Cr¨¦dito y empleo
Atacar a la banca en esta crisis es como escupir con el viento en contra
El paradigma antes de la pandemia era que la banca era un negocio que generaba beneficios millonarios y que hab¨ªa que ponerle un impuesto extraordinario para recuperar las ayudas p¨²blicas que se dieron al sector en la anterior crisis. Tras el tsunami del virus, ahora empezamos a ver los destrozos. Hay un mill¨®n de personas que han perdido su puesto de trabajo, eliminando el efecto estacional, y un mill¨®n en expedientes de regulaci¨®n temporal de empleo (ERTE). El consumo de agua en julio sigue muy por debajo del de julio del pasado a?o, lo cual anticipa que la recuperaci¨®n ser¨¢ muy lenta.
Uno de cada tres hogares, seg¨²n la encuesta de condiciones de vida, no ten¨ªa capacidad de afrontar imprevistos. Si han perdido el empleo y ten¨ªan cr¨¦ditos o hipotecas impagar¨¢n. La banca, con buen criterio, ha renegociado las condiciones de decenas de miles de familias con problemas durante la pandemia. Pero si su situaci¨®n no mejora no podr¨¢n pagar, incluso aunque reciban el ingreso m¨ªnimo vital.
La situaci¨®n financiera de las empresas antes del confinamiento era muy vulnerable, especialmente en el caso de las pymes y sobre todo de las micropymes de menos de 10 trabajadores, que son la inmensa mayor¨ªa. Los pr¨¦stamos del Instituto de Cr¨¦dito Oficial (ICO) les han aliviado la situaci¨®n de liquidez. Pero cuando en abril del pr¨®ximo a?o tengan que devolver el principal del cr¨¦dito muchas no podr¨¢n pagarlo si sus ventas no mejoran. Especialmente dram¨¢tica ser¨¢ la situaci¨®n de buena parte del sector tur¨ªstico, restauraci¨®n, ocio y cultural.
Alemania, que gestion¨® mejor la pandemia y concedi¨® ayudas como los ERTE, fue el pa¨ªs con menor ca¨ªda del producto interior bruto en el segundo trimestre. Espa?a ha copiado el modelo alem¨¢n. El Gobierno de Angela Merkel ha dado ayudas masivas a sus empresas, incluidos sus bancos, para sostener el aparato productivo y evitar su cierre, que acabar¨ªa en el despido de todos sus trabajadores.
En Espa?a se est¨¢ preparando un fondo de ayudas a sectores estrat¨¦gicos similar al alem¨¢n. Pero el sector bancario sigue estigmatizado. El supervisor y el regulador bancario europeo acaban de confirmar que la solvencia de la banca espa?ola es superior a la de 2008, no as¨ª en el caso de la banca alemana. Si alguna entidad necesita capital ser¨¢n instituciones europeas las que lo decidan, como sucedi¨® con el Banco Popular.
Ser¨ªa recomendable dejar de estigmatizar al sector en Espa?a, ya que para recuperar el empleo y reducir el impacto provocado por la pandemia es condici¨®n necesaria que evitemos una restricci¨®n del cr¨¦dito. La banca, en esta ocasi¨®n, no es la causa de la crisis, sino v¨ªctima de ella. Igual que muchas familias y empresas. Las p¨¦rdidas en cr¨¦ditos al sector hotelero van a ser millonarias, pero nadie pod¨ªa prever que la llegada de turistas caer¨ªa el 100% durante cuatro meses, como ha sucedido.
La mayor¨ªa de entidades registrar¨¢n p¨¦rdidas, pero no necesitar¨¢n ayudas p¨²blicas. Bastar¨ªa con dejar de tomar decisiones que les aumenten los costes, lo que se traducir¨ªa en menos cr¨¦dito. Atacar a la banca en esta crisis es como escupir con el viento en contra.
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