inversi¨®n extranjera directa (FDI) turca en Europa alcanz¨® en 2015 los 4.280 millones de d¨®lares, un tercio de la procedente de China, pero un volumen considerable para el tama?o y poder¨ªo econ¨®mico del pa¨ªs.
Destacan el caso de Beko y su matriz Ar?elik, una de las primeras empresas en abrir la veda y que se ha convertido en la tercera marca de electrodom¨¦sticos m¨¢s consumida de Europa Occidental ¡ªla segunda en Reino Unido¡ª gracias a su apuesta por la gama baja y media y a la agresiva estrategia de adquisici¨®n de antiguas y consolidadas empresas europeas: las brit¨¢nicas Leisure y Flavel, la rumana Arctic, la austriaca Elektra o las alemanas Blomberg y Grundig. O la compra de la licencia de operaciones en Europa de la japonesa Sharp por parte de Vestel, otra empresa turca de electrodom¨¦sticos que adem¨¢s se ha aliado con Toshiba para expandir su mercado europeo. O la venta de la galletera brit¨¢nica United Biscuits a Yildiz Holding por m¨¢s de 2.500 millones de euros.
Pero m¨¢s all¨¢ de las grandes operaciones, hay un goteo constante de peque?as y medianas inversiones, inferiores a 50 millones de euros. En el ¨²ltimo lustro se ha registrado una media anual de 45 operaciones de fusi¨®n y adquisici¨®n por parte de empresas turcas en Europa ¡ªhace una d¨¦cada no sol¨ªan llegar a la decena¡ª y de entre 50 y 60 operaciones de nueva inversi¨®n, frente a la mitad que hab¨ªa hace una d¨¦cada. ¡°En a?os recientes, algunos de estos grupos parecen haber adoptado el patr¨®n de hacer adquisiciones en el exterior regularmente¡±, explica la divisi¨®n turca de la consultora Deloitte en uno de sus informes anuales.
Pero ?cu¨¢les son las razones de que, peri¨®dicamente, las empresas turcas vayan a hacer la compra en el supermercado europeo? Uno de los principales motivos de la expansi¨®n es equilibrar el balance de las compa?¨ªas matrices en Turqu¨ªa. Desde la crisis de las divisas de los pa¨ªses emergentes en 2013-2014, la lira turca no ha dejado de caer y ha perdido en torno al 50% de su valor respecto al euro y d¨®lar. ¡°Estas empresas salen precisamente para compensar los riesgos de devaluaci¨®n¡±, indica una fuente financiera: ¡°Del mismo modo que las empresas extranjeras que invierten en Turqu¨ªa incluyen en sus previsiones anuales un 10% de p¨¦rdidas derivadas de la devaluaci¨®n de la lira, las firmas turcas que tienen inversiones en Europa pueden a?adir ese 10% pues saben que el euro se apreciar¨¢ respecto a la divisa en la que calculan¡±.
Otro factor de la internacionalizaci¨®n de la empresa turca, especialmente hacia Europa Oriental, Rusia, Asia y, cada vez m¨¢s, Latinoam¨¦rica, es asegurarse el control de materias primas y productos semielaborados necesarios para su funcionamiento. La mayor parte de la industria turca es de ensamblaje y poco valor a?adido, as¨ª que la devaluaci¨®n de la lira encarece la adquisici¨®n de materiales, reduciendo significativamente el margen de beneficios. Un ejemplo es Standard Profil, empresa de componentes de automoci¨®n galardonada el pasado diciembre en los Premios de la C¨¢mara de Comercio Hispano-Turca, que ya suministra el 20% de los selladores de autom¨®viles en Europa tras expandir su producci¨®n a Bulgaria, Marruecos, China, Sud¨¢frica, M¨¦xico y Espa?a, donde posee cuatro plantas.
¡°Un creciente n¨²mero de compa?¨ªas turcas buscan oportunidades de inversi¨®n transfronteriza para acelerar su crecimiento a trav¨¦s de la diversificaci¨®n de mercado, reducci¨®n de costes y adquisici¨®n de marca¡±, recalcaba Deloitte en su informe de 2013, punto de inflexi¨®n de la externalizaci¨®n hacia Europa. En lo que va de siglo, la econom¨ªa turca s¨®lo se ha asomado a la recesi¨®n en 2001 y 2009, y aun as¨ª ha sumado un crecimiento medio superior al 5,5% anual. En paralelo a este crecimiento las empresas turcas tambi¨¦n se han hecho mayores de edad y han comenzado a buscar su sitio en Europa y en el mundo.
La crisis en Europa
Precisamente, la depresi¨®n en la eurozona les ha facilitado el trabajo, como se?ala Deloitte, pues dej¨® ¡°activos interesantes en muchos pa¨ªses desarrollados a precios reducidos respecto a lo que costaban antes de la crisis econ¨®mica¡±. As¨ª, a?ade la consultora, ¡°mercados bajo fuerte presi¨®n financiera como Espa?a o Grecia han atra¨ªdo notable inter¨¦s¡±. Buena muestra es el grupo Dogus, con intereses en diversos sectores (es socio de BBVA en el banco Garanti), y que, desde el inicio de la crisis econ¨®mica, ha aprovechado para expandir sus inversiones tur¨ªsticas en la Europa meridional: ha comprado puertos deportivos, restaurantes y complejos hoteleros en Grecia, Italia, Croacia, Montenegro y Espa?a, como Marina Barcelona 92 (dedicada a la reparaci¨®n de yates de superlujo), el hotel Villa Magna y varios restaurantes madrile?os. O Global Liman, empresa turca que se ha hecho con concesiones de puertos de pasajeros y cruceros en Barcelona (Espa?a), Venecia, Ravenna, Cagliari y Catania (Italia), La Valeta (Malta), Dubrovnik (Croacia) y Bar (Montenegro).
No en vano, las pol¨ªticas desreguladoras y de facilidades a la inversi¨®n empresarial llevadas a cabo por el Gobierno de Mariano Rajoy son citadas por DEIK en su informe de 2017 como algunas de las ventajas que ofrece Espa?a al inversor turco: ¡°Las reducciones fiscales a las compa?¨ªas as¨ª como la ley laboral modificada a favor del empresario potenciaron las inversiones en 2016. Las inversiones en el sector inmobiliario, las infraestructuras y el peque?o comercio se llevaron la palma. La cercan¨ªa cultural a Latinoam¨¦rica, as¨ª como a la Uni¨®n Europea; la existencia de numerosas multinacionales espa?olas, el boom de los ingresos tur¨ªsticos, una red de comunicaciones desarrollada y el mercado de las energ¨ªas renovables ponen a este pa¨ªs de relieve para la inversi¨®n¡±.
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