Una mujer de 59 a?os logra una pensi¨®n vitalicia de su exmarido porque a su edad es ¡°improbable¡± que encuentre empleo

La pensi¨®n compensatoria es una figura recogida en el C¨®digo Civil que busca equilibrar los desajustes que puedan surgir entre los c¨®nyuges tras el divorcio, por el hecho de que uno de los dos (en la inmensa mayor¨ªa de casos, la mujer) haya dedicado m¨¢s tiempo a la familia, renunciando a su progreso laboral. Para su determinaci¨®n los jueces no solo atienden a la situaci¨®n econ¨®mica de cada uno, sino tambi¨¦n a la p¨¦rdida de oportunidades que ha supuesto el matrimonio.

La cuant¨ªa y la duraci¨®n de la pensi¨®n suelen provocar arduas batallas judiciales. As¨ª ha sucedido en el caso recientemente resuelto por la Audiencia Provincial de Ja¨¦n, que ha alargado la pensi¨®n compensatoria que un hombre deber¨¢ pagar a su exesposa, fijada en primera instancia en 10 a?os, hasta convertirla en vitalicia. La mujer, ama de casa de 59 a?os, carece de formaci¨®n y de experiencia laboral por su ¡°especial dedicaci¨®n a la familia¡±, explican los magistrados. Pero lo determinante, subrayan, es el contexto del mercado laboral que se encontrar¨¢ tras la separaci¨®n, que penaliza a los mayores, especialmente si son mujeres. Resulta ¡°altamente improbable¡± que encuentre trabajo, asevera la resoluci¨®n.

La pareja se cas¨® en 1984. Durante el matrimonio, ella asumi¨® el cuidado de sus tres hijos mientras ¨¦l trabajaba fuera del hogar. Treinta y cuatro a?os despu¨¦s, en 2018, decidieron divorciarse. El juzgado de primera instancia otorg¨® el uso de la vivienda y el ajuar dom¨¦stico a la exesposa. Tambi¨¦n fij¨® una pensi¨®n compensatoria a su favor de 150 euros mensuales, que deber¨ªa percibir durante 10 a?os. Ambos recurrieron la resoluci¨®n.

Por un lado, el hombre solicit¨® que el subsidio fuera suprimido o rebajado a dos a?os de duraci¨®n, al considerar que su exmujer a¨²n pod¨ªa acceder al mercado laboral. Ella, por su parte, aleg¨® que, con su edad, dif¨ªcilmente podr¨ªa encontrar un trabajo que le permitiera subsistir, sobre todo teniendo en cuenta su falta de experiencia y formaci¨®n. Asimismo, agreg¨® que dos de los hijos segu¨ªan viviendo con ella, a pesar de ser mayores de edad. Por ello, reclam¨® que la ayuda fuera de car¨¢cter vitalicio y un poco superior, de 175 euros mensuales.

Restablecer el equilibrio

Tras examinar las alegaciones, la audiencia provincial ha atendido la petici¨®n de la exesposa y ha establecido que la pensi¨®n sea de por vida. El tribunal argumenta que, dada su avanzada edad, resulta muy dif¨ªcil que la mujer logre ya un empleo o perciba los ingresos suficientes como para subsistir por otro motivo. Los magistrados destacan que su dedicaci¨®n a la familia le priv¨® de tener cualquier tipo de experiencia o trayectoria laboral, lo que se traduce en una falta de independencia patrimonial ¡°propia y aut¨®noma¡±. Una p¨¦rdida de oportunidades que se ve acrecentada por la corta edad (24 a?os) que ten¨ªa la recurrente cuando contrajo matrimonio.

Asimismo, subraya que la mujer ¡°no dispone actualmente de medio econ¨®mico alguno¡±, mientras que durante el tiempo de casada s¨ª contaba con el dinero que todos los meses le proporcionaba su ahora exmarido. No obstante, los jueces s¨ª rechazan su pretensi¨®n de elevar la cuant¨ªa del subsidio a 175 euros mensuales, al considerar que los 150 son una cantidad ¡°ajustada¡± teniendo en cuenta que los ingresos del exmarido tan solo ascienden a 900 euros mensuales.

Un asunto pol¨¦mico

La duraci¨®n de la pensi¨®n compensatoria es una cuesti¨®n altamente controvertida, generando resoluciones contradictorias entre los jueces en casos, a priori, muy similares. Ejemplo de ello es una sentencia del Tribunal Supremo de 2011 en la que rechaz¨® otorgar el subsidio de por vida a una divorciada. En este caso, la mujer tambi¨¦n carec¨ªa totalmente de experiencia laboral porque, desde que contrajo matrimonio, se dedic¨® a cuidar de la familia. No obstante, los magistrados denegaron que el subsidio fuera vitalicio al considerar que la exesposa, de 47 a?os, puso poco empe?o en buscar trabajo una vez divorciada, ya que ¡°se limit¨® a figurar como demandante de empleo en el INEM y a realizar dos cursos de formaci¨®n¡±.

Adem¨¢s, argumentaron que el tiempo que la madre dedicaba al cuidado de sus hijas (de 15 a?os) era muy escaso, ya que estas pasaban la mayor parte del d¨ªa en el colegio o en actividades extraescolares. Asimismo, el tribunal sugiri¨® que la mujer podr¨ªa haber mandado curr¨ªculos para trabajar de gu¨ªa tur¨ªstica, ya que ten¨ªa un t¨ªtulo universitario en esa materia, o ¡°podr¨ªa haberle pedido trabajo a su padre¡±, un conocido cantante de ¨®pera de la ciudad.

Por el contrario, la misma Audiencia Provincial de Ja¨¦n concedi¨® en febrero de 2019 la pensi¨®n vitalicia a una divorciada a pesar de que ella y su exmarido acordaron en el momento de la ruptura que el subsidio durar¨ªa ¨²nicamente seis a?os. Los magistrados consideraron que la mujer firm¨® el pacto sinti¨¦ndose presionada y ¡°bajo un estado de desequilibrio que le imped¨ªa discernir lo que hac¨ªa¡±.

Para la sala, el objetivo del convenio es restablecer la situaci¨®n econ¨®mica y laboral de la exesposa, ¡°pero ese desequilibrio econ¨®mico segu¨ªa existiendo¡±. Asimismo, recordaron que el matrimonio hab¨ªa sido de larga duraci¨®n (32 a?os) y la mujer se hab¨ªa dedicado por entero la familia, por lo que en el momento del divorcio carec¨ªa de experiencia laboral.