Una inyecci¨®n de optimismo en lo peor de la crisis
Los analistas conf¨ªan en que la vacuna ahuyente los augurios m¨¢s oscuros y acelere la recuperaci¨®n econ¨®mica
Cautela, mucha cautela, y verbos perennemente conjugados en condicional. Pero tambi¨¦n una potente inyecci¨®n ¡ªnunca mejor dicho¡ª de optimismo en tiempos de sequ¨ªa total de buenas noticias. A diferencia de otras crisis ¡ªcomo la financiera de la d¨¦cada pasada, que en el sur de Europa mut¨® en hidra de siete cabezas¡ª, el final de la sacudida econ¨®mica del coronavirus llegar¨¢ cuando se pueda arrancar de cuajo el problema sanitario que est¨¢ en su origen. Y ese d¨ªa, tras el anuncio de Pfizer, parece m¨¢s cercano por primera vez en 10 meses, desde que se sinti¨® la primera ola expansiva de la covid-19.
La vacuna, cuando llegue, ser¨¢ el gran hito de la pandemia. El que empezar¨¢ a poner punto final a la mayor recesi¨®n global contempor¨¢nea: con la econom¨ªa funcionando a medio gas desde hace meses, la inmunizaci¨®n supondr¨¢ retirar la gran barrera que impide al crecimiento despegar. As¨ª lo ven la mayor¨ªa de la decena de economistas consultados por EL PA?S, que valoran el avance de la farmac¨¦utica estadounidense como una muy buena noticia siempre sujeta a las reservas a que obliga cualquier avance m¨¦dico a¨²n en fase de pruebas.
2020 ya se puede dar por perdido, y ninguna soluci¨®n m¨¦dica taponar¨¢ la sangr¨ªa, pero el rumbo de 2021 y 2022 puede cambiar en gran medida si se confirma en las pr¨®ximas semanas lo avanzado el lunes por la farmac¨¦utica estadounidense Pfizer. ¡°Cuando la vacuna est¨¦ realmente disponible eso acabar¨¢ con la pandemia¡±, sintetiza el director del think tank bruselense Bruegel, Guntram Wolff. ¡°A¨²n estamos lejos de eso, pero cuando llegue ese d¨ªa nuestras econom¨ªas podr¨¢n finalmente recuperarse: el anuncio es, ciertamente, una muy buena noticia¡±. Una nueva que llega, adem¨¢s, ¡°algo antes de lo esperado por los mercados financieros: es, sin lugar a dudas, un factor para revisar al alza nuestras previsiones de PIB en tanto que los Gobiernos podr¨¢n aliviar las medidas de distanciamiento social m¨¢s r¨¢pido de lo que cre¨ªamos¡±, a?ade Sylvain Broyer, economista jefe para Europa de la agencia de calificaci¨®n de riesgos S&P. ¡°Habr¨¢ un boom de consumo e inversi¨®n¡±, atisba Ugo Panizza, profesor del Graduate Institute. ¡°Pero tomar¨¢ tiempo regresar al punto de partida: ni mucho menos ser¨¢ inmediato¡±.
La mayor¨ªa de las proyecciones econ¨®micas de casas de an¨¢lisis, consultoras, bancos y dem¨¢s actores del mercado ya contemplaban la llegada de una vacuna ¡ªo, en su defecto, de un f¨¢rmaco eficaz contra los s¨ªntomas m¨¢s graves¡ª para la segunda mitad de 2021, por lo que cualquier potencial adelanto sobre ese calendario ¡ªest¨¢ por ver¡ª es m¨²sica celestial para los o¨ªdos. ¡°Sin duda, el gran avance de Pfizer es la efectividad: un 90% es mucho, mucho m¨¢s de lo que esper¨¢bamos¡±, apunta por tel¨¦fono Neil Shearing, jefe de an¨¢lisis de Capital Economics: a mayor eficacia, mayor inmunidad y, por tanto, tambi¨¦n un regreso m¨¢s ¨¢gil a la actividad.
¡åSi se consiguiera empezar a vacunar pronto, ah¨ª s¨ª cambiar¨ªan mucho nuestras previsiones, con una recuperaci¨®n mucho m¨¢s r¨¢pida en los primeros meses de 2021¡å, apunta ?ngel Talavera, responsable para Europa de Oxford Economics. ¡°Y cuanto m¨¢s dura una crisis, mayor es el riesgo de da?o permanente a la econom¨ªa y de que derive en algo peor: si la situaci¨®n se alargase, ser¨ªa mucho m¨¢s dif¨ªcil mantener las pol¨ªticas de apoyo ¡ªERTE, avales¡¡ª que precisamente buscan hacer de puente hasta que haya soluci¨®n m¨¦dica¡±.
¡°Es un ancla en un momento de incertidumbre radical, y esto es buen¨ªsimo: por primera vez en casi un a?o tenemos un escenario en el que podremos empezar a comportarnos de nuevo de manera racional¡±, apunta Jos¨¦ Juan Ruiz, execonomista jefe del Banco Interamericano de Desarollo (BID). ¡°Cambiar¨¢ totalmente el juego¡±, agrega Xos¨¦ Carlos Arias, catedr¨¢tico de Pol¨ªtica Econ¨®mica de la Universidad de Vigo. Y lo har¨¢ para todos, tanto en lo epidemiol¨®gico como en la siempre m¨¢s prosaica rama econ¨®mica: ¡°La salida ser¨¢ igual de incierta que la entrada a la crisis: son aguas desconocidas, pero mi percepci¨®n es que puede ser m¨¢s r¨¢pida y m¨¢s intensa de lo que pensamos¡±.
Con todo, tambi¨¦n como siempre, las alegr¨ªas ir¨¢n por barrios: no todos los pa¨ªses ni todas las industrias se beneficiar¨ªan por igual. En clave geogr¨¢fica, los pa¨ªses m¨¢s dependientes del turismo ¡ªEspa?a, Italia, Portugal y Grecia en la UE; el Caribe en Am¨¦rica¡ª ver¨ªan pr¨¢cticamente despejado un horizonte que ahora luce muy, muy negro. Y en clave sectorial, adem¨¢s del transporte y la hosteler¨ªa ¡ªde largo los m¨¢s golpeados¡ª, el comercio y el sector inmobiliario ¡ªen especial, los propietarios de oficinas¡ª ser¨ªan los m¨¢s favorecidos.
Hay, sin embargo, algunos peros que conviene no pasar por alto. Primero, que llevar f¨ªsicamente las dosis necesarias para lograr la inmunidad a todos los rincones del planeta ¡ªsi algo ha demostrado la covid es que, en una econom¨ªa globalizada, el virus llega a los lugares m¨¢s rec¨®nditos en tiempo r¨¦cord¡ª no ser¨¢ tarea f¨¢cil en una vacuna que debe ser transportada a 70 grados bajo cero. Segundo, que, como recuerda Barry Eichengreen, uno de los mejores historiadores econ¨®micos de nuestros d¨ªas, el porcentaje de poblaci¨®n que est¨¢ dispuesta a aplicarse las dosis necesarias para quedar inmunizada no es precisamente alto: del 60% en EE UU, con solo un 25% que dice que se aplicar¨ªa la primera soluci¨®n que vea la luz. Esas cifras le llevan a pensar que, haya o no vacuna pronto, la covid-19 seguir¨¢ lastrando la econom¨ªa durante tiempo.
Y tercero, aunque no menos importante, que incluso superados los obst¨¢culos log¨ªsticos y de persuasi¨®n a la ciudadan¨ªa, el regreso a la vida de la econom¨ªa no ser¨¢ c¨®mo pulsar el interruptor y encender la luz: ni siquiera una soluci¨®n efectiva evitar¨¢ cicatrices persistentes. ¡°El sentimiento sobre la inversi¨®n s¨ª cambiar¨¢ r¨¢pido, pero todo lo dem¨¢s tardar¨¢ en volver¡±, apostilla Alicia Garc¨ªa Herrero, jefa de an¨¢lisis del banco franc¨¦s Natixis para Asia-Pac¨ªfico. ¡°Los efectos de la incertidumbre seguir¨¢n: ahorraremos m¨¢s y habr¨¢ consecuencias duraderas. El mundo no va a ser el mismo y esto no acaba con una vacuna: quien piensa eso no ha entendido lo que est¨¢ pasando¡±.
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