Las divisas se contagian de la covid-19
El dinero se mueve hacia el euro ante la ca¨ªda de tipos del d¨®lar y su incertidumbre pol¨ªtica y sanitaria
La subida del euro frente al d¨®lar era una de esas expectativas incumplidas durante a?os. Pese a la insistencia de los analistas en que la divisa europea deb¨ªa fortalecerse frente al todopoderoso billete verde, la subida nunca llegaba. Ha hecho falta la covid-19 para hacer realidad este pron¨®stico. En poco m¨¢s de tres meses el euro se ha revalorizado un 9% frente al d¨®lar para volver a niveles de 2018, en torno a los 1,18 d¨®lares. Un alza tan r¨¢pida y pronunciada que no se produc¨ªa desde hace una d¨¦cada.
Estos movimientos al calor de la pandemia global han modificado el mapa de las divisas en el mundo. Los pa¨ªses con econom¨ªas emergentes han sido los que m¨¢s han sufrido. Destaca la lira turca, que ha perdido un 30% de su valor frente al euro; el real brasile?o, con una ca¨ªda superior al 40%, o el peso mexicano, que se ha dejado el 22% en relaci¨®n con la moneda ?europea. Un desplome de las divisas emergentes que tendr¨¢ efectos muy negativos en las compa?¨ªas espa?olas con intereses en estos pa¨ªses a la hora de traducir sus beneficios desde las divisas locales en las que facturan a euros.
?nicamente el franco suizo lo ha hecho ligeramente mejor, pero el yen japon¨¦s o el yuan chino tambi¨¦n han sucumbido a la fortaleza del euro. Ahora bien, la gran batalla se libra frente al d¨®lar estadounidense: al comienzo de este complicado 2020 hac¨ªan falta 1,12 d¨®lares para adquirir un euro y ahora son necesarios 1,18 d¨®lares (al inicio de esta semana roz¨® los 1,20 d¨®lares). Eso s¨ª, a mediados de marzo, en plena pandemia europea, el euro lleg¨® a bajar hasta los 1,06 d¨®lares para luego iniciar este rally con fuerza.
En el complicado mercado de divisas con numerosos elementos en juego, los analistas consultados no se ponen de acuerdo sobre las expectativas de las monedas. Hace solo una semana Bank of America revisaba al alza el euro frente al d¨®lar, bajo dos premisas: el periodo de elecciones en Estados Unidos, que se celebrar¨¢ en noviembre, con la incertidumbre a?adida a este proceso, y unos malos datos de la evoluci¨®n de la pandemia en comparaci¨®n con Europa. ¡°Revisamos al alza nuestro perfil de previsi¨®n euro/d¨®lar con un nuevo objetivo de fin de a?o de 1,14 d¨®lares por euro y a finales de 2021 de 1,20 d¨®lares¡±, explican en su informe.
Sin embargo, el sentimiento del inversor ha cambiado radicalmente en los ¨²ltimos meses. Cuando el euro baj¨® a 1,06 d¨®lares, el d¨®lar ejerc¨ªa su papel de activo refugio mundial, pero ha dejado temporalmente de cumplir esa misi¨®n. Las ayudas de todos los bancos centrales y los programas de inyecci¨®n de dinero en las econom¨ªas han cambiado la percepci¨®n del riesgo, que ahora es mucho menor que hace tres meses, y, por tanto, el d¨®lar pierde parte de su atractivo.
Los analistas de Bankinter se muestran m¨¢s optimistas respecto al d¨®lar, aunque consideran que ¡°la reapertura de las econom¨ªas alivia su condici¨®n como divisa de reserva por excelencia. La mayor coordinaci¨®n europea en torno al Fondo de Recuperaci¨®n y la posibilidad de emitir deuda conjunta para su financiaci¨®n refuerzan la cohesi¨®n del grupo y reducen la debilidad del euro. Una posici¨®n de partida m¨¢s s¨®lida y las medidas contundentes de la Reserva Federal (Fed) y el Gobierno sientan las bases para una recuperaci¨®n vigorosa a final de a?o. En un a?o electoral, un d¨®lar sostenido ser¨¢ esgrimido como s¨ªntoma de normalidad econ¨®mica. Estimamos un rango del euro/d¨®lar para finales de 2020 en 1,10/1,15 y 1,12/1,17 para 2021¡±, indican.
Mobeen Tahir, director asociado de investigaci¨®n de Wis?dom?Tree, plantea tambi¨¦n el escenario del d¨®lar/euro en t¨¦rminos de empeoramiento o mejora de la confianza en las distintas econom¨ªas. Y se pregunta c¨®mo afectar¨¢ un cambio en el sentimiento econ¨®mico y de riesgo a los mercados de activos. As¨ª, un horizonte de menor confianza en la recuperaci¨®n ser¨¢ beneficioso para el d¨®lar, que volver¨¢ a ejercer su funci¨®n de refugio. Hay que tener en cuenta la fuerte correlaci¨®n entre el comportamiento del d¨®lar y el oro (cotiza en d¨®lares) y las Bolsas estadounidenses, que se abaratan por la debilidad del billete verde.
Tipos reales
Adem¨¢s del peso del sentimiento en el mercado, existen razones m¨¢s palpables que explican este debilitamiento del d¨®lar. Entran en juego los tipos de inter¨¦s reales como elemento decisivo en los movimientos de capitales desde unas divisas a otras. Los tipos reales se calculan restando la inflaci¨®n a los tipos que se ofrecen en los mercados. Con datos del pasado mes de julio, los precios en Estados Unidos subieron un 1% en tasa interanual, mientras que el IPC armonizado de la eurozona est¨¢ en el 0,4%. Ambas econom¨ªas tienen sus tipos de intervenci¨®n en 0%.
Tomando como referencia el bono a 10 a?os, en Alemania ofrece actualmente una rentabilidad negativa del 0,442%, mientras que su misma referencia de Estados Unidos se sit¨²a en el 0,685% positivo. El bono estadounidense abr¨ªa el a?o en el 1,886% de rentabilidad, mientras que el alem¨¢n estaba en el -0,187%.
Ahora, el bono americano y el alem¨¢n ofrecen tipos reales negativos si se descuenta la inflaci¨®n, del -0,32% y del -0,8%, respectivamente. Un fen¨®meno que no hab¨ªa ocurrido nunca. Esta es la clave para los analistas de Renta 4 de la ca¨ªda del d¨®lar frente al euro. ¡°Pueden buscarse muchas explicaciones a la actual fase de debilidad del d¨®lar, como por ejemplo la falta de acuerdo entre republicanos y dem¨®cratas para consensuar el nuevo programa de apoyos a la econom¨ªa, pero realmente lo que mejor explica el comportamiento es la evoluci¨®n de los tipos de inter¨¦s reales en los bonos del Tesoro americano y su comparaci¨®n con los tipos de inter¨¦s reales del bono alem¨¢n¡±. Y a?aden: ¡°Ese colapso en EE UU de los tipos de inter¨¦s reales, que no se hab¨ªa producido en esa medida en la crisis de 2008, explica de forma simult¨¢nea la ca¨ªda del d¨®lar, la subida de las Bolsas y la subida del oro. La Fed no fue tan agresiva en 2008 como lo est¨¢ siendo ahora. Seguimos apostando por una banda de precios del euro frente al d¨®lar entre 1,05 y 1,20 d¨®lares por euro¡±, concluyen.
Una debilidad favorecida por la Fed
La semana pasada se celebr¨® la reuni¨®n ¡ªesta vez telem¨¢tica¡ª de Jackson Hole, donde anualmente se re¨²nen los principales banqueros centrales del mundo, as¨ª como altos directivos de bancos y empresas para hablar de pol¨ªtica monetaria. Se cerr¨® con un mensaje de relajaci¨®n monetaria en Estados Unidos. El presidente de la Reserva Federal Estadounidense (Fed), Jerome Powell, apost¨® por flexibilizar su objetivo de inflaci¨®n fijado en el 2% que supedita a otras variables econ¨®micas como la creaci¨®n de empleo.
De esta manera, y de acuerdo a lo que ya hab¨ªan manifestado otras Reservas Federales de Estados estadounidenses, se optar¨ªa por fijar una horquilla de oscilaci¨®n de la inflaci¨®n y no mantener esa rigidez con el 2%. Esto supone tipos bajos para Estados Unidos por un periodo de tiempo m¨¢s prolongado y, por tanto, debilidad del billete verde, que pierde competitividad con tasas inferiores. Los inversores echaron en falta una mayor claridad por parte de Powell respecto a un calendario de tipos a medio y largo plazo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.