La Uni¨®n Europea tendr¨¢ una autoridad para conflictos laborales comunitarios

La Uni¨®n Europea tendr¨¢ a partir del a?o que viene una autoridad que podr¨¢ mediar y realizar inspecciones conjuntas con los pa¨ªses miembros en caso de conflictos laborales que vayan m¨¢s all¨¢ de las fronteras de un estado. Los Veintiocho dieron ayer luz verde a una agencia que, adem¨¢s, facilite la movilidad de trabajadores dentro del continente, aunque algunos pa¨ªses lamentaron que se hayan rebajado sus competencias respecto a la propuesta inicial. Eslovaquia, Letonia y Chipre avanzaron que aspiran a que sus capitales alberguen la instituci¨®n.

Los estados no siempre son capaces de hacer frente a un conflicto laboral por s¨ª solos. El de Ryanair, que amenaza con reabrirse en Navidad, supuso la cancelaci¨®n de cientos de vuelos despu¨¦s de que los trabajadores de la compa?¨ªa de cinco pa¨ªses ¡ªentre ellos, Espa?a¡ª decidieran ponerse en huelga. La aerol¨ªnea pretend¨ªa seguir aplicando la legislaci¨®n irlandesa a sus empleados en lugar de la del pa¨ªs donde ten¨ªan su residencia. Los sindicatos y la misma empresa acudieron a Bruselas en varias ocasiones, pero la Comisi¨®n Europea poco pod¨ªa hacer.

La soluci¨®n seguir¨¢ siendo la misma: la vigilancia de que las empresas cumplan las reglas corresponde a las autoridades nacionales. Y la negociaci¨®n colectiva estar¨¢ en sus manos. Ahora bien, Bruselas tendr¨¢ una agencia con la que, a petici¨®n de los pa¨ªses afectados, podr¨¢ hacer que las partes afectadas se sienten en el caso de ¡°disrupciones del mercado laboral a gran escala¡±, incluyendo reestructuraciones empresariales, cierres de f¨¢bricas o despidos colectivos.

El proyecto de la Comisi¨®n era m¨¢s ambicioso que el adoptado ayer por el Consejo. Austria (que tiene la presidencia rotatoria) tuvo que hacer concesiones para atraer a los pa¨ªses m¨¢s reacios a otorgar competencias. Los estados del Este aceptaron a rega?adientes que la autoridad puediera actuar en el transporte por carretera. En el lado contrario, Espa?a critic¨® que el proyecto inicial se haya ido diluyendo y que, por ejemplo, la futura autoridad no pueda mediar en asuntos que tengan que ver con la Seguridad Social.

Tal vez el punto que mejor ilustra el debate es el hecho de que, para satisfacer a varios pa¨ªses, Austria tuvo que cambiar el nombre de ¡°autoridad¡± por ¡°agencia¡± en el redactado. Lo lament¨® la comisaria de Empleo y Asuntos Sociales, Marianne Thyssen. ¡°Es el nombre m¨¢s claro para los ciudadanos, puesto que ser¨¢ el sitio que servir¨¢ para defender sus derechos¡±, sostuvo.

Aun as¨ª, varios pa¨ªses se mostraron confiados en que, durante las negociaciones que ahora encaran las tres instituciones ¡ªComisi¨®n, Consejo y Parlamento Europeo¡ª la entidad pueda recuperar algunas de esas cesiones. ¡°Se trata de luchar contra el dumping social¡±, record¨® Thyssen, quien quit¨® hierro a que en muchos apartados sea necesario que el estado colabore para poder intervenir. ¡°No esperaba inspecciones que no contaran con el acuerdo del pa¨ªs miembro¡±, ilustr¨® Thyssen.

La Comisi¨®n Europea no quiso ayer hablar del coste y las dimensiones de la estructura, aunque fuentes comunitarias aseguraron que este podr¨ªa rondar los 50 millones de euros. La instituci¨®n forma parte del llamado ¡°pilar social¡± de la UE y es uno de los proyectos prioritarios para el presidente del ejecutivo comunitario, Jean-Claude Juncker. ¡°Lo importante es que est¨¦ operativa una autoridad en la que los estados miembros trabajen de forma permanente intercambiando informaci¨®n para que el mercado interior funcione sin sobresaltos¡±, a?adi¨® Thyssen.

Entre sus funciones, est¨¢ la lucha contra los abusos y fraudes en el trabajo, facilitar la cooperaci¨®n y el intercambio de informaci¨®n para que se apliquen las directivas, la formulaci¨®n de an¨¢lisis y la advertencia de riesgos en la movilidad laboral, as¨ª como la mediaci¨®n en las disputas entre pa¨ªses miembros. Tambi¨¦n centralizar¨¢ varios programas ya en marcha para la movilidad laboral dentro de la UE.