Espa?a se encamina hacia la mayor recaudaci¨®n fiscal de su historia
Los ingresos tributarios crecen hasta agosto al mayor ritmo desde el boom inmobiliario. La tendencia apunta a una cosecha fiscal superior a la de 2007, la m¨¢s copiosa hasta ahora
La recaudaci¨®n de impuestos crece en Espa?a al mayor ritmo desde la burbuja inmobiliaria, un 7,8%. La recuperaci¨®n econ¨®mica, que suma cinco a?os, impulsa los ingresos p¨²blicos al mayor nivel de su historia. Las Administraciones P¨²blicas manejan ya m¨¢s dinero que nunca, seg¨²n las estad¨ªsticas de la Agencia Tributaria. Ni siquiera en el punto ¨¢lgido del boom inmobiliario se cosecharon tantos recursos por impuestos. La aportaci¨®n del IRPF y del IVA est¨¢ en m¨¢ximos. Y eso que a¨²n hay casi 1,4 millones menos de trabajadores que antes de la crisis y que las empresas pagan mucho menos.
Espa?a est¨¢ a un paso de cerrar el a?o con una recaudaci¨®n r¨¦cord. La cifra final no quedar¨¢ muy lejos de los 210.000 millones de euros que el anterior Ejecutivo dibuj¨® en los Presupuestos para este a?o, seg¨²n el term¨®metro de la Agencia Tributaria hasta agosto. Superar¨¢ as¨ª la marca de los 200.676 millones registrada en 2007, en plena burbuja inmobiliaria. En aquella ¨¦poca, la Gran Recesi¨®n solo era un fantasma y el pa¨ªs viv¨ªa con despreocupaci¨®n, ajeno a la fenomenal crisis que estaba a punto de estallar, un crac financiero que dej¨® las paredes de las arcas p¨²blicas desconchadas y un pa¨ªs hecho jirones.
Una d¨¦cada despu¨¦s, los caudales p¨²blicos vuelven a brillar como nunca. Existen dos hechos significativos que explican la crecida en los ingresos p¨²blicos, junto a los cinco a?os de recuperaci¨®n econ¨®mica, tres de los cuales Espa?a ha crecido por encima del 3%. Por un lado, est¨¢ la buena cosecha del IRPF, el primer impuesto en importancia en Espa?a. Este tributo encadena tres a?os en m¨¢ximos, a pesar de que en Espa?a a¨²n faltan casi 1,4 millones de trabajadores respecto a la ¨¦poca del boom inmobiliario. ?C¨®mo es posible recaudar m¨¢s con menos trabajadores? La explicaci¨®n a esta anomal¨ªa reside en que, a pesar de que el conjunto de las rentas salariales a¨²n est¨¢ algo por debajo de los a?os de vino y rosas, las rentas por pensiones son un 51% mayores que en 2007. Es decir, en Espa?a hay casi un mill¨®n m¨¢s de jubilados que hace una d¨¦cada y cobran, de media, m¨¢s que entonces. Los jubilados que se incorporan ahora al sistema perciben una pensi¨®n m¨¢s generosa y tributan m¨¢s.
M¨¢s pensiones
Para ilustrar este fen¨®meno basta un dato: las rentas de pensiones ascend¨ªan en 2007 a 88.803 millones de euros; una d¨¦cada despu¨¦s alcanzaron los 134.086 millones, seg¨²n la estad¨ªstica oficial de Hacienda. Y estas prestaciones por jubilaci¨®n pagan impuestos.
Adem¨¢s, aunque hay menos trabajadores que antes de la recesi¨®n, el sistema de protecci¨®n por desempleo sirve de colch¨®n para mantener las rentas y arrastra a la recaudaci¨®n del IRPF. Y, por ¨²ltimo, los sueldos est¨¢n empezando a repuntar. ¡°La causa principal del crecimiento de los ingresos en 2018 contin¨²a siendo el IRPF, gracias a las retenciones del trabajo. Al crecimiento de estos ingresos debido al aumento del empleo, la recuperaci¨®n del salario medio y del tipo medio efectivo que se observa desde comienzos de a?o, se a?adi¨® desde el mes pasado el buen resultado de la declaraci¨®n anual y desde agosto el impulso derivado del aumento de salarios p¨²blicos y pensiones tras la aprobaci¨®n de los Presupuestos de este a?o¡±, se?ala el ¨²ltimo informe mensual de la Agencia Tributaria.
La otra causa que explica el gran momento que vive la recaudaci¨®n est¨¢ en la aportaci¨®n del IVA. Las subidas de tipos aprobadas en 2010 por el Gobierno de Zapatero y posteriormente en 2012 por el Ejecutivo de Rajoy elevaron el tipo general al 21% y dispararon los ingresos del principal impuesto indirecto a pesar de la ca¨ªda del consumo, que a¨²n no ha recuperado los niveles precrisis. La aportaci¨®n de este tributo ascendi¨® el a?o pasado a 63.647 millones, casi un 15% m¨¢s que en 2007, el a?o en el que hasta ahora m¨¢s dinero lograron las Administraciones p¨²blicas por impuestos.
Subidas a funcionarios
Durante los ocho primeros meses del a?o, este tributo sobre el consumo registra un crecimiento del 11,5% con respecto al mismo periodo del a?o precedente. Esta evoluci¨®n, no obstante, est¨¢ afectada por la entrada en funcionamiento del Sistema Inmediato de Informaci¨®n (SII), un instrumento inform¨¢tico que obliga a las grandes y medianas empresas a presentar sus declaraciones de IVA ante Hacienda de forma inmediata y que desplaz¨® contablemente ingresos del a?o pasado a este. Aun as¨ª, la evoluci¨®n del impuesto est¨¢ siendo muy positiva.
Hasta ahora, la fertilidad de estos dos impuestos no era suficiente para paliar la merma que la crisis provoc¨® en el impuesto de sociedades. La figura que grava los beneficios empresariales es la ¨²nica que a¨²n no ha recuperado los niveles precrisis. Recauda la mitad que entonces. Existen varios motivos que lo explican: las empresas guardan en sus balances su hoja de secuelas de la crisis, que usan para reducir su factura fiscal, los denominados cr¨¦ditos fiscales. Adem¨¢s, hace 10 a?os inmobiliarias y bancos aportaban mucho m¨¢s al sistema, porque registraban beneficios r¨¦cord. Hoy, las constructoras a¨²n est¨¢n curando las heridas de sus excesos y los bancos tienen dificultades para lograr rentabilidades con los tipos de inter¨¦s por los suelos.
Por eso, la propuesta fiscal del PSOE y Unidos Podemos pasa por elevar la recaudaci¨®n de este impuesto mediante una subida a las grandes empresas. Con la bater¨ªa fiscal del acuerdo de los partidos de izquierda y los frutos de otro a?o de crecimiento econ¨®mico, la recaudaci¨®n tributaria se puede disparar m¨¢s all¨¢ de los 225.000 millones en 2019.
?Es suficiente para costear el Estado de bienestar?
Aunque el volumen de ingresos tributarios alcance m¨¢ximos hist¨®ricos, habr¨ªa que preguntarse si son suficientes para financiar las pol¨ªticas p¨²blicas. Los expertos explican que el nivel de gasto p¨²blico viene determinado por las preferencias de los ciudadanos. Cuando eligen a partidos de izquierda, manifiestan su predilecci¨®n por pol¨ªticas que ampl¨ªen el Estado de bienestar. Y, al contrario, cuando se decantan por formaciones conservadoras, muestran su predisposici¨®n a reducir el tama?o del sector p¨²blico y bajar impuestos.
¡°Hacemos mal si solo nos fijamos en la cifra bruta¡±, explica Nacho ?lvarez, secretario de Econom¨ªa de Podemos. ¡°Es verdad que en t¨¦rminos absolutos recaudamos m¨¢s, pero en t¨¦rminos relativos estamos por debajo¡±, a?ade.
Hay un term¨®metro que ayuda a comprender la dimensi¨®n del gasto y los ingresos p¨²blicos: la comparaci¨®n internacional. Espa?a tiene un nivel de ingresos equivalentes al 37,9% del PIB, ocho puntos por debajo que la media comunitaria. Si Espa?a se quisiera equiparar a los pa¨ªses de la eurozona deber¨ªa recaudar unos 80.000 millones m¨¢s al a?o.
¡°Cuando comparamos d¨®nde tenemos carencias en t¨¦rminos relativos vemos que en Espa?a tenemos un menor peso de la fiscalidad directa sobre la indirecta¡±, explica ?lvarez. Precisamente, los impuestos directos (IRPF y sociedades) son los m¨¢s redistributivos. Este profesor de Econom¨ªa se?ala que buena parte del diferencial est¨¢ en la fiscalidad sobre el capital, por eso aboga por elevarla.
El alza de la recaudaci¨®n ha permitido recuperar en muchas ¨¢reas el nivel de gasto p¨²blico precrisis ¡ªun nivel no desde?able teniendo en cuenta que se viv¨ªa en una burbuja¡ª, pero las pol¨ªticas p¨²blicas requieren cada vez m¨¢s dinero. La inflaci¨®n, el envejecimiento de la poblaci¨®n, la creciente desigualdad, la necesidad de ayudar a los perdedores de la crisis y otros factores reclaman m¨¢s gasto p¨²blico.
El cap¨ªtulo que ha pegado un mayor bocado al alza de los recursos en los ¨²ltimos a?os es el de las pensiones. En la actualidad, se destinan unos 35.000 millones m¨¢s para jubilados que en 2007. Algo que explica, en parte, el f¨¦rreo debate pol¨ªtico sobre este asunto.
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