El BCE presiona para reestructurar la deuda griega

Se fue el halc¨®n Wolfgang Sch?uble, ministro alem¨¢n y superministro del euro in p¨¦ctore durante una d¨¦cada. Su sucesor es Olaf Scholz, un socialdem¨®crata. Pero la vida sigue igual en Europa: Scholz se estren¨® ayer en el Eurogrupo con una diatriba en contra de un seguro de desempleo com¨²n ¡ª¡°no somos EE UU, no se dan las condiciones para crear un esquema de seguro de paro¡±, dijo en la reuni¨®n, seg¨²n fuentes europeas¡ª y con la misma falta de flexibilidad que mostr¨® Sch?uble durante a?os respecto a Grecia. La econom¨ªa griega va sacando la cabeza de la crisis. El tercer rescate expira en agosto y Atenas aspira a una salida limpia. Para ello necesita una reestructuraci¨®n ambiciosa de la deuda, que se sit¨²a en un estratosf¨¦rico 180% del PIB. Berl¨ªn se resiste, pero tanto el BCE como las instituciones comunitarias presionaron ayer en Sof¨ªa para dar una se?al a los mercados con medidas ambiciosas de alivio de la deuda helena.

El jefe del BCE, Mario Draghi, fue tajante en el encuentro de ministros. Grecia sigue siendo un objeto volante no identificado para los mercados: su calificaci¨®n est¨¢ en niveles de bono basura, con un paro que supera el 20%, los activos dudosos m¨¢s altos de la UE y una deuda sencillamente impagable. Draghi asegur¨® que la econom¨ªa griega necesita que los socios ¡°aseguren la estabilidad ante los mercados financieros¡±, con un colch¨®n de liquidez lo suficientemente c¨®modo para no tener sorpresas una vez Atenas abandone el rescate, y con medidas de alivio de la deuda ¡°fuertes¡±, ¡°incondicionales¡±, siempre con la mirada puesta en ¡°dar garant¨ªas a los mercados¡±, seg¨²n fuentes presentes en la reuni¨®n.

El consejero del Eurobanco Benoit Coeur¨¦ dijo en p¨²blico m¨¢s o menos lo mismo: apost¨® por medidas ¡°autom¨¢ticas¡± y ¡°no condicionales¡± de reestructuraci¨®n, ¡°medidas cre¨ªbles¡± para ganarse a los mercados, afirm¨® en un mensaje teledirigido a Berl¨ªn y los pa¨ªses del Norte.

La tensi¨®n vuelve a subir por el caso griego. Alemania, Austria, Holanda y Finlandia quieren mantener mecanismos de control sobre Grecia para evitar que revierta las reformas. Klaus Regling, jefe del Mede, expres¨® abiertamente su inquietud ante el Eurogrupo por la posibilidad de que Atenas revise las reformas de estos ¨²ltimos a?os. El ministro griego, Euclides Tsakalotos, apunt¨® que su Gobierno no tiene intenci¨®n de dar marcha atr¨¢s, aunque s¨ª dijo que podr¨ªa incorporar ¡°cierta flexibilidad¡± en algunos cap¨ªtulos.

Tsakalotos present¨® su estrategia de crecimiento: se trata de seguir con las reformas y acelerar las privatizaciones, pero tambi¨¦n de restaurar la negociaci¨®n colectiva y aprobar una subida gradual del salario m¨ªnimo; de insuflar algo de aire a una econom¨ªa que lleva a?os sufriendo.

El Eurogrupo de Sof¨ªa, en fin, desenterr¨® viejos problemas entre los socios. Las posiciones siguen tan distantes con Grecia como en los debates sobre el futuro de la eurozona: ¡°Nos estamos quedando sin tiempo¡± para aprobar las reformas del euro prometidas para junio, explic¨® el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Valdis Dombrovskis. Sobre la mesa est¨¢ el respaldo fiscal para la uni¨®n bancaria, y un mecanismo de estabilizaci¨®n fiscal anticrisis para cuando vuelvan las vacas flacas. Bruselas y Par¨ªs presionan para que los l¨ªderes aprueben ese paquete. Alemania, como en el debate sobre Grecia, responde a todo con su ya tradicional nein.