Escriv¨¢ plantea compensar el alza de las pensiones si caen los precios

El ministro de Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, ha definido ya la f¨®rmula para revalorizar las pensiones sin que los jubilados pierdan poder adquisitivo. Tras varias propuestas a los agentes sociales, Escriv¨¢ present¨® el lunes su ¨²ltima oferta: las subidas ser¨¢n con la inflaci¨®n media del a?o anterior. Pero habr¨¢ un mecanismo para absorber las alzas cuando el IPC sea negativo, como pas¨® en 2020, y as¨ª evitar que los pensionistas ganen a¨²n m¨¢s poder adquisitivo. En estos casos las prestaciones no subir¨¢n ese a?o, pero la ganancia obtenida por la inflaci¨®n negativa se compensar¨¢ en los tres a?os siguientes, seg¨²n fuentes de la negociaci¨®n. Esta es una de las patas de la primera fase de la reforma que Escriv¨¢ quiere tener lista antes de abril para satisfacer a Bruselas.

En 2020 los precios cayeron un 0,2% de media. En cambio, las pensiones, siguiendo las previsiones iniciales de inflaci¨®n, hab¨ªan subido a comienzos de a?o un 0,9%. Eso se tradujo en una ganancia de poder adquisitivo que se ha consolidado despu¨¦s. Para evitar esto ¡ªy el incremento de gasto que supone¡ª, la Seguridad Social ha preparado un nuevo mecanismo de revalorizaci¨®n anual que ha detallado a los sindicatos y las patronales en las negociaciones que tienen abiertas sobre la reforma de las pensiones.

El texto que les entreg¨® el pasado lunes empieza precisamente por este punto, la ¡°nueva f¨®rmula de revalorizaci¨®n para el mantenimiento del poder adquisitivo¡±. Para asegurar este objetivo, plantea una revalorizaci¨®n anual que, a diferencia de ahora, tomar¨¢ la inflaci¨®n media entre diciembre del ejercicio anterior y noviembre del siguiente. Es decir, se usar¨¢ el ?ndice de Precios al Consumo ya registrado y no una previsi¨®n que luego se compensa como se hace ahora. Adem¨¢s, cuando el IPC medio sea negativo, las pensiones no subir¨¢n y la diferencia se absorber¨¢ en los tres a?os siguientes en que haya que subir las pensiones. Esta propuesta modifica la inicial, que era tomar una media m¨®vil del IPC durante cinco a?os.

A falta de lo que suceda durante la negociaci¨®n con los agentes sociales, este futuro mecanismo de absorci¨®n solo se activar¨¢, l¨®gicamente, cuando los precios caigan.

Este es el primer punto de la primera fase de reforma de las pensiones que plantea Escriv¨¢ y que quiere tener lista r¨¢pido. Varias fuentes al tanto de las negociaciones con los agentes sociales hablan incluso de un par de semanas, aunque algunas se muestran esc¨¦pticas. A los sindicatos y empresarios no les convencen en absoluto las propuestas de la Seguridad Social. ¡°Es solo una propuesta del Gobierno que no es compartida por los agentes sociales en la mesa. Tiene que haber cambios sustanciales tanto en contenidos como en plazos¡±, apuntaban este viernes en una de las organizaciones que participan en la negociaci¨®n.

En esos contenidos est¨¢ el paquete de medidas para alargar la edad real de jubilaci¨®n y que se acerque as¨ª a la legal, que este a?o se sit¨²a entre los 65 y los 66 a?os (y llegar¨¢ a una franja entre los 65 a?os y los 67 en 2027). La primera de ellas ser¨ªa el veto a la llamada jubilaci¨®n forzosa pactada en los convenios colectivos. No obstante, este punto est¨¢ pendiente de la contrapropuesta que hagan conjuntamente los sindicatos y las patronales en la mesa de negociaci¨®n.

Jubilaci¨®n anticipada

El documento entregado el lunes tambi¨¦n concreta las restricciones a la jubilaci¨®n anticipada voluntaria, a la que puede accederse dos a?os antes de llegarse a la edad legal de jubilaci¨®n correspondiente. El planteamiento de la Seguridad Social es que los coeficientes reductores que se aplican se calculen por meses de adelanto sobre la edad legal de retiro y no por trimestres, como ahora. Para hacerlo, Escriv¨¢ plantea un periodo transitorio de tres a?os. El resultado final es que habr¨¢ pensiones m¨¢s bajas para quienes se acojan a esta modalidad y, por tanto, un menor atractivo para hacerlo.

Tambi¨¦n en el retiro parcial hay un cambio sustancial, pues se plantea que el jubilado no pueda concentrar en un a?o todo el tiempo de trabajo que le corresponde antes del retiro definitivo. Deber¨ªa trabajar ese tiempo durante cada uno de los a?os. Con ello se obstaculiza uno de los trucos que utilizan las empresas para renovar plantillas a menor coste, pero tambi¨¦n se dificulta el uso del contrato del trabajador sustituto del jubilado.

El siguiente retoque que se pone sobre la mesa son los incentivos en la jubilaci¨®n demorada a trav¨¦s de varias v¨ªas. Una es la mejora del premio que recibe quien decide continuar en el mercado laboral tras cumplir la edad legal, ya que la pensi¨®n se incrementar¨ªa para todos en un 4%. Este incentivo ahora se sit¨²a entre el 2% y el 4% en funci¨®n de los a?os cotizados. Otra propuesta es dar una cantidad a tanto alzado por cada a?o completo de cotizaci¨®n adicional.

Adem¨¢s de estos cambios, tambi¨¦n est¨¢ desglosada la senda para que el Estado pague con impuestos los gastos que se consideran impropios del sistema, siguiendo la terminolog¨ªa que utiliza el Pacto de Toledo en sus recomendaciones de noviembre del a?o pasado. Ese camino concluir¨¢ en 2023, como ya ha anunciado el ministro Escriv¨¢ en alguna ocasi¨®n.

Una vez salga adelante esta primera fase de la reforma, la intenci¨®n de la Seguridad Social es abordar en una segunda tanda la derogaci¨®n del actual factor de sostenibilidad (cuya aplicaci¨®n est¨¢ suspendida y vincula la pensi¨®n inicial a la esperanza de vida) y su sustituci¨®n por otro; la subida de las m¨¢ximas de cotizaci¨®n; la extensi¨®n del periodo de c¨®mputo a los 35 a?os; el acceso de las parejas de hecho a la pensi¨®n de viudedad, y el impulso de los sistemas complementarios de pensiones. Sin embargo, estas son las intenciones del Gobierno, pero no coinciden con las pretensiones de los agentes sociales.

A los empresarios y sindicatos no les convence el contenido de las propuestas de la Seguridad Social. Los primeros argumentan que todo el paquete para que la gente se jubile m¨¢s tarde acabar¨¢ por dificultar y encarecer la renovaci¨®n de las plantillas. A los segundos no les gusta ¡°el per¨ªmetro¡± de temas que se proponen. Tambi¨¦n creen que es el momento de abordar ya la cotizaci¨®n de los aut¨®nomos de acuerdo con los ingresos que perciben. Y sostienen que la intenci¨®n de la Seguridad Social de cerrar cuanto antes esta fase de negociaci¨®n es pr¨¢cticamente imposible.

Bruselas vigila con celo

La negociaci¨®n para reformar las pensiones va en paralelo con las conversaciones con Bruselas para recibir los fondos europeos. Estos se han vinculado a la aprobaci¨®n de reformas. Y Bruselas examinar¨¢ cada seis meses, antes de cada desembolso, que se cumple hito por hito con la hoja de ruta prevista. El hecho de que se haya llevado a octubre el aumento a 35 a?os del periodo de c¨¢lculo, uno de los puntos que m¨¢s ahorro conlleva y m¨¢s pol¨¦micos, implica que ser¨¢ un hito a tener en cuenta para librar estos fondos a final de a?o.

El conjunto de este plan de reformas est¨¢ a¨²n negoci¨¢ndose con la Comisi¨®n Europea. Y en este punto hay versiones algo discrepantes seg¨²n con qui¨¦n se consulte en el Ejecutivo: para unos, la reforma de las pensiones est¨¢ casi encarrilada y, aunque reconocen que Bruselas sigue pidiendo n¨²meros, consideran que Espa?a est¨¢ haciendo m¨¢s que el resto, tiene una mejor situaci¨®n de partida en el gasto en pensiones y, por lo tanto, bastar¨ªa con lo planteado. Para la otra parte, Bruselas cree que la reforma es insuficiente y pide mayor ambici¨®n. M¨¢xime cuando al inicio de la negociaci¨®n la Comisi¨®n intent¨® imponer un ajuste fiscal a cambio de los fondos. Pero esta exigencia se sorte¨® gracias a la cl¨¢usula que levanta la disciplina fiscal por la pandemia. Esto explicar¨ªa que el foco se ponga en las pensiones, cuyo d¨¦ficit supone una buena porci¨®n del agujero en las cuentas del Estado y que, adem¨¢s, una parte ahora se pretende pasar al presupuesto sin medidas tributarias que lo compensen. El d¨¦ficit de las administraciones p¨²blicas ya bordeaba el 3% del PIB en 2019, una cifra por la cual Europa inicia el procedimiento para poner en vigilancia fiscal a un pa¨ªs. Ahora el d¨¦ficit estructural podr¨ªa situarse en el 5%, seg¨²n el Banco de Espa?a. Y en el 7% seg¨²n la Comisi¨®n. De ah¨ª la importancia de la reforma de las pensiones.