Los mexicanos llegan para quedarse
Las inversiones procedentes de M¨¦xico se han multiplicado por 1,5 en los ¨²ltimos diez a?os
La entrada en Espa?a de inversiones procedentes de M¨¦xico se ha multiplicado por 1,5 en los ¨²ltimos diez a?os. La raz¨®n que suele esgrimirse cada vez que aumentan los capitales procedentes de Latinoam¨¦rica es que Espa?a opera como una ¡°puerta de entrada¡± a Europa. Pero la explicaci¨®n es, por excesivamente general, poco esclarecedora. Si se quiere empezar por el principio, habr¨ªa que indicar en primer t¨¦rmino la consolidaci¨®n de empresas mexicanas con liquidez y capacidad para invertir fuera de sus fronteras; empresas que, a diferencia lo que suced¨ªa en d¨¦cadas anteriores, no dependen ¨²nica y exclusivamente del petr¨®leo. Hace mucho tiempo que M¨¦xico dej¨® de ser, en t¨¦rminos empresariales, petrodependiente. Si algo demuestra la expansi¨®n del capital mexicano en Espa?a es que M¨¦xico ha dejado de ser, al menos en su imagen financiera, un pa¨ªs ¡°emergente¡±, sujeto pasivo de inversi¨®n procedente del exterior.
El punto de partida, como queda dicho, es que han aparecido empresas mexicanas con el m¨²sculo financiero necesario para invertir en el exterior y la disposici¨®n para hacerlo. Todo esto es m¨¢s f¨¢cil de decir que de hacer; para construir un empuje exportador de inversiones directas no s¨®lo hay que tener dinero, sino tambi¨¦n la capacidad para identificar cuales son los mercados que pueden ofrecer mayor rentabilidad. Una definici¨®n que, a su vez, se compone de c¨¢lculos m¨¢s de detalle que exigen an¨¢lisis especializados y, lo m¨¢s importante, olfato empresarial: estabilidad pol¨ªtica, regularidad econ¨®mica y laboral, facultad para empatizar con los entornos, evaluaci¨®n cl¨ªnica del tipo de cambio, potencialidad de expansi¨®n nacional y en el ¨¢rea econ¨®mica circundante del pa¨ªs donde se va a invertir... Cuando se consigue que todas las piezas engranen, suena el clic y M¨¦xico se convierte en un gran inversor extranjero en Espa?a.
No basta con esto, no obstante, para explicar todas las razones de la inversi¨®n mexicana en Espa?a. Hay motivaciones espec¨ªficas derivadas de las caracter¨ªsticas de la econom¨ªa mexicana y espa?ola. No es casualidad que el dinero de M¨¦xico se concentre en dos mercados fundamentales, con vastas conexiones entre s¨ª: el hotelero y el de restauraci¨®n. Para el capital de M¨¦xico, la econom¨ªa espa?ola no ha agotado todav¨ªa su potencial de expansi¨®n. Es un an¨¢lisis desde fuera que tiene su valor, en tanto en cuanto desmiente o no tiene en cuenta las alertas sobre la desaceleraci¨®n tur¨ªstica espa?ola, subrayadas en trazo grueso por el retorno de la competencia de otros pa¨ªses mediterr¨¢neos. El quid de esta aparente divergencia es que la rentabilidad se busca en las rentas tur¨ªsticas m¨¢s elevadas. En Espa?a existe una infraestructura desarrollada para este tipo de turismo de m¨¢s calidad que puede ser explotada.
La restauraci¨®n es otra diana segura. En la sociedad espa?ola las franquicias funcionan bien y todav¨ªa tienen un margen de crecimiento. El segmento apetecible del mercado no es el de la alta restauraci¨®n, porque el coste de la innovaci¨®n limita, cuando no impide, la rentabilidad, sino el de los precios medios y bajos; los espa?oles, como consecuencia de cambios sociales evidentes, necesitan comer fuera de casa cada vez con mayor frecuencia y esa es una espl¨¦ndida oportunidad de negocio. La inversi¨®n mexicana ha llegado para quedarse. Las inversiones espa?olas en Latinoam¨¦rica tambi¨¦n se quedaron. Una vez que la inversi¨®n prende y supera una fase de adaptaci¨®n, que en el caso de pa¨ªses con el mismo idioma es muy breve, la probabilidad de permanencia se aproxima al 80%.
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