La herencia m¨¢s grande de la historia
Los j¨®venes estadounidenses recibir¨¢n 54 billones de euros en 2030, pero los espa?oles tendr¨¢n que jubilarse para percibir ladrillos
Sobre los mileniales se ha escrito una Biblioteca de Alejandr¨ªa. Los cap¨ªtulos b¨¢sicos llevan los siguientes t¨ªtulos. Dif¨ªcilmente podr¨¢n acceder a una vivienda en propiedad. Sus salarios est¨¢n paralizados. Apenas tienen capacidad de ahorro. Sufren para pagar los alquileres. Pero en la misma frase cabe tambi¨¦n escribir que es una generaci¨®n (nacidos entre 1981 y 1996) arruinada y a la vez millonaria.
Vivimos tiempos dickensianos. Pura contradicci¨®n. En 2030, los mileniales estadounidenses heredar¨¢n de sus padres ¡ªla generaci¨®n del baby boom¡ª 68 billones de d¨®lares. Unos 54,2 billones de euros. De confirmarse ese dato, aportado por la inmobiliaria Colwell Banker, ser¨ªa la mayor transferencia de riqueza de los tiempos modernos. Hay cerca de 618.000 j¨®venes adultos (sobre todo, de 34 a 37 a?os) en ese pa¨ªs que son millonarios. Poseen entre 1 y 2,49 millones de d¨®lares en activos (de 900.000 a 2,25 millones de euros). Considerando que la generaci¨®n del milenio es m¨¢s peque?a que la de los boomers, la riqueza que recibir¨¢n estar¨¢ muy concentrada e ir¨®nicamente esto podr¨ªa contribuir a aumentar la inequidad. Nada importa. Las injusticias no detienen las tendencias econ¨®micas. El traspaso de dinero crece en una sociedad ya de por s¨ª muy desigual. En 2016, los estadounidenses recibieron 427.000 millones de d¨®lares, un 119% m¨¢s que en 1989. Sentados sobre esa fortuna, los expertos revelan, parad¨®jicamente, que esta generaci¨®n puede ser rica y a la vez estar sin blanca. ¡°El mejor de los tiempos, el peor de los tiempos¡±, escribi¨® Dickens.
The Center for Generational Kinetics, una consultora estadounidense que analiza estos contrasentidos, ha dividido a estos j¨®venes en dos para explicar lo que sucede. Por una parte, los mega-leniales. ¡°Est¨¢n trabajando, aumentando su patrimonio y sienten que su carrera progresa, aunque sea m¨¢s lento de lo que pensaban¡±, describe Jason Dorsey, su cofundador. De la otra, tensan la cuerda los me-leniales. ¡°Luchan por progresar y encontrar un punto de apoyo que mejore sus trabajos, sus carreras, sus objetivos financieros. Pero muchas veces se ven frustrados y piensan que dan vueltas en c¨ªrculo¡±. Esta generaci¨®n enorme ¡ª72,6 millones de j¨®venes, solo en Estados Unidos¡ª se ha fracturado. Algunos perciben que les va bien: ahorran, tienen ingresos altos; otros se encuentran perdidos, pese a dedicar los mismos a?os de duro trabajo. ¡°Estos grupos, a pesar de tener id¨¦nticas edades, no se identifican entre ellos porque son financieramente muy distintos¡±, advierte Dorsey. Dentro de este espacio tan amplio, los nacidos en los a?os ochenta son quienes tienen m¨¢s riesgo de convertirse en una generaci¨®n empobrecida, seg¨²n un informe de 2018 del Banco de la Reserva Federal de San Louis, pues han acumulado un 34% menos patrimonio por culpa de la Gran Recesi¨®n.
Pese a todo, ahora llega una cascada de dinero y cae la pregunta de si contribuir¨¢ a mitigar la desigualdad. ¡°El problema es que este dinero llegar¨¢ muy tarde para ayudar a los mileniales en su fase m¨¢s cara de la vida, cuando tienen que comprar su primera casa y criar a sus hijos¡±, reflexiona Maja Gustafsson, investigadora de la consultora brit¨¢nica Resolution Foundation. Una encuesta del a?o pasado muestra que esta generaci¨®n inglesa espera heredar cuando cumpla 61 a?os. A¨²n falta tiempo. En Espa?a, la espera ser¨¢ incluso mayor, pues tiene la tasa de mortalidad m¨¢s baja de la Uni¨®n Europea: 829 muertes por cada 100.000 habitantes. Un milenial espa?ol tendr¨ªa que aguardar ¡ªseg¨²n el informe Global Wealth Report de Credit Suisse¡ª hasta los 65 a?os para recibir su herencia. ¡°La generaci¨®n del baby boom est¨¢ m¨¢s sana y vivir¨¢ m¨¢s tiempo de lo que hab¨ªan previsto y esta transmisi¨®n de patrimonio no ocurrir¨¢ hasta dentro de m¨¢s de dos d¨¦cadas¡±, subraya Darsey.
Tampoco aqu¨ª la riqueza tiene mejor reparto. En 2019 hab¨ªa 979.000 personas con m¨¢s de un mill¨®n de d¨®lares en activos. Hace una d¨¦cada solo 172.000. En la otra orilla, existen 617.000 hogares, calcula Oxfam Interm¨®n, donde no entra ning¨²n ingreso y casi diez millones llegan con dificultad a final de mes. ¡°El problema de la desigualdad de ingresos se agravar¨¢ porque algunos j¨®venes heredar¨¢n dinero de sus padres mientras otros no. Y esa inequidad en la generaci¨®n del baby boom se transmite a los mileniales¡±, anota Charles Taylor, profesor de la escuela de negocios de la Universidad Villanova, en Pensilvania, quien advierte de su repercusi¨®n en la ralentizaci¨®n del ascensor social.
En Espa?a ¡°la herencia de los mileniales ser¨¢n piedras, ladrillo, porque ah¨ª se encuentra el 69% del ahorro de los ciudadanos¡±, observa Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universitat Pompeu Fabra (UPF). ¡°La desgracia es que los j¨®venes heredar¨¢n aquello que no pueden comprar, aunque, por lo menos, lo heredar¨¢n¡±. Los alquileres est¨¢n muy caros y los bancos son m¨¢s estrictos que antes en la concesi¨®n de hipotecas. Pese a todo, sus padres han comprado casas y la gran transferencia de riqueza entre las generaciones es cemento y mortero. ¡°Esto producir¨¢, salvo en las coronas centrales de las grandes ciudades, un goteo continuo de ventas y los precios se debilitar¨¢n, sobre todo en la Espa?a exterior y vaciada¡±, prev¨¦ Roberto Scholtes, director de Estrategia de UBS Espa?a. Y a?ade: ¡°En este entorno, f¨®rmulas como la hipoteca inversa [se usa la vivienda para obtener un cr¨¦dito hipotecario que se transforma en renta vitalicia] pueden ser una manera de generar ingresos¡±.
Los mileniales espa?oles van a heredar, cuando sean sexuagenarios, un activo muy il¨ªquido pero que refleja la idiosincrasia del pa¨ªs. En Estados Unidos, solo el 9% (acorde con gestora de patrimonios United Income) de las herencias son casas. El 46% de lo que se lega tiene forma de acciones, bonos y dinero en efectivo. Instrumentos l¨ªquidos. En Espa?a, en cambio, muchas personas heredar¨¢n un problema con pilares. ¡°No creo que el elemento que defina a esta generaci¨®n sea esa transmisi¨®n de riqueza. Estos j¨®venes [11,2 millones de espa?oles que tienen entre 20 y 39 a?os, seg¨²n el banco] llegar¨¢n a la cincuentena con una vida laboral que habr¨¢ sufrido m¨¢s interrupciones, m¨¢s cambios de trabajo y su salario habr¨¢ sido menor para intentar acumular riqueza¡±, expone Josep Mestres, economista de CaixaBank Research. Un futuro incierto en una generaci¨®n tan compleja como la Biblioteca de Alejandr¨ªa.
?Qu¨¦ har¨¢n los mileniales con su riqueza?
Desde hace un lustro, empresas, Gobiernos y organizaciones quieren entender a los mileniales. Hay estudios de todo tipo. Deloitte espera que la riqueza de esta generaci¨®n alcance este a?o los 24 billones de d¨®lares, PwC y UBS creen que 460.000 multimillonarios j¨®venes manejar¨¢n unos 2,1 billones de d¨®lares en la pr¨®xima d¨¦cada (una suma igual al PIB de 2015 de la India) y Accenture calcula que entre 2011 y 2050 la generaci¨®n del ¡®baby boom¡¯ (de 36 a 51 a?os) les dejar¨¢ 30 billones de d¨®lares. Pero obsesionados en medir el tama?o de la herencia, todos parecen ignorar la pregunta esencial. ?Qu¨¦ har¨¢n los mileniales con ese dinero?
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